¿Es el ministerio el

gobierno de Dios?

 

Por

Fred R. Coulter

www.iglesiadedioscristianaybiblica.org

 

¿Ha sido impactado por un gobierno autoritario estricto a través

de una organización Iglesia de Dios?

¿Sabia que esta clase de control fue ganado por medio de engaño?

Lea este folleto para aprender acerca de este engaño grande y sutil.

 

 

Nota: Todas las Escrituras han sido traducidas de The Holy Bible In Its Original Order (La Santa Biblia en Su orden Original), primera edición.

 

 

MUCHAS DE LAS PERSONAS con las que me asocio, al igual que yo han salido de una Iglesia de Dios controlada estrechamente. La experiencia de estar bajo una autoridad tan estricta ha dejado un impacto duradero sobre cada uno de nosotros. Cualquier persona que ha experimentado esto, puede relatar lo que estoy diciendo.

 

¿Ha sido usted personalmente impactado por una Iglesia de Dios? ¿Fue el impacto bueno o malo? ¿Tiene todavía un impacto sobre su vida?

 

Vamos a cubrir algunas maneras muy básicas en las cuales fuimos impactados. Algunas de estas cosas fueron muy sutiles y dañinas e infortunadamente dejaron a muchas personas con heridas en sus almas.

 

¿Cómo ven a la Iglesia de Dios Jesucristo y Dios el Padre?

 

Todas las Escrituras que estaré cubriendo han sido usadas para probar una autoridad jerárquica humana de la Iglesia de Dios—tal como la Iglesia Católica. Pero, cuando las examina cuidadosamente son exactamente lo contrario.

 

"Y también te digo, que tú eres Pedro; pero sobre ésta Roca construiré Mi iglesia, y las puertas de la tumba no prevalecerán contra ella" (Mateo 16:18).

 

Sabemos que la roca se refiere a Cristo y no a Pedro o cualquier otro hombre. Sabemos que Jesús dijo, "Yo construiré Mi iglesia." Aquellos que son llamados por Jesús son llamados "Mis ovejas" y "Mis hermanos." Quiero enfatizar que Jesús estaba diciendo "Mi Iglesia."

 

"…construiré Mi iglesia, y las puertas de la tumba no prevalecerán contra ella."

 

La palabra traducida como “tumba” viene del griego hades, que significa tumba o sepulcro. En otras palabras, la iglesia de la cual Cristo es la Cabeza no morirá.

 

El Bautismo en Jesucristo

 

Jesús ordenó: "Por tanto, vayan y hagan discípulos en todas las naciones, bautizándolos dentro del nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñándoles a observar todas las cosas que les he mandado. Y he aquí, Yo estoy con ustedes siempre, incluso hasta la terminación de los siglos." (Mateo 28:19-20).

 

La terminación de los siglos significa el fin de la era. La era de la Iglesia terminará en la primera resurrección. La era del Reino de los Cielos comenzará cuando las siete plagas comiencen.

 

En el día de Pentecostés, Pedro predicó: "Arrepiéntanse y sean bautizados cada uno de ustedes en el nombre de Jesucristo para la remisión de pecados, y ustedes mismos recibirán el regalo del Espíritu Santo..." (Hechos 2:38).

 

El Espíritu Santo viene de Dios el Padre. Se nos dijo que la Iglesia es la novia de Cristo y que la Iglesia es la madre de todos nosotros—la Iglesia es el cuerpo de Cristo. También se nos dijo que todas las diferentes Iglesias de Dios en el mundo no pueden ser el cuerpo de Cristo.

 

El apóstol Pablo escribió: "Porque incluso como el cuerpo es uno y tiene muchos miembros, aún todos los miembros del cuerpo, aunque muchos, son un cuerpo; así también es Cristo. Porque ciertamente, por un Espíritu… [el Espíritu de Dios el Padre]… fuimos todos bautizados dentro de un cuerpo—sean judíos o griegos, sean esclavos o libres—y fuimos todos hechos para beber dentro de un Espíritu." (I Corintios 12:12-13).

 

Cada uno de nosotros fuimos bautizados dentro de la Iglesia de Dios después de arrepentirnos de nuestros pecados [la trasgresión de la ley perfecta, santa y justa de Dios]. También aceptamos a Jesucristo como nuestro Señor y Maestro, nuestro Sumo Sacerdote en los cielos, y nuestro venidero Rey en el mundo de mañana. No fuimos bautizados dentro de cualquier secta o denominación de este mundo (o cualquier organización de hombres) sino dentro del nombre del Padre, el Hijo, y el Espíritu Santo, en el nombre de Jesucristo para la remisión de nuestros pecados. Fuimos completamente sumergidos en agua, y después levantados de ese sepulcro de agua. Luego orando por nosotros y con imposición de manos recibimos el regalo del Espíritu Santo.

