14 Cosas por Ver en
la Profecía #1
Fred R. Coulter—9 Noviembre,
2013
www.idcb.org
Transcripción del video
Después de ver la situación con los musulmanes en el mundo
occidental, podemos entender un poco mejor las maquinaciones de Satanás el
diablo, y aquellas que Dios usa como corrección para Israel. {Refiriéndose a la
introducción del video} He planeado dar algunos sermones sobre sobre las 14
Cosas por Ver en la Profecía. Esto encaja perfectamente cuando hablamos
sobre la caída de Israel y el rey del norte. Va llegar el momento en que estas
cosas tendrán que abordarse.
Este sermón lo di hace como tres años, y ya ha pasado un poco de
tiempo desde entonces. Dolores y yo estábamos viendo un programa en el History
Channel sobre el libro de Apocalipsis. Es interesante que todos interpretan ciertas
cosas correctamente—porque Dios quiere que el mundo sepa ciertas cosas—pero hay
muchas cosas que interpretan de manera equivocada. Por ejemplo: Cuando hablan
sobre la Bestia y el anti-Cristo, dan a entender que ‘todas las personas buenas
de las iglesias que guardan el domingo van a ser raptadas secretamente y
llevadas al cielo.’ (Dicho artificialmente).
Tiempo después alguien me envió un DVD sobre la interpretación de
Apocalipsis 13 según los Adventistas del Séptimo Día. Ellos interpretan bien la
primera parte sobre la bestia y el anticristo, pero ¿Saben ustedes cómo
interpretan la profecía de la bestia que tiene aspecto de cordero pero que
habla como dragón? ¡Los Estados Unidos de América! Así que si no dejamos
las interpretaciones denominacionales y nos apegamos a las escrituras… vamos a
perdernos muchas cosas.
Entendamos algo muy importante: El conocimiento que Dios nos da
está disponible para todos… pero sólo si lo amamos y guardamos
Sus mandamientos; lo mismo sucede con el Evangelio. Usted podría predicar mucho
sobre el Evangelio aunque guardara el domingo, pero sería como tener unos
lentes empañados o unos binoculares desenfocados. Aquí está una de las claves
para entender la Palabra de Dios. Hay muchas cosas que podríamos cubrir
respecto a esto, pero no vamos a hacerlo ahora.
La Palabra de Dios está disponible para todos. Incluso en Jeremías
23—que por cierto hemos leído muchas veces concerniente a los falsos profetas—Dios
dijo: ‘Si ellos los hubieran hecho apegarse a Mi Palabra,
entonces hubieran hecho lo que Yo quería.
Es justo lo que hablábamos respecto a la Pascua. Si ustedes se
concentran en eso y lo hacen su objetivo—lo cual ha hecho Satanás—entonces
apartan a las personas del entendimiento del Nuevo Pacto y la renovación del
mismo. A todo esto súmenle las tradiciones. Así es como un poquito de levadura
leuda toda la masa, y el cristianismo del mundo [aunque tengan algo de
entendimiento] pierde el objetivo.
I Corintios 2:9 “Pero de acuerdo a como está
escrito, ‘El ojo no ha visto, ni el oído ha oído, ni han
entrado al corazón del hombre, las cosas que Dios ha preparado para
aquellos que lo aman.’”
¿Qué es el amor de Dios? La primera manifestación del mismo es: ‘Aquí
está el amor de Dios, que guardemos Sus mandamientos y Sus mandamientos no son
molestos.’ Jesús dijo: ‘Si me aman, guarden los mandamientos, a saber
los Míos.’ Tenemos que entender que Él también fue Señor del Antiguo
Testamento.
Si les echamos un vistazo a las siete iglesias en Apocalipsis 2 y
3, veremos que incluso en las iglesias de Dios sólo encontramos dos que en
realidad fueron fieles: La Iglesia de Esmirna fue fiel hasta la muerte; la
Iglesia de Filadelfia entendió más la Palabra de Dios porque fueron fieles en
guardarla y en hacerla. El resto de las iglesias tuvieron varios problemas:
·
Perdieron su primer amor
·
Adoptaron las tradiciones y enseñanzas de Satanás el diablo
·
Siguieron las enseñanzas de la Iglesia Católica Romana
·
Llegaron a un punto de agotamiento en el que casi estaban muertos
·
Después del reavivamiento, llegaron a un punto de tibieza en el
que todo se reduce a un club social.
Ellos no pueden ver porque las bendiciones de Dios los han cegado,
y se han centrado en lo que ellos mismos están haciendo. Dios los va a vomitar
de Su boca (lo cual ya ha hecho en el pasado) a menos que se arrepientan. Tiene
que haber arrepentimiento.
Así que hay que tener en cuenta lo siguiente para todos los que
aman a Dios: ¿Cuál es el grado de intensidad con el que usted ama a Dios? ¿Qué
les dijo Dios a los Laodiceanos? ‘Sean celosos y arrepiéntanse.’ Si
nosotros mantenemos el celo por Dios diariamente, entonces no resbalaremos en
todos los problemas descritos en Apocalipsis 2 y 3.
Verso 9: “‘...las cosas que Dios ha preparado para aquellos
que lo aman.’ Pero Dios nos las ha revelado por Su Espíritu…” (Versos
9-10). El conocimiento básico es este: Dios tiene que revelar las cosas que no pueden
ser descubiertas en la Biblia mediante lectura y observación.
“…porque el Espíritu examina
todas las cosas—incluso las cosas profundas de Dios” (verso 10). Vamos a
hablar sobre algunas de las cosas profundas de Dios.
Dwight Blevins, quien es músico y tiene mucho
conocimiento sobre el Calendario Hebreo Calculado, se dedica a hacer arpas. Él
escribió un libro de 250 páginas que habla sobre música y los tiempos del
calendario—del Calendario Hebreo Calculado—con los siete años bisiestos en los
que se añadieron 30 días extra. La manera en que todo encaja es absolutamente
fenomenal. Cuando lo lean, su cabeza prácticamente estallará.
He leído mucho sobre esto, y es increíble cómo
se acomodan todas las cosas. Hay quienes han establecido su propio calendario
hebreo calculado, y están perdiendo la marca. Este año guardaron la Fiesta de
Tabernáculos en octubre—30 días más tarde—porque aceptaron una premisa
equivocada sobre la luna nueva visible, y de que el primer día del primer mes
debe ocurrir antes del equinoccio de primavera. Ésta última no es una regla del
Calendario Hebreo Calculado.
