Restaurando el
cristianismo original—¡para hoy!
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Fred R. Coulter
Ministro
Marzo/Abril
Marzo 14, 2017
Queridos hermanos,
Con la Pascua y la Fiesta de Panes sin
Levadura llegando en Abril, esta carta será para Marzo y Abril. En este envío
estamos incluyendo un documento
comparando los pasajes críticos del Antiguo Testamento concerniente a la Pascua.
Particularmente examinamos los sacrificios de redención/santificación requeridos
en Éxodo 13 por todos los primogénitos (de hombre y animal), notando como se
comparan con los sacrificios en el templo en el día alto de Deuteronomio 16. Cuando
leen Deuteronomio 16, muchos asumen que Dios cambió la Pascua de una observancia
doméstica a una observancia centrada en el templo. Pero como verá, eso no es
correcto.
Numerosas preguntas persisten concerniente a
la Pascua: ¿Es observada en el 14 o en el 15 de Abib de acuerdo al Calendario
hebreo calculado? ¿Era el cordero de Pascua a ser sacrificado en la casa de los
israelitas, o esto cambio después para ser sacrificado en el templo? ¿Por qué
los judíos guardan la Pascua en el 15 con una comida sedar? ¿Y por qué
las iglesias de Dios guardan la Pascua con el lavado de pies, pan sin levadura,
y vino, sin embargo no tienen comida en la noche del 14?
El cristianismo ortodoxo ignora ambos el Sábado
y la Pascua. En vez, los católicos observan el domingo y celebran la eucaristía
(el sacrificio de la misa) frecuentemente a través del año al participar con galletas
redondas no partidas de pan sin levadura y vino administrado por un sacerdote.
Los protestantes guardan una “cena del Señor” los domingos en la mañana (los
Adventistas del Séptimo Día usan el primer sábado de cada trimestre). Los
mormones mantienen un ritual similar los domingos con pan y agua.
Ninguno de ellos guarda la Pascua—todos
ellos celebran Easter. ¿Cómo empezó tal confusión?
En su reconocido libro De Sábado a
domingo, el fallecido Samuele Bacchiocchi escribe en detalle como las
disputas Sábado-domingo y Pascua-Easter comenzaron al final del primer siglo.
La controversia catorceava en particular trabaja con el asunto de la Pascua-Easter.
Al comienzo del segundo siglo, ambos el domingo e Easter eran ampliamente
observados.
Como demuestra Bacchiocchi, la adopción de Easter
en lugar de la Pascua llevó eventualmente al avance del domingo sobre el Sábado
del séptimo día. Él describe como Satanás usó ministros “cristianos”
falsificados (II Corintios 11:13-15) por siglos para traer engañosamente varias
practicas paganas en las iglesias—llamadas Easter y domingo. Usando incrementalismo,
Satanás ha llevado lentamente y sutilmente a los hombres a intercambiar la
verdad de
Dios por mentiras (Romanos 1:25). Eventualmente, todos los Días Santos de Dios
fueron remplazados con festivos paganos. El apóstol Pablo describe incrementalismo
de esta forma: “un poco de levadura [lentamente]
leuda la masa entera”
(I Corintios 5:6; Gálatas 5:9).
El libro de Bacchiocchi es importante de
leer. Otros dos libros recomendados, Las dos babilonias de Alexander
Hislop y La rama dorada de Sir George James Frazier, documentan
completamente como las iglesias apostatas se convirtieron gradualmente en el
“cristianismo” ortodoxo—parte de “Babilonia la Grande” del día actual (Apocalipsis
13, 17-18). Estos libros le ayudarán a ver como Satanás—el “padre de mentiras”—ha
engañado totalmente al mundo entero (Apocalipsis 12:9).
Adicionalmente, en La Santa Biblia en Su
orden original, el apéndice N, “El desafío
de Roma a los protestantes,” escrito por el Cardenal católico Gibbon en
1893, prueba claramente que la observancia del domingo absolutamente no es
encontrada en el Nuevo Testamento. Jesús y Sus apóstoles ¡nunca cambiaron
el Sábado por domingo! Más bien, la observancia del domingo de origen proto-católico,
instituida en el 325 dC por el emperador Constantino—de hecho, ¡el primer papa!