 

Nos dijeron que la Iglesia de Dios es una organización espiritual. Eso es cierto. Es asemejada al cuerpo de Cristo, y Cristo es la Cabeza de la Iglesia. Eso es cierto. Luego, se nos dijo que la organización corporativa en la iglesia donde estábamos era la única iglesia verdadera. ESTO FUE UN ENGAÑO.

 

¿Es la autoridad de la iglesia el Gobierno de Dios?

 

¿Qué ocurrió después de nuestro bautismo? Nos reunimos con otros creyentes bautizados en varias congregaciones, y entonces fuimos introducidos al gobierno de Dios/la autoridad de la iglesia, y eso fue un engaño. Nos dijeron que los ministros tenían autoridad sobre nuestras vidas. Mientras el tiempo pasaba, esa autoridad llegó a ser más y más sofocante. ¿Por qué fue tan difícil para la gente recuperarse después de que dejaron una Iglesia de Dios autoritaria? En parte porque ellos permitieron que los ministros pensaran por ellos. Pero fue algo más que eso. Nos dijeron que si dejábamos el gobierno autoritario de la Iglesia, perderíamos nuestra salvación.

 

Nos dijeron originalmente que la iglesia era un organismo espiritual. Se nos dijo también que era posible que pudiera haber personas sentadas en la verdadera Iglesia de Dios que no tenían el Espíritu de Dios. Por consiguiente, estas personas no eran verdaderamente parte de la Iglesia de Dios. Aunque un individuo podía ser un miembro de una congregación de la Iglesia de Dios, él o ella deben tener el Espíritu Santo de Dios para verdaderamente poder estar en la Iglesia de Dios.

 

Pero el cambio llegó. Fuimos gobernados por el gobierno de la iglesia, es decir todo el ministerio, con autoridad desde arriba hasta abajo. Se nos dijo que el ministerio era el gobierno de Dios. ¿Porqué fue esto un engaño? Aquellos en autoridad distorsionaron las Escrituras para reforzar su propia autoridad. La verdad es que—el ministerio NO es el gobierno de Dios. Se espera que ellos sean los siervos del pueblo, no señores y dictadores.

 

¿Cual es el verdadero gobierno de Dios?

 

El verdadero gobierno de Dios es la autoridad de Dios en nuestras vidas cuando somos guiados por el Espíritu Santo. También va a ser el gobierno de Cristo a través del Reino de Dios en la tierra cuando Él regrese. El ministerio usurpó la propia autoridad de Dios y, contrario a las Escrituras, la hicieron suya. Este concepto y uso de autoridad llegó a ser devastador, porque los líderes tomaron sobre ellos el gobierno de Dios. Con este hecho, ¡Suplantaron a Dios! Quizás ellos no han comprendido completamente lo que hicieron.

 

Haciendo esto tomaron ventaja de la membresía. Pero cada uno de nosotros le ha dicho a Dios, "Tú gobernarás mi vida." En otras palabras, somos dedicados a Dios—NO a un ministerio enseñoreado, que usurpó la autoridad de Cristo para si mismos.

 

El amor hacia Dios transferido a los hombres

 

El siguiente ENGAÑO fue tomar el amor, lealtad y fe que le damos a Dios y a los hermanos y transferirlo a los hombres. Entonces ejercitaron un señorío y autoridad jerárquica sobre los hermanos. Tal gobierno es contrario al mandato directo de Jesucristo.

 

"Y hubo también una disputa entre ellos, incluso esta: cual de ellos debería ser considerado el más importante. Y El les dijo, ‘Los reyes de las naciones señorean [Griego, kata-kurieuo]… sobre ellas, y aquellos que ejercen autoridad[Griego, kata-exousiazo]… sobre ellas son llamados benefactores." (Lucas 22:24-25).

 

"Kata kurieuo" significa ejercitar señorío de arriba hacia abajo. Igualmente "kata-exousiazo" significa ejercitar autoridad de arriba abajo.

 

¿No fueron los ministros llamados nuestros benefactores mientras influenciaban esta autoridad para si mismos? Sí, pero Cristo no quiere que el amor, dedicación, fe y lealtad que le pertenecen a Dios y a Cristo sean dados a un hombre.