¿Sabe Dios lo que está haciendo? Por
Supuesto. ¡Él es Dios! ¿Pueden los hombres mejorar lo que Dios ha
establecido? ¡No! Nosotros somos una creación; Él es el creador. Este
fue el rechazo y la vanidad de los hombres, comenzando con Adán y Eva y
posteriormente con Caín: ‘nosotros podemos hacer las cosas mejor
que Dios—Quien nos ha dado Sus mandamientos—y nosotros nos
acercaremos a Dios como nosotros queramos.’ Así es como se
formaron todas las religiones del mundo.
Ahí es donde las religiones que supuestamente
son cristianas comienzan a decaer—como si cayeran por una pendiente
pronunciada. Están cada vez más cerca de la destrucción total. Hay algunos que
sí hacen el intento, pero necesitan aprender la primera lección de amar a Dios
si quieren que Él les revele lo que está haciendo.
“porque el Espíritu examina todas las
cosas—incluso las cosas profundas de Dios. Porque ¿Quién entre los hombres
entiende las cosas del hombre excepto por el espíritu del hombre el
cual está en él?… (Versos 10-11). Con el espíritu del hombre, Dios nos
dio la habilidad para que podamos pensar, planear, y tener todas las cosas que
necesitamos para funcionar. Pero aun así estamos incompletos; necesitamos el
espíritu de Dios. El espíritu de Dios no mora mucho con aquellos que viven
en pecado. {Nota del sermón, El Espíritu Santo de Dios y los Siete Espíritus
de Dios, y cómo funcionan}.
Dios lidia con muchas personas, pero ¿Quiénes
son las que entienden el secreto del Señor? ¡Aquellas que verdaderamente aman
a Dios y le son fieles! Algunas de las cosas que vamos a hablar aún no han
sido entendidas por otras Iglesias de Dios, aunque si entienden algunas otras.
Cuando leí el libro Matando a Jesús de Bill O’ Reilly, me di cuenta de
que hizo un buen trabajo a pesar de sólo conocer la tradición católica. Pero al
rechazar gran parte de la Biblia como historia y verdad, y no entender el
Calendario Hebreo Calculado… él no entendió el significado de la Pascua.
“…En la misma manera también, nadie entiende
las cosas de Dios excepto por el Espíritu de Dios” (verso 11). Eso
significa realmente entender las cosas de Dios. ¿Qué es lo más importante que
debemos entender como seres humanos? No es sólo el amor y los mandamientos
de Dios, utilizando el Espíritu de Dios… sino que sólo el Espíritu de Dios
nos puede revelar lo malvada, engañosa, y despreciable que es la naturaleza
humana.
Por eso es que Dios a los cristianos nos ha
dado el trabajo de vencer, porque Dios quiere una mente convertida, limpia, y
que desarrolle el pensamiento de Cristo. Él no quiere que tengamos una religión
estúpida en la que todo mundo es arreado a la iglesia; y si usted es arreado a
la iglesia… entonces tal vez piense que sólo tiene que decir: ‘Si Señor, yo
creo,’ y de pronto ¡BAM! Califica para el rapto secreto.
Dios no le va a dar de Su Espíritu Santo a
nadie a menos que le obedezca. Verso 12: “Entonces no hemos recibido el
espíritu del mundo, sino el Espíritu que es de Dios, para que pudiéramos
saber las cosas graciablemente dadas a nosotros por Dios, Tales cosas también
hablamos, no en palabras enseñadas por sabiduría humana…” (Versos 12-13). No es
por filosofía.
Voy a hacer un pequeño paréntesis aquí: La
primera vez que fui llamado a conocer la verdad, sucedió un año antes de que
asistiera al Colegio Ambassador. Acababa de graduarme del colegio de San Mateo,
e iba a asistir a la Universidad de San Francisco. De hecho, acababa de
registrarme. La Universidad de San Francisco es una Universidad Católica
Jesuita. Así que ahí estaba, leyendo los artículos de La Pura Verdad. En
esa ocasión publicaron Las Dos Babilonias por Alexander Hislop, y
tomando el libro comencé a leer.
Después comencé a asistir a clases. Había
cruces por todos lados y fotos de Jesús. Esa fue una de las cosas que me
hicieron decir ‘hasta aquí,’ además de la siguiente. Uno pensaría que como
ellos se dicen ser cristianos, para poder entender los principios de la vida y
la creación… tendríamos que comenzar en Génesis— ¿cierto? Pues con ellos no.
Ahí teníamos que llevar la materia de Filosofía 101. También nos enseñaban
sobre la evolución y los primeros padres de la iglesia.
Un día mientras esperaba a que comenzara una
clase en el tercer piso del edificio, leí un segmento de la Biblia en La
Pura verdad, donde Jesús dijo: ‘Cuídense de los escribas y fariseos que
andan en túnicas largas y les gustan los saludos de aquellos en el
mercado—rabbi, rabbi.’ Estas cosas pasaban por mi mente mientras miraba el
centro de una pequeña plaza en el campus. Los sacerdotes Jesuitas salían ahí
cada mañana a leer su pequeño libro de oraciones en sus largos trajes cosacos.
Lo que más me hizo darme cuenta de la
realidad, era que cuando un estudiante se les acercaba para decirle ‘buenos
días padre,’ el sacerdote sólo asentiría con la cabeza. Ellos recibían sus
saludos. Lo único que pensaba dentro de mí era ‘Tengo que salirme de aquí.’ Era
como la sexta semana del primer semestre. Inmediatamente acudí a la oficina de
registro y me salí. Cuando abrí la puerta de la oficina de registro, me percaté
de un cuadro, por así decirlo… que medía cuatro por seis pies aproximadamente.
El cuadro era de Jesús con cabello largo y una corona de espinas sobre su cabeza.
Lo único que pensaba era ‘Tienes que salir de aquí ahora.’
Esa fue mi experiencia, y esto comprueba que
a menos que usted:
·
Ame a Dios
·
Le crea a Dios
·
Guarde Sus mandamientos
Usted no va a entender el camino de
Dios—punto. Usted puede llamarse cristiano. Usted puede tener billones de
seguidores, pero eso no hace ninguna diferencia.
“…sino en palabras enseñadas por el
Espíritu Santo…” (Verso 13). ¿Cómo fue escrita la Biblia? Por la inspiración
del Espíritu de Dios.’ Jesús dijo: ‘Las palabras que les hablo son Espíritu
y son Vida.’ Sí, si usted lee la Biblia podrá entender muchas cosas, pero eso
no significa que usted sea convertido. Eso no significa que usted ya ha
contestado el llamado. Usted tiene que acercarse a Dios a la manera de
Dios, porque ‘hay un camino que parece derecho al hombre, pero su fin
es camino de muerte.’
“…enseñadas por el Espíritu Santo para
comunicar cosas espirituales por medios espirituales. Pero el
hombre natural no recibe las cosas del Espíritu de Dios; porque son tonterías
para él, y no puede entenderlas porque son discernidas espiritualmente” (versos
13-14). Necesitamos entender esto.