Finalmente, nuestro libro La Pascua
Cristiana—el libro más detallado sobre la Pascua que ha sido alguna vez publicado—trata
directamente con el profundo significado de la Pascua; cuándo exactamente
debe ser observada; y cómo debe ser guardada. Este libro debe ser leído
para entender plenamente la verdadera “Pascua Cristiana” y porque Jesús fue
crucificado en aquel día. Si no tiene una copia, gustosamente se la enviaremos
sin costo alguno.
La
Pascua es vital porque es nuestra renovación del Nuevo Pacto para vida
eterna. Como dijo Jesús, si no participamos de los símbolos de Su carne (el pan)
y Su sangre (el vino), no tenemos vida eterna: “Por tanto, Jesús les
dijo, “Verdaderamente, verdaderamente les digo, a menos que coman la carne
del Hijo de hombre, y beban Su sangre, no tienen vida en sí mismos. Aquel que
come Mi carne y bebe Mi sangre tiene vida eterna, y Yo lo levantaré en el
último día.
Porque Mi carne es verdadera comida, y Mi sangre es verdadera
bebida. Aquel que come Mi carne y bebe Mi sangre está viviendo en Mí, y Yo
en él.
Como el Padre vivo Me ha enviado, y Yo vivo por el Padre; así
también aquel que Me come vivirá por Mí.” (Juan 6:53-57).
Concerniente al lavado de pies, Jesús dijo: ““Si
no te lavo, no tienes parte Conmigo.… Por tanto, cuando Él les
había lavado los pies, y había tomado Sus vestidos, y se había sentado
nuevamente, les dijo, “¿Saben lo que les he hecho? Ustedes
Me llaman el Maestro y el Señor, y hablan correctamente, porque lo Soy. Por
tanto, si Yo, el Señor y el Maestro, he lavado sus pies, ustedes también
están obligados a lavarse los pies los unos a los otros; porque
les he dado un ejemplo, para mostrarles que también deberían hacer
exactamente como Yo les he hecho. Verdaderamente,
verdaderamente les digo, un siervo no es más grande que su señor, ni un
mensajero más grande que el que lo envió. Si saben estas cosas,
benditos son si las hacen”” (Juan 13:8, 12-17).
Fecha de los Festivales de primavera 2017
Pascua—domingo
en la noche, Abril 9
Noche para ser muy observada—lunes en la noche, Abril 10 (comienza el primer día
de Panes sin Levadura)
Primer Día Fiesta de Panes sin Levadura—Abril 11—un Día Santo
Sábado semanal durante la Fiesta de Panes sin Levadura—Abril 15
Séptimo Día Fiesta de Panes sin Levadura—Abril 17—un Día Santo
Comenzando en la última semana de marzo,
estaremos enviándoles los audios de los sermones y estudios para la Pascua y la
Fiesta de Panes sin Levadura. Tendrá todo lo que necesita para guardar estas
Fiestas de primavera.
Hermanos, que Dios los bendiga
abundantemente a través de la Pascua y Fiesta de Panes sin Levadura en este año.
Gracias por su soporte continuo con sus diezmos y ofrendas—los cuales son
usados para alimentar el rebaño y proclamar el Evangelio. Gracias por su amor y
oraciones—por nosotros y por todos los hermanos. Continuamos orando por ustedes
cada día—que Dios los bendiga, proteja, sane y ayude a crecer en gracia y
conocimiento de nuestro Salvador Jesucristo.
Con amor en Cristo Jesús,
Fred R. Coulter
FRC
Deuteronomio 16 no tiene nada que ver con
la Pascua doméstica del 14 como se describe en Éxodo
12
Una comparación línea a línea de Éxodo 12 y
13 con Deuteronomio 16 es muy reveladora. Éxodo 12 habla de Dios librando al
primogénito de los hijos de Israel de la muerte, mientras aún estaban en
sus casas en Egipto. Al amanecer, dejaron sus casas, despojaron a los egipcios
y se reunieron en Ramesés. Comenzaron su partida de Egipto en la noche del 15—La
noche para ser muy observada para el Señor (Éxodo 12:37-42).