 

¿Por qué Dios no desea esta influencia para un hombre? Porque la gente entonces está adorando a un hombre, que se convierte en un ídolo en el lugar de Dios. Ahora estamos llegando al meollo de este asunto. ¿Porque Dios no desea que el ministerio influya en ese amor, fe, lealtad y dedicación que da hacia Dios? Porque los hombres toman el lugar de Dios. Y cuando toman el lugar de Dios, ¿qué ocurre? Que usted sirve a un hombre y ha creado un Papa, una persona en el lugar de Dios en la tierra. Tuvimos una autoridad ministerial abusiva sobre nosotros. Se nos dijo que estos hombres eran nuestros benefactores. Teniendo apoyado sutilmente lo que le pertenecía a Dios en las manos de los hombres, fue devastador para la gente porque ellos se habían comprometido con Dios, no con hombres.

 

Dios es un Dios celoso

 

Eso fue un pecado grande contra la gente y contra Dios. Dios dice que no debemos tener otros dioses delante de Él. Él es un Dios celoso. ¿Qué desea Dios de usted?

 

"Y amarán al Señor su Dios con todo su corazón, y con toda su alma, y con toda su mente, y con toda su fuerza.’ Este es el primer mandamiento." (Marcos 12:30).

 

Cuando ese amor, que solamente debe ir a Dios, es dirigido a un ser humano o a una organización, hace que usted ame menos a Dios, porque ellos han desviado hacia los hombres y sus organizaciones corporativas, el amor que debería ser dirigido solamente a Dios. Luego, la vanidad del ministerio llegó a estar involucrada, tal como se evidenció por la autoridad ejercida sobre los miembros. Vayamos un paso adelante. En el momento que usted permite que alguien fuera de Dios tome para si mismo parte de Marcos 12:30, ¿qué ocurre? Una organización de hombres roba parte de su amor a Dios. Su amor y lealtad va hacia ellos en vez de hacia Dios. Dios es un Dios celoso. Él lo  llamó, y Cristo murió por usted. Él no quiere que nada ni nadie interfiera con ese amor.

 

¿Qué ocurre cuando los hombres reciben este amor y devoción? Lo organizan. Esto se hizo bien claro para mí cuando atendí una conferencia secular de negocios. La reunión fue muy parecida a las conferencias ministeriales que había atendido en el pasado. Los líderes corporativos tenían toda su gente en asistencia. La corporación fue dividida en regiones, con todo el liderazgo nacional e internacional. Yo estaba en medio de todo esto cuando de pronto, la experiencia con la Iglesia se hizo ¡BIEN CLARA! A través del uso de la organización de una corporación moderna, la Iglesia había asignado a la corporación las prerrogativas, lealtad y el amor de Dios. Todas estas cosas debían haber ido solamente a Dios. Así, al imponer la estructura de negocios corporativos sobre la Iglesia, corrompieron el camino de Dios. Pero, Dios no va a permitir que nadie tome esto de Él sin castigo. ¡Esto fue un ENGAÑO!

 

La declaración de que existe solamente una Iglesia en la faz de la tierra es una declaración verdadera. Pero, declarar que "Nuestra Iglesia de Dios, esta organización, es la única verdadera Iglesia de Dios" es falso. Quizás sea una Iglesia de Dios, pero no la única Iglesia de Dios. Con el tiempo, se hizo la amenaza de que si dejaba ésta organización, dejaba a Dios. Esto sería una declaración verdadera si dejara a Dios el Padre y a Jesucristo. Pero, no, si deja una organización de hombres. Así fue que estas prerrogativas de Dios fueron transferidas a la iglesia organizada corporativa. ¿No es esto algo sutil? "Si deja ésta Iglesia de Díos ha dejado a Dios." El temor hacia la autoridad de la iglesia y el ministerio reemplazó el temor y el amor de Dios y así fue creado un ídolo corporativo. El entendimiento de esto me vino mientras estaba sentado ahí, escuchando la conferencia de negocios—había escuchado esto antes.

 

La intimidación de la religión temor

 

Al ejercer control y autoridad sobre usted, su libertad de pensamiento desapareció. La gente se volvió temerosa y fue intimidada mientras el ministerio ejercía "señorío" y "autoridad" sobre ellos.