Ahora veamos el esbozo de cómo vamos a
entender las 14 cosas en profecía. Esto nos lleva al #7.
El Fundamento: La Pascua y los Días Santos
La Pascua es un día; Panes Sin Levadura son
siete días. Después tenemos el conteo desde el primer día de la semana durante
Panes Sin Levadura, y contamos siete por siete = 49 días. El Quincuagésimo día
es Pentecostés.
Después tenemos las fiestas del otoño.
Tenemos Trompetas, Expiación, Tabernáculos, y el Último Gran Día. Tenemos siete
Días Santos, pero la Pascua—aunque es una Fiesta—no es un Día Santo por todo lo
que fue hecho en él cuando Jesucristo murió.
Otra cosa que también concierne a los Días
Santos, es que el Calendario Hebreo Calculado se calcula desde el primer día
del séptimo mes—el cual solía ser el primer día del año en la creación. Adán y
Eva fueron creados, ahí tenían el jardín para que pudieran comer de su fruto.
Tiene que haber sido en el otoño porque el fruto estaba listo para comerse.
Por eso Dios le dijo a Moisés que el primer
mes del año para los hijos de Israel sería en la primavera. Por eso tuvo que
decírselos, y por eso el Calendario Hebreo Calculado comienza en el primer día
del séptimo mes.
Si contamos los Días Santos comenzando desde
Trompetas en lugar del primer día de Panes Sin Levadura, tendríamos lo
siguiente:
·
Trompetas—uno
·
Expiación—dos
·
Tabernáculos—tres
·
Último Gran Día—cuatro
·
Primer Día de Panes Sin Levadura—cinco
·
Último Día de Panes Sin Levadura—seis
·
Pentecostés—siete
Cuando Jesús dijo: ‘Todos los que el Padre Me
ha dado, Yo levantaré en el último día,’ podemos entender que no va a ser en el
Último Gran Día, sino en Pentecostés. Hay otras siete cosas en las cuales también
se centra la profecía.
1. Israel—las diez tribus.
Originalmente eran doce, pero desde el
principio hubo una división predeterminada de las doce tribus de Israel.
¿Sabían ustedes que Josué era Efrainita y Caleb de la tribu de Judá? Así que
ahí tenemos las semillas de la casa de Israel y de Judá desde un principio.
2. Judíos
3. Jerusalén
Estamos viendo muchos acontecimientos concernientes
a Jerusalén. El último encabezado sobre Jerusalén en el periódico estaba
relacionado con la administración de Obama. Los judíos bombardearon el objetivo
donde almacenaban anti-misiles Rusos y los destruyeron.
La administración de Obama dejó que esto
apareciera en las noticias. El encabezado en Jerusalén decía: ‘¡TRAICIONADOS!’
porque se supone que había un acuerdo secreto. Si hay algo que Dios detesta, es
que se anden revelando secretos confiados. Si andamos divulgando
secretos ¡Vamos a pagar el precio!
4. Jesucristo—Su primera y Su segunda venida
5. La Iglesia—La verdadera Iglesia compuesta
por las Iglesias de Dios
6. El mundo
7. El Reino de Dios
Todas las profecías giran en torno a éstos. También
tenemos el esbozo de la Pascua y los Días Santos. Nota: El libro, El Plan de
Dios para la Humanidad Revelado por Su Sábado y Días Santos—está diseñado
para darles un entendimiento profundo sobre la Palabra de Dios.
Hay algo más que debemos entender sobre la
Palabra de Dios: No es como Twitter o Facebook. No podemos tener un resumen de
cosas de la Biblia y decir que ya la entendimos. Puede ser que conozca ciertas
cosas de la Biblia, pero para entenderla tenemos que aplicarnos en el Espíritu
de Dios.
Hoy en día las personas quieren un repaso
rápido. Así estamos entrenados. Sólo piensen en los millones de personas en
Twitter—que dicen todo en una sola oración. ‘He logrado mucho. Mandé un
twitter.’ Dios ha enviado Su Biblia. Piénsenlo. Hay otras siete cosas que
también tenemos que entender sobre la Biblia. Existen siete divisiones de la
misma:
1.
La Ley
2.
Los Profetas
3.
Los Escritos
4.
Los Evangelios y los Hechos
El primero está compuesto por cinco libros.
Los primeros cinco libros de la Biblia se conocen como ‘La Ley,’ o
‘Pentateuco.’ Se le llama pentateuco porque viene del número cinco. Ahí
tenemos:
·
Las enseñanzas de Dios
·
Las Leyes de Dios
·
La historia de los hijos de Israel
En el Nuevo Testamento tenemos:
·
Mateo
·
Marcos
·
Lucas
·
Juan
Los cuales
son:
·
Las leyes de Cristo
·
Las enseñanzas de Cristo y el
conocimiento de Quien es Él
·
La historia de la Iglesia desde sus
inicios—Hechos
Después de esto tenemos:
5. Las Epístolas Generales
Que vienen después del libro de los Hechos.
6. Las Epístolas de Pablo
7. El Libro de Apocalipsis
Para poder entender los libros de Apocalipsis
y de Daniel, debemos tener un conocimiento sólido y seguro de toda la Biblia.
Comencemos con las palabras de Jesús. Todo
esto requiere de participación activa. Dios quiere que seamos activos,
participativos, celosos, amorosos, y obedientes. Dios quiere que tengamos todas
estas cosas, porque él no le va a dar vida eterna a nadie hasta que haya
aprendido a amar y servir a Dios. Si hay algo que he aprendido de leer el
Antiguo Testamento, es esto: Más nos vale hacer lo que Dios dice, especialmente
si se trata de cosas Santas.
Déjenme darles un ejemplo: Dios les dio
instrucciones detalladas sobre el templo a Moisés y a Aarón—el tabernáculo, los
altares, y demás. Pero una cosa les dijo: ‘No traerán fuego extraño sobre Mi
altar.’ ¿Cómo se prendía el fuego para el altar? ¿Qué sucedió después de la
dedicación del templo? Sí, es cierto que ofrecieron ofrendas sobre el altar de
tierra… pero fue Dios quien comenzó el fuego sobre el altar del
templo, donde Él mismo puso Su presencia.
Dios les dijo a los hijos de Aarón que
mantuvieran el fuego ardiendo. Cuando Nadab y Abihu (los hijos de Aarón)
dejaron que el fuego se extinguiera, dijeron: ‘Vamos a prenderlo.’ ¿Y qué les
pasó? ¡Cayeron muertos porque no hicieron lo que Dios les dijo! También
hay otros ejemplos que podemos ver.