Así, el primogénito de hombre y bestia
fueron librados de la muerte en la noche de la Pascua—el 14. Luego, al comienzo
de la noche del 15, fueron redimidos. Es por eso que Éxodo 13 habla de
ellos saliendo de Egipto, el séptimo día de la Fiesta de Panes sin Levadura,
y de la redención y santificación de todo lo que abre matriz como el primogénito—humano
y animal.
Éxodo 13 adiciona más detalles acerca de la razón
de La noche para ser muy observada y explica porque los israelitas
debían redimir sus primogénitos. Todo esto es esencial de entender mientras
examinamos Deuteronomio 16.
En Deuteronomio 16, encontramos que la redacción
es casi idéntica a Éxodo 13. Sin embargo, Éxodo 13 incluye la ofrenda de redención/sacrificio
por el primogénito de Israel—humano y animal. Solo los primogénitos varones
fueron redimidos. Pero el pueblo no podía comer de los animales primogénitos
machos porque ellos eran totalmente dedicados a Dios; solo los sacerdotes
podían comer de ellos. Sin embargo, como muestra Deuteronomio 14:23, la gente podía
comer de las primogénitas durante la Fiesta de Tabernáculos.
Una vez los israelitas llegaron a la tierra
prometida, un gran número de sacrificios de redención del primogénito fueron
ofrecidos comenzando en la porción tarde del día de Pascua. Es por eso que esos
sacrificios son llamados “ofrendas de Pascua” en Deuteronomio 16. Estas
ofrendas del templo debían ser tomadas del “rebaño y la manada,” y debían ser “hervidos.”
Eran completamente diferentes y separadas del sacrificio de la
Pascua domestica del 14 de Éxodo 12—la cual era limitada al rebaño (un
cordero o cabrito) y debía ser muerto en sus casas. En verdad, ¡nunca ha habido
un becerro de Pascua usado para el sacrificio domestico de la Pascua del
14!
En Deuteronomio 16, a los israelitas les fue
ordenado ofrecer sacrificios del rebaño y la manada—y debían
hervir estos sacrificios, no asarlos al fuego. Éxodo 12 estrictamente prohíbe hervir
el sacrificio doméstico de la Pascua. Así, las “ofrendas de Pascua” en Deuteronomio
16 no tienen nada que ver con la Pascua del 14 teniendo lugar en las casas o
tiendas de los israelitas.
Cuando Éxodo 12-13 son comparados
cuidadosamente con Deuteronomio 16, llega a ser evidente que estas “ofrendas de
Pascua” eran de hecho ofrendas de santificación/redención por los hijos
primogénitos de los israelitas y los primogénitos de los animales. Tales
ofrendas no podían ser ofrecidas en sus casas o “dentro de ninguna de sus
puertas”—sino solo en el Tabernáculo o templo (Deuteronomio 16:5).
En Deuteronomio 16, los hijos de Israel debían
comenzar a ofrecer estos sacrificios tarde en la porción diurna del día de
Pascua y seguir en la noche—La noche para ser muy observada, el inicio
del 15 de Abib, el primer día de la Fiesta de Panes sin Levadura. Estas “ofrendas
de Pascua”—ofrendas de santificación/redención por los primogénitos—eran hechas
en preparación para la Noche para ser muy observada. Después, los
israelitas permanecieron toda la noche y regresaron a sus tiendas en la mañana (verso
7).
Por tanto, podemos concluir que Dios no cambió
la observancia de la Pascua al comienzo del 14, cuando mataban el cordero o
cabrito de Pascua en sus casas—o, cuando viajaban a Jerusalén, en las variadas
casas, hoteles y tiendas de peregrinación.
Dios nunca cambió la Pascua domestica del
14, con la muerte del animal entre las dos noches al comienzo del día. Él
no instituyó un sacrificio en el templo del cordero de Pascua, tarde en la
tarde del 14, con la comida de Pascua para ser observada en el 15. Por tanto, Deuteronomio
16 no tiene nada que ver con la Pascua doméstica del 14 como es descrita en Éxodo
12.