 

¿Recuerdan lo que dijeron aquellos que estaban en autoridad? Nos dijeron que no criticáramos el ministerio. Básicamente, se nos dijo que nuestro deber era orar y pagar. Pero cuando traemos una ofrenda o diezmo a Dios, ¿No debe ser de corazón en vez de motivado por el temor a través de la autoridad e intimidación de hombres?

 

Cuando esto alcanzó el punto en que todas estas cosas habían sido trasladadas a hombres y eran el punto principal de todo lo que se hacía, llegó a ser claro que el ministerio había tomado para si mismo, las prerrogativas de Dios. (Si usted decía algo contra un ministro, se consideraba que usted estaba a punto de cometer el "pecado imperdonable.") También nos dijeron que si decíamos algo contra la Oficina Central o los ministros, quienes eran "el gobierno de Dios," lo estábamos diciendo contra Dios. Ellos se habían colocado enteramente en el lugar de Dios—QUE ENGAÑO.

 

Esto fue lo que mantuvo a la gente en esa Iglesia de Dios con temor absoluto. Usted temía al ministro y temía irse de la Iglesia. No podía confiar en sí mismo, no podía confiar en sus pensamientos, y tampoco podía confiar en Dios.

 

A muchos miembros que se fueron de esa organización Iglesia de Dios se les dijo que habían perdido su salvación. Se les dijo que si iban a entrar en el Reino de Dios, tendrían que ir a través del horror de la tribulación—OTRO ENGAÑO. La amenaza de pérdida de la vida y la salvación es devastadora y temerosa.

 

La principal atracción del evangelismo

 

¿Cómo fue que las personas fueron atraídas a esta Iglesia de Dios? Uno de los principales atractivos del alcance evangelístico era mostrando una forma para escapar de la Gran Tribulación. Unos de los principales mensajes fue "Hay una forma de escapar."

 

Piense en esto: ¿No es el deseo de todos salvar su propio pellejo? Cuando le dijeron que había una forma de escapar, ¿no quería esto? Y cuando vino a la Iglesia, uno de los primeros sermones que capturó su imaginación contenía lo siguiente: "Por tanto presten atención, y oren en todo tiempo para que puedan ser contados dignos de escapar de todas estas cosas que sucederán...." (Lucas 21:36).

 

Entonces el ministro daría un sermón detallado sobre un lugar de seguridad que se entiende estar en Petra. Y que si usted lograba llegar a Petra, había logrado todo—su salvación estaba asegurada.

 

La promesa de escape personal fue otro ENGAÑO. Dios proveerá una forma de escapar, ya que El hace el llamado, y aquellos que verdaderamente se arrepienten, y aman a Dios, guardan Sus mandamientos, y viven en Su camino de vida, recibirán salvación espiritual.

 

¿Cuál fue otro ENGAÑO que ocurrió? Le fue dicho que si usted dejaba esta estructura corporativa, no escaparía de la Gran Tribulación.

 

Esto llegó a ser otro anzuelo puesto sobre usted por el ministerio. ¿Ve cuan sutilmente fueron hechas estas cosas? Otro anzuelo fue presentado como la solución para sus problemas financieros: el diezmo—primero, segundo, tercero, y ofrendas generosas.

 

Pero escapar la Gran Tribulación no es algo lógico con la declaración que dice que vamos a sufrir por Cristo. El mensaje predicado fue, en efecto: Si usted diezma fielmente y da ofrendas abundantes a la Iglesia, podría comprar una forma de escape y salvación. Éstas no fueron las palabras exactas. Pero se implicaba que si usted no diezmaba, y si no daba todo lo que podía, muy seguramente no seria protegido.

 

Aun hay personas que están encerradas en esta mentalidad inducida de temor. Están tan encerrados en esto que son miedosos para pensar por sí mismos. En otras palabras, han dejado sus cerebros en la puerta de la iglesia, y nunca han vuelto a recogerlos.

 

¿Cuan peligroso puede ser este temor?

 

Recuerdo cuando un famoso evangelista visitó nuestra congregación. El servicio fue hecho en un local en una noche calurosa de verano sin aire acondicionado y con las ventanas abiertas. Mientras el evangelista estaba predicando, hubo un gran chirrido de llantas y un ruido de un choque de auto. Había ocurrido un choque justo afuera de la ventana.