Veamos lo que le pasó a David, porque incluso
David fue perdonado por el asunto con Betsabé. Dios dijo: ‘Por cuanto hiciste
esto, vas a tener problemas en tu casa por el resto de tu vida.’ Algunos días
después Amnón violó a Tamar. Tenemos que entender que si Dios dice algo, lo
cumple.
Tenemos que entender lo que Dios nos ha
dado. Si nosotros queremos pelear contra Dios, más nos vale recordar lo que
dijo Jesús en Marcos 13:31: “El cielo y la tierra
pasarán, pero Mis palabras nunca pasarán. Pero concerniente a aquel día
y la hora, nadie sabe, ni siquiera los ángeles en el cielo, ni el Hijo,
sino solamente el Padre. Presten atención…” (Versos 31-33). Estén en guardia, vigilen y oren— especialmente en
nuestros días.
“…Presten atención,
estén vigilando y orando. Porque no saben cuando el tiempo está viniendo.
Es como un hombre viajando a un país lejano, dejando su casa y dando
autoridad a sus siervos, y a cada uno su obra, y ordenando al portero vigilar.
Estén velando, por tanto…” (Versos 33-15).
Noten que dice: “…velando y orando…” (Verso 33).
“…porque no saben cuándo el maestro de la casa está llegando: en
la noche, o a media noche, o al canto del gallo, o en la mañana; No sea
que él venga de repente y los encuentre durmiendo. Y lo que les digo, lo digo a
todos: ¡Velen!” (Versos 35-37).
Vamos a ver algunas de las cosas a las que
necesitamos estar atentos. Seguramente alguien dirá: ‘La Palabra de Dios se
contradice.’ A la mente carnal le gusta buscar contradicciones para rechazar
toda la Palabra de Dios. I Tesalonicenses 4 habla sobre la venida de Cristo.
I Tesalonicenses 5:1: “Ahora bien, concerniente a los tiempos y las temporadas,
hermanos, no hay necesidad que les escriba; Porque ustedes mismos entienden
perfectamente que el día del Señor vendrá exactamente como un ladrón viene
por la noche” (versos 1-2).
¿Cómo es que podemos saber los tiempos y las temporadas y aun así
no saber la hora? Cuando Jesús habló a los discípulos (como vemos en Marcos 13)
Ni Él mismo lo sabía. ¿Por qué? ¿Cómo es que podemos tener cierto conocimiento,
pero no saber el día ni la hora del retorno de Cristo? Sin embargo, ¿Qué es lo
que podemos decir al respecto? Decimos que Pentecostés representa la primera
resurrección— ¿correcto? ¡Así es! La Pascua fue el día en que fue
crucificado— ¿correcto? ¡Sí! Sabemos que trompetas es el día en el que
va aponer Sus pies sobre la tierra; eso no es problema cuando entendemos.
En Apocalipsis, Isaías 2, y Ageo 2, leemos que Dios va a sacudir
los cielos y la tierra. ¿Qué va a pasar con el tiempo cuando eso suceda? Inmediatamente
se muestra que la 3ra parte del día no va a brillar, que la 3era parte de la
noche no va a brillar, y que las estrellas no van a brillar. ¿Qué va a
pasar con la tierra? Se va a desviar de su órbita. Y cuando eso suceda… ¿Qué va
a pasar con el tiempo y los días? Van a ser alterados; nadie va a saber
el día ni la hora. A medida que veamos más profecías cumpliéndose, puede ser
que demos con el año. No hay problema con eso; no hay contradicción.
Con todo esto dicho, vayamos a Mateo 24 para ver lo que Jesús dijo
ahí. Debemos tomar en cuenta que vivimos en los tiempos del fin, y que Dios se
ha asegurado de que Su Palabra esté disponible para todos—y lo está. Está disponible
de manera auditiva, visual, y en todos los aparatos portátiles. La pregunta es:
¿Por qué está ahí? ¡Porque es un testigo para las naciones! En parte es
por eso, y también porque Mateo 24 tiene un cumplimiento dual
1.
Para los días de los apóstoles hasta la destrucción del templo
2.
Para el tiempo del fin, en el cual sería aún más comprensible
Tenemos comunicación instantánea alrededor del mundo. Puede ser
que usted esté viendo las noticias y que de repente aparezca un mensaje que
dice: ¡Noticia de última hora! ¿Recuerdan lo que pasó con el terremoto de
Japón? La noticia llegó de manera instantánea: ‘Terremoto gigante en Japón de
8.3 en la escala de Richter.’ Cuando recabaron más información, se dieron
cuenta de que fácilmente había llegado a 9.0. ¿Qué fue lo que sucedió? Es
verdad que hubo un Tsunami, ¡pero lo más impresionante es que la isla de
Japón fue movida 8 pies al norte y al oeste!
Para nosotros Mateo 24, Marcos 13, y Lucas 21, representan la
profecía de lo que va a suceder. ¡Nosotros lo sabremos! Para las
personas en los tiempos de los apóstoles esto se refería a la destrucción del
templo, pero vamos a ver que hay algunas profecías que aún no se han cumplido.
Mateo 24:32: “Ahora aprendan esta parábola de la higuera: Cuando
sus ramas ya se han hecho tiernas, y brotan sus hojas, ustedes saben que el
verano está cerca… [Hablando sobre Su segunda venida] …De la misma
manera, cuando vean todas estas cosas…” (Versos 32-33). Esto se
refiere a todos y cada uno de los acontecimientos.
Si tomamos una jarra y le decimos a alguien: ‘Llénala con agua,’ y
la persona solo la llena hasta ¾… vamos a decirle: ‘¿Por qué no llenaste la
jarra cómo te pedí?’ ‘Pensé que con esto sería suficiente.’ Al igual que en el
año 70 d.C., la destrucción de Jerusalén va a ser exactamente como dice en
Mateo 24. Y como aún no se cumplen todas las cosas, quiere decir que esto
también aplica para nosotros.
¿Qué les estoy diciendo? Que para entender Mateo 24 en su totalidad—a
pesar de que lo hemos leído una y otra y otra vez—debemos estudiarlo a la
luz de las comunicaciones y la tecnología moderna. Para que cuando estas
cosas sucedan nosotros lo sepamos.
Verso 33: “En la misma manera también, cuando vean todas estas
cosas, sepan que está cerca, incluso a las puertas.” ¿No es interesante?
¿Qué fue lo que Jesús les dijo a los Laodiceanos? ‘Yo estoy a la puerta y
toco; si algún hombre me abre Yo entraré y cenaré con él y él conmigo.’ Si
esas escrituras en Apocalipsis 3 aplican para usted, más vale que escuche y
abra la puerta. No vaya a ser que se arrepienta.
Verso 34: “Verdaderamente les digo, ésta generación…” Aquí se
refiere a la generación del tiempo del fin, no a la generación del año 70 d.C.
Esa sólo fue una tipificación del cumplimiento.
“…no pasará en ninguna manera hasta que todas estas cosas hayan
tenido lugar. El cielo y la tierra pasarán, pero Mis palabras nunca pasarán…
[Después repite lo que dijo en Marcos 13] …Pero concerniente a ese día, y a la
hora, nadie sabe, ni siquiera los ángeles del cielo, sino solamente Mi Padre.”
(Versos 34-36).
(Pasar a la pista siguiente)
Ahora pasemos al libro de Daniel. Se puede decir que este libro es
semejante a una cerradura, y el libro de Apocalipsis a una llave. No podemos
entender Daniel sin el Apocalipsis y viceversa. Hagamos un breve repaso sobre
el libro de Daniel:
Daniel 2 habla sobre la imagen que vio Nabucodonosor. Nosotros
sabemos que todo termina con la venida del Reino de Dios y el regreso de
Jesucristo. No hay absolutamente ningún periodo de tiempo involucrado para
entender cuándo sucederá esto… a excepción de las historias de Babilonia,
Persia, Grecia, y Roma. Roma es un caso diferente porque el Imperio Romano
tiene varios colapsos y resurgimientos. Así que eso lo hace aún más complicado.
En Daniel tenemos a Sadrac, Mesac y Abed-Nego; ellos no se
quemaron.
Daniel 4 no fue escrito por Daniel; verso 1: “Nabucodonosor el
rey, a todos los pueblos, naciones, e idiomas, que habitan en toda la tierra…”
Aquí hay un mensaje perpetuo para todas las naciones y pueblos.
Verso 2: “Me pareció bien declarar las señales y maravillas que el
Altísimo Dios ha hecho por mí. ¡Cuán grandes son Sus señales! ¡Y cuan
poderosas son Sus maravillas! Su reino es un reino eterno, y Su dominio es
de generación a generación.” (Versos 2-3). Nabucodonosor escribió Daniel 4.
El capítulo describe cómo fue elevado en su vanidad, y cómo Dios
le reveló que Él es Quien establece sobre las naciones a los más bajos de entre
los hombres. ¡Es muy interesante! Podemos leerlo de principio a fin.
Daniel 5 muestra el declive y la caída del imperio Babilónico,
gobernado por el rey Belsasar. Su imperio cayó en esa misma noche. La última
vanidad contra Dios en ese banquete fue haber tomado los vasos del templo de
Jerusalén, y utilizarlos para beber de ellos.
En Daniel 6—vemos que el dominio de Babilonia pasa a ser de los persas.
En Daniel 7—una vez más vemos a todos los reinos de este mundo
dirigirse hacia el retorno de Cristo. Aquí ya entendemos un poquito más al
respecto:
Daniel 7:24: “Y los diez cuernos salidos de este reino son diez
reyes que se levantarán. Y otro se levantará tras ellos. Y él será diferente
del primero, y dominará a tres reyes. Y hablará palabras contra el
Altísimo, y agotará a los santos del Altísimo, y pensará cambiar los tiempos
establecidos y las leyes. Y ellos serán entregados en sus manos hasta un tiempo
y tiempos y medio tiempo.” (Versos 24-25).
Vamos a ver que hay un cumplimiento dual de esto para aquel
tiempo, y también para el retorno de Cristo. Porque todo esto nos conduce al
regreso de Cristo:
Verso 26: “Pero el juicio se sentará, y su dominio será quitado
para ser consumido y ser destruido hasta el fin. Y el reino y dominio, y la
grandeza del reino bajo todo el cielo, será dado al pueblo de los santos del
Altísimo, Cuyo reino es un reino eterno. Y todos los reinos lo servirán
a Él y Lo obedecerán.” (Versos 26-27).
No hay un tiempo definido—sólo sabemos que va a suceder en algún
momento del futuro. El libro de Apocalipsis es el único que nos puede ubicar un
poco más en cuanto al tiempo.
Daniel 8:23—volvemos al mismo punto de nuevo: “Y en el último
tiempo de sus reinos, cuando los transgresores hayan llegado a la plenitud, un
rey, feroz de semblante y entendiendo frases oscuras, se levantará… [Esa es la
venida del anti-cristo] …Y su poder será enorme, pero no por su propio poder… [Sino
por el poder de satanás el diablo] …Y él destruirá maravillosamente, y
prosperará y hará su propia voluntad, y destruirá al poderoso y al
pueblo santo” (versos 23-24). Esto aplica tanto para judíos como para
cristianos.
Verso 25: “Y también a través de astucia él hará prosperar el
engaño en su mano. Y se magnificará a sí mismo en su corazón… [Ya
veremos el cumplimiento de esto en II Tesalonicenses] …y en tiempo de seguridad
destruirá a muchos… [ya lo veremos cuando suceda] …Él también se
levantará contra el Príncipe de príncipes... [Contra el regreso de Cristo]
…Pero será roto sin una mano humana.”
Daniel 8 termina con la revelación sobre los reinos gentiles entre
ese tiempo y el regreso de Cristo.
Daniel 9 habla sobre la restauración de Jerusalén y la venida del
Mesías.
Daniel 10—habla sobre algunas cosas concernientes a Jerusalén.
En Daniel 11—tenemos la historia de aquella parte del mundo, y al
final nos habla sobre el rey del norte y el rey del sur.
Daniel 12 nos habla sobre las cosas al final de los tiempos.
Volvamos a Daniel 9 para repasar esto a detalle. De nuevo, hay
ciertas cosas que tenemos que saber y aplicar para poder entender esto. Esto no
iba a poder entenderse completamente sino hasta los últimos tiempos, pero parte
de ello ya era entendible desde el tiempo de Jesucristo—la venida del Mesías.
Recuerden lo que le pasó a los hombres sabios cuando llegaron con Herodes,
y él les preguntó que cuando habían visto la estrella; ¡Ellos le dijeron! Después
ellos les preguntaron a los sacerdotes y escribas sobre el lugar donde nacería
el Mesías, ¡Ellos les dijeron que en Belén! Los sacerdotes y los
escribas tenían cierto entendimiento gracias a los profetas.
Daniel 9 nos muestra los acontecimientos futuros desde el primer
año de Darío, hijo de Asuero [corrección de transcripción], y define cuánto
tiempo va a pasar hasta que venga el Mesías. Hay una lección muy importante que
debemos aprender sobre la actitud de Daniel. Esto también nos confirma que no
vamos a entender lo que dice la Biblia:
·
Sólo porque seamos intelectuales
·
Sólo porque trabajemos en una institución teológica
·
Sólo porque tengamos grados teológicos y entendamos el hebreo y el
griego.
Ese no es el criterio. ¡El mismo Daniel no recibió esta visión
hasta que buscó a Dios y se arrepintió!
Daniel 9:2: “En el primer año de su reinado, yo, Daniel, entendí
por libros el número de años, el cual vino de acuerdo a la Palabra del SEÑOR a
Jeremías el profeta, que la desolación de Jerusalén duraría setenta años.”
¿Y cuándo entendió esto?... ¡Justo al final de su vida!
Seraías—el hermano de Baruc, quien era el secretario de
Jeremías—tomó las profecías de Jeremías y se las dio a la comunidad sacerdotal
en Babilonia durante el cautiverio. Daniel tenía acceso a esos escritos. Quién
sabe cuántas veces los habrá leído, pero nunca los entendió hasta ese momento.
¿Qué hizo cuando finalmente entendió, y cómo vino ese entendimiento? ¡El
entendimiento viene de Dios!
Verso 3: “Y coloqué mi cara hacia el SEÑOR Dios, para buscar con
oración y suplicas, con ayuno, y cilicio, y cenizas... [¡Arrepintiéndose!] …Y
oré al SEÑOR mi Dios e hice mi confesión, y dije, ‘Oh SEÑOR, el gran y
asombroso Dios, guardando el pacto y misericordia a aquellos que Lo aman, y a
aquellos que guardan Sus mandamientos…’” (Versos 3-4). Ya hemos hablado sobre
las prioridades.
Noten que Daniel no dijo: ‘Dios, hemos sido pisoteados por estos
babilonios durante mucho tiempo. Como Jeremías dijo que serían 70 años, me
parece que ya estamos en el año 70. ¿Por qué no nos sacas de aquí? Nosotros no
merecemos esto.’ ¡Pero no! Él se arrepintió, se humilló, y buscó a Dios.
Verso 5: “Hemos pecado y hemos cometido iniquidad, y hemos hecho malignamente,
y nos hemos rebelado, y nos hemos desviado de Tus mandamientos y
de Tus ordenanzas. Ni hemos oído a Tus siervos los profetas…” (Versos 5-6).
Miren lo que hizo el rey de Judá cuando las palabras de Jeremías
llegaron hasta sus oídos. ¿Lo recuerdan? Tomó un cortaplumas, cortó el rollo y
lo arrojó al fuego. Cuando Baruc volvió el rollo ya estaba quemado, y Dios le
dijo: ‘vuélvelo a escribir y añádele más palabras.’ Así se portaron.
Verso 6: “Ni hemos oído a Tus siervos los profetas, quienes
hablaron en Tú nombre a nuestros reyes, nuestros gobernadores, y nuestros
padres, y a toda la gente de la tierra. Oh SEÑOR, la justicia Te pertenece,
pero a nosotros confusión de rostro, como en este día a los hombres de Judá y
al pueblo de Jerusalén, y a todo Israel quienes están cerca y quienes están
lejos, a través de todos los países donde Tú los has llevado porque trataron
traidoramente Contigo” (versos 6-7).
·
Así es como entendemos la Palabra de Dios
·
Así es como entendemos nuestra naturaleza humana, y la maldad que
hay en nosotros
Por eso es que Dios, con Su Espíritu, nos revela la maldad que
está alojada en nuestras mentes y en nuestros pensamientos malvados—para que
nuestras mentes sean ‘limpiadas con el lavamiento del agua por la Palabra.’
Nosotros podemos pensar como Dios quiere que pensemos; podemos ver las
cosas como Dios quiere que las veamos.
Verso 8: “Oh SEÑOR, la confusión de rostro nos pertenece, a
nuestros reyes, a nuestros gobernadores, y a nuestros padres, porque hemos
pecado contra Ti.” ¿No es esa la oración que necesitamos hacer en los Estados
Unidos y en la Gran Bretaña hoy en día? ¡Así es!
Verso 9: “Al SEÑOR nuestro Dios pertenecen misericordias y
perdones aunque nos hemos rebelado contra Él. Ni hemos obedecido a la
voz del SEÑOR nuestro Dios para caminar en Sus leyes las cuales Él colocó
delante de nosotros por medio de Sus siervos los profetas” (versos 9-10).
Piensen lo que le harían a cualquier persona que mencionara el
nombre de Cristo en la actualidad. A un chofer escolar que durante años
acostumbró orar en el nombre de Jesús antes de partir, ahora le han ordenado
que no lo haga porque podría ofender a alguien por ahí. A eso hemos llegado.
Verso 11: “Sí, todo Israel ha transgredido Tu ley, y se ha
desviado, para que no pudieran obedecer Tu voz. Por tanto la maldición ha sido
derramada sobre nosotros, y el juramento que está escrito en la ley de Moisés
el siervo de Dios, porque hemos pecado contra Él.”
¿No es interesante? ¿Cuándo fue la última vez que leyeron
Deuteronomio 28 y Levítico 26? Todas esas cosas están sucediendo ahora. Va a
haber muchos acontecimientos que nos van a sorprender en su momento, pero la
profecía que dice que el extraño será exaltado sobre ti… se está
cumpliendo día tras día. ¡Todas las maldiciones se están empezando a cumplir!
¿Acaso no sufrimos enfermedades y pestes? ¿Creen ustedes que ObamaCare va a
hacer algo para cuidarlos? ¡Claro que no!
Por eso hemos dicho muchas veces que más nos vale aprender a
cuidarnos nosotros mismos. Más nos vale aprender algunos remedios caseros tradicionales.
Consigan libros que les enseñen cómo hacer ciertas cosas, porque ellos ya no
quieren que los que tenemos más de 75 años sigamos viviendo. ‘Qué gran manera
de deshacernos de esos ‘conservadores calcificados inamovibles.’ Denles una píldora
y mándenlos a sus casas para que se mueran.’ ¡Necesitamos esta oración!
Verso 12: “Y Él ha confirmado Sus palabras las cuales habló contra
nosotros y contra nuestros jueces quienes nos juzgaron por traer sobre nosotros
un gran mal… [¿Qué hacen los jueces en la actualidad? ¿Acaso no han traído
sobre nosotros este gran mal de los matrimonios homosexuales? ¿Acaso no están
destruyendo la familia?] …porque bajo el cielo entero no ha sido hecho como ha
sido hecho sobre Jerusalén.” ¡Y así es! Nunca más volverá a suceder lo que
sucederá con los Estados Unidos y la Gran Bretaña. ¡Va a suceder!
No sé ustedes, pero hace como dos años tuve un presentimiento
durante tres semanas (sólo presentía cosas en mi mente). Lo único que podía
hacer era pensar en ello y pedirle a Dios que me ayudara. Eventualmente
desapareció, pero fue por todas las cosas que estaban sucediendo. Como dije en
mi último mensaje la semana pasada, las noticias son como un boxeador que nos
golpea a través de la cámara—nos golpea directo en la cara con todo lo que pasa
en el mundo. He estado en la orilla porque sé las cosas que se van a venir, y cuando
vemos todas las tonterías que estamos haciendo como pueblo y como nación… a
veces tendemos a desanimarnos. Cuando eso sucede, tenemos que acercarnos a Dios
exactamente como lo hizo Daniel.
Verso 13: “Como está escrito en la ley de Moisés, todo este
mal ha venido sobre nosotros. Aun así no hicimos nuestra oración delante del
SEÑOR nuestro Dios, para que pudiéramos volvernos de nuestras
iniquidades y entender Tú verdad.”
Voy a dar algunos segmentos en ‘Iglesia en Casa’ sobre el declive
del Protestantismo. Hay algunas personas que tratan de hacer el bien, pero si
realmente quieren hacer el esfuerzo… necesitan arrepentirse y aceptar el
sábado, los Días Santos, y los mandamientos de Dios para frenar todas esas estupideces
de que la Ley ha sido abolida. ¡Ningún hombre puede deshacerse de la Ley
perfecta de Dios!
¿Cómo puede alguien llamarse cristiano y decir que la Ley fue
abolida, cuando todo el Nuevo Testamento es como está registrado en Hebreos
10:16? ¡Debemos tener las leyes y mandamientos de Dios escritas en nuestras
mentes y corazones! Si usted realmente piensa que la Ley fue abolida y que ya
no es necesaria, entonces necesita:
·
¡Orar como Daniel!
·
¡Arrepentirse como Daniel!
“‘…para que podamos volvernos de nuestras iniquidades y
entender Tú verdad.’” (Verso 13). La única manera en que vamos a poder entender
la Verdad de Dios, es de la manera en que Daniel la abordó. ¡A nosotros nos ha
sido dada toda la Toda la Palabra de Dios!
Piensen en esto por un minuto: Cuando David—siendo rey sobre las
doce tribus de Israel—quiso construir un templo, Dios le dijo: ‘Haré un lugar
para Mi pueblo Israel. Haré un lugar.’ Aquí está hablando sobre el
cumplimiento de las profecías para el tiempo del fin en Génesis 49. Se está
refiriendo al Israel moderno—a cómo es que serían una gran nación y una
multitud o mancomunidad de naciones.
¿Qué fue lo que Dios hizo cuando comenzó a cumplir estas profecías?
Levantó a William Tyndale para que antes de que se cumplieran las
bendiciones prometidas a Abraham, Isaac, y Jacob… ellos tuvieran toda la
Palabra de Dios en su lenguaje contemporáneo. Dios primero les dio Su Palabra,
pero no pudieron con el tema del domingo. No pudieron deshacerse del
Catolicismo en Inglaterra como debieron.
Ellos persiguieron a los que guardaban el sábado porque la Biblia
fue puesta a disposición de todos—incluso para las personas ordinarias. Para
aquellos que no podían leer, la iglesia local les proveía un lector para que
entendieran. Cuando llegaron al punto de entender la Palabra de Dios y de
guardar el sábado, fueron perseguidos y tuvieron que huir a Holanda. Muchos de
los peregrinos que llegaron aquí guardaban el sábado. Para poder predicar el
Evangelio al mundo sin restricciones, tenía que haber una nación con:
·
Libertad de expresión
·
Libertad de religión
·
Libertad de reunión
Nunca tuvieron esto en la Gran Bretaña.
Sin embargo, la destrucción de la Armada Española ocurrió durante
el Reinado de Elizabeth I. Dios fue Quien hizo esta hazaña y el pueblo lo
reconoció. La Armada fue enviada porque la reina no quiso casarse con un español;
ella permaneció soltera toda su vida diciendo: ‘Estoy casada con Inglaterra.’ Desde
el comienzo de su reinado Inglaterra acumuló tanta riqueza... que pasó de ser
la nación más pobre a la más rica de Europa.
Dios les envió Su Palabra y ellos la tienen. Si usted piensa que
las personas del Antiguo Israel eran pecadores, considere esto: Todos ellos
tienen la Palabra de Dios— ¿No es así? Pero ahora la rechazan. Las iglesias se
están convirtiendo en bares; hay más brujas que clérigos de la Biblia. Necesitan
haber muchas más oraciones como la de Daniel. No hay excusa; ellos tienen la
Palabra de Dios.
Verso 14: “Por tanto, el SEÑOR no dudó concerniente al mal que Él
trajo sobre nosotros, porque el SEÑOR nuestro Dios es justo en todas Sus
obras las cuales Él hace, pero nosotros no obedecimos Su voz.” Aquí está
diciendo: ‘Sí, nos lo merecemos. Merecemos todo lo que has dicho Señor, porque
Tú eres justo.’
Verso 15: “Y ahora, Oh SEÑOR nuestro Dios, Quien has sacado a Tu
pueblo de la tierra de Egipto con una mano poderosa, y has hecho un nombre para
Ti mismo, como es este día, hemos pecado, ¡hemos hecho malignamente!” Me
pregunto si alguno de los obispos cristianos—o lo que sea que quieran llamarse
en Washington D.C. —puede entender esto.
Verso 16: “Oh SEÑOR, Te oro, de acuerdo a toda Tu justicia, sea
Tu ira y Tu furia apartada de Tu ciudad Jerusalén, Tu montaña santa. A causa de
nuestros pecados, y por las iniquidades de nuestros padres, Jerusalén y Tu
pueblo han llegado a ser un reproche a todos aquellos que están alrededor
nuestro.”
·
¿No es eso lo que está pasando ahora?
·
¿Acaso no nos odian por nuestra estupidez?
·
¿Acaso no nos odian por nuestras mentiras y por los engaños hemos
ideado con nuestros hermanos Efraín (Inglaterra) y Gad (suiza) en cuanto al
sistema financiero?
¡Dios se lo va a dar todo a los chinos!
Verso 17: “Y ahora por tanto, Oh nuestro Dios, oye la oración de
Tu siervo, y sus súplicas, y haz Tu cara brillar sobre Tu santuario que está
desolado por amor al SEÑOR. Oh mi Dios, inclina Tu oído y oye. Abre Tus ojos y
observa nuestras desolaciones, y la ciudad la cual es llamada por Tú nombre.
Porque no presentamos nuestras súplicas delante de Ti a cuenta de nuestras
justicias, sino por Tus grandes misericordias. Oh SEÑOR, oye; Oh SEÑOR,
perdona; Oh SEÑOR, oye y hazlo. No demores, por amor a Ti mismo, Oh mi Dios;
porque Tu ciudad y Tu pueblo son llamados por Tú nombre” (versos 17-19). Esa
fue una oración poderosa—y ¡Dios respondió de inmediato!
·
Tome esto como un modelo para su propia vida
·
Tome esto como un modelo para su iglesia
·
Tome esto como un modelo para su estado, su distrito, o su
comunidad…
—y ¡vuélvase a Dios! Usted tiene la Palabra de Dios. Él no
necesita venir y hacer algún milagro en su presencia. Usted sólo necesita
ponerse de rodillas, confesar sus pecados como lo hizo Daniel, y estar
dispuesto a obedecerle.
Verso 20: “Y mientras estaba hablando, y orando, y confesando mi
pecado, y el pecado de mi pueblo Israel, y presentando mi súplica delante del
SEÑOR mi Dios por la montaña santa de mi Dios; Sí, mientras estaba hablando en
oración, incluso el hombre Gabriel, a quien había visto en la visión al
comienzo, siendo hecho volar rápidamente, vino a mí, cerca de la hora del
sacrificio nocturno.” (Verso 20-21).
Él le dio entendimiento, y también le dio una profecía que
continuaría a lo largo de las Escrituras. Esto es importante para entender las
cosas que necesitamos ver en la profecía.
Verso 22: “Y él me hizo entender, y habló conmigo, y dijo,
‘Oh Daniel, he salido ahora para darte visión y entendimiento.’” Como
dijimos al principio—todo viene de Dios. No importa quién sea usted, ni cuántos
títulos tenga, ni qué tan importante cree que sea. Si usted en realidad no
conoce a Dios, ¡entonces no sabe nada! Sólo es un ignorante ducado que
Dios llama un tonto.
Verso 23: “Al comienzo de tus súplicas la palabra salió… [Le
dieron el mensaje: ‘Gabriel, ve.’] …y he venido a declarártela, porque tú eres
grandemente amado…” Recuerden que Dios ama a su pueblo; Dios ama a todos los
que tienen Su Espíritu:
·
¡No lo tomen a la ligera!
·
¡No lo traten con desprecio!
·
¡No piensen que pueden vivir en pecado porque ustedes son dioses!
No, ¡no pueden hacer eso!
“…por tanto considera la palabra, y entiende la visión” (verso
23).
Ésta es la visión. Vamos a empezar a hablar un poquito al respecto,
pero aquí es donde vamos a retomar el tema la próxima vez:
Verso 24: “Setenta semanas están decretadas sobre tu pueblo… [cada
semana representa un periodo de 7 años] …y sobre tu santa ciudad para terminar la transgresión y poner un
fin al pecado, y hacer reconciliación por la iniquidad, y traer justicia
eterna, y sellar la visión y profecía, y ungir al Más Santo.” Esto involucra
muchísimas cosas. Ya entraremos más en detalle la próxima vez.
Verso 25: “Conoce por tanto y entiende que desde la salida
del mandamiento para restaurar y construir Jerusalén, al Mesías el Príncipe,
serán siete semanas, y sesenta y dos semanas. Será construida de nuevo con
calles y el muro, incluso en tiempos turbulentos. Y después de sesenta y dos
semanas el Mesías será cortado pero no por Sí mismo. Y el pueblo del
príncipe… [Aquí se desplaza hasta el tiempo del Anticristo] …que vendrá,
destruirá la ciudad y el santuario. Y el fin de ella será con
inundación, y hasta el fin de la guerra desolaciones están determinadas. Y él
confirmará un pacto firme con muchos por una semana. Y en el medio de la semana
hará cesar el sacrificio y la ofrenda, y por la muchedumbre de las abominaciones
vendrá uno que desola incluso hasta la consumación. Y el fin determinado completamente
el cual esta decretado será derramado sobre el desolador.” (Versos 25-27).
Esta es toda una profecía que involucra un periodo de tiempo muy
largo, y requiere de nuestra atención a detalle. Si ustedes tienen el libro: Los
Tiempos Señalados de Jesús el Mesías, les recomiendo que vuelvan a leerlo. Ahí
hay algunas cosas que no habían podido ser entendidas hasta los últimos días.
Hay algunas cosas que no habrían sido entendidas si Carl Franklin no hubiera
tenido la habilidad de investigar en las bibliotecas europeas… y entender las
genealogías de los reyes de los Medos, los Persas, los Babilonios, y los
Asirios. Él coordinó toda esa información para que nosotros pudiéramos saber el
tiempo exacto de la emisión del decreto, y el rey quien lo emitió.
Él tuvo que desenredar todas las dificultades de Esdras y
Nehemías—que de hecho son contemporáneas. Les tomó 49 años para terminar el
templo y la ciudad. Primero construyeron el templo, y luego Nehemías vino de
Persia para ayudarles a reconstruir la muralla.
Así somos los seres humanos—por eso guardamos el sábado. Si no
tuviéramos el sábado, dejaríamos todo para último minuto y nunca haríamos nada;
sólo esperaríamos. Ellos se ocuparon de lo suyo en lugar de ponerse a reconstruir
la muralla. ‘Primero tengo que construir mi casa. La casa de Dios aún no necesita
ser construida.’ Después Dios tuvo que corregirlos por eso.
Entonces, tenemos los libros de Ageo, Zacarías, Esdras, y
Nehemías… los cuales hablan sobre estas historias. Todos son importantes para
calcular el tiempo correcto en el que vendría Jesús el Mesías—no el tiempo de
su nacimiento. Él no podía ser el Mesías hasta que algo sucediera primero.
Continuaremos con la historia en la segunda parte…
Referencias Bíblicas:
·
I Corintios 2:9-14
·
Marcos 13:31-35, 33, 35-37
·
I-Tesalonicenses 5:1-2
·
Mateo 24:32-36
·
Daniel 4:1-3
·
Daniel 7:24-27
·
Daniel 8:23-25
·
Daniel 9:2-27
Escrituras utilizadas, no citadas:
·
Apocalipsis 13
·
Jeremías 23
·
Apocalipsis 2; 3
·
I Tesalonicenses 4
·
Isaías 2
·
Ageo 2
·
Lucas 21
·
Daniel 2-12
·
Deuteronomio 28
·
Levítico 26
·
Hebreos 10:16
·
Génesis 49
También citados:
Sermón: El Espíritu Santo y los Siete Espíritus de Dios
Libros:
·
Killing Jesus (Matando a Jesús)
por Bill O'Reilly and Martin Dugard
·
Las Dos Babilonias por
Alexander Hislop
·
El Plan de Dios para la Humanidad Revelado por Su Sábado y Sus
Días Santos por Fred R. Coulter
·
Los Tiempos Señalados de Jesús el Mesías por Fred R. Coulter