 

Debido a la reacción natural, todos miraron hacia el accidente. Quizás alguien estaba herido. Quizás podríamos ayudar. Pero el evangelista dijo, "¿Cómo se atreven ustedes a mirar el accidente? ¡Lo que estoy diciendo es más importante! ¡Escuchen lo que tengo que decir! ¡Ninguno de ustedes se atreva a ir allá afuera!" Los hermanos estaban llenos de temor, se sentaron obedientemente mirando hacia adelante con sus ojos bien abiertos. Él dijo, "¡Hermanos, con todo este problema de la iglesia que hemos estado teniendo, quiero decirles que nuestro líder en la iglesia puede estar 95% en error y ustedes 95% correctos, pero Dios va a respaldarlo a él y no a ustedes! ¡Ustedes serán lanzados en el lago de fuego por rebelarse contra el gobierno de Dios!"

 

El temor destruye la verdad

 

¿Entiende ahora los problemas que ocurrieron cuando éstas prorrogativas fueron sutilmente transferidas a los ministros? Eso espero. Pero, lo peor de todo fue que la mayoría no cayó en cuenta de lo que estaba ocurriendo.

 

Los hermanos sabían que tenían que obedecer a los ministros, y que más les valía asistir a la Iglesia. Si no lo hacían, recibirían una llamada telefónica preguntando, "¿Donde ha estado y que ha estado haciendo?" (La asistencia era secretamente tomada cada semana).

 

Para mantener a todos involucrados, algunas congregaciones tenían tantas actividades que todo tiempo libre de los miembros tenía que ser gastado en las actividades de la iglesia. Además de Servicios de los Sábados, habían deportes los  domingos, Estudio Bíblico los miércoles, Club de Oratoria una noche a la semana y muchas otras obligaciones. A menudo había actividades para los siete días de la semana. También, los diáconos y los ancianos de la iglesia tenían muchas otras reuniones que atender.

 

Ya que la gente estaba temerosa de perder la salvación, terminaban involucrándose totalmente en la Iglesia. ¿Pero, como se supone que la Iglesia de Dios debe mantenerse unida? ¿Será a través de tácticas de control y orden usadas por los ministros y actividades organizadas? Las Escrituras muestran que la Iglesia debe unirse en amor en lugar que el ministerio la mantuviera unida por autoridad y temor. Y luego el día puede llegar cuando algunos despierten y pregunten "Dios, ¿por qué soy tan miserable en esta Iglesia?"

 

La respuesta es: —El liderazgo violó los mismos mandamientos porque transfirieron el amor de Dios para si mismos. Fue muy sutil. Luego reemplazaron el amor de Dios con su propia autoridad.

 

La estructura correcta de la Iglesia

 

¿Cuál es la estructura organizacional para la Iglesia? La única estructura necesaria es aquella que supla las necesidades de las congregaciones tales como: encontrar un lugar de reunión, imprimir folletos y revistas, distribución y envío de los materiales, etc.

 

La organización nunca debería tomar para si misma el amor de Dios. Nunca debería permitir en su estructura la capacidad de transferir las prerrogativas de Dios a la corporación o a un líder individual.

 

Hubo también un problema en el Colegio de la Iglesia. No todos los que asistieron fueron puestos en "La Obra" o en "el Ministerio." Si una persona no era contratada por la Iglesia después de graduarse, era visto como un paria. Eso fue así porque la meta de trabajar para la Iglesia había sido muy golpeada en la mente de todos.

 

Si cierta persona no era competente en hacer cierta tarea, ellos debían haber sido despedidos de esa posición con amor y la bendición de Dios. No debía haber sido forzado como algo de vida o muerte.

 

Algunos graduados dejaron el Colegio de la Iglesia sintiéndose como perros golpeados. Eran personas capaces, pero los hicieron sentir como fracasados. Esto fue debido al temor y a la autoridad del ministerio, y porque la oportunidad para una persona de ser parte de "La Obra" fue puesto en un nivel incorrecto. Fue puesto en el nivel de la salvación, cuando debía haber sido en el nivel de las aptitudes individuales para un trabajo específico.

 

La estructura por comité no resolvió el problema

 

Cuando la constitución y otras leyes de otra Iglesia de Dios en la cual yo estaba involucrado fueron establecidas, nosotros firmamos nuestra propia sentencia de muerte. Y fue muy rápido, porque no habíamos aprendido nada de nuestra historia anterior. No habíamos aprendido la lección que acabamos de cubrir. Empezamos amando a Dios, y haciendo lo que deberíamos, pero cuando nos organizamos al punto de que la corporación y estructura nos alejó de amar y servir a Dios, eso tuvo una caída rápida. Fallamos incluso más que nuestra afiliación anterior, parcialmente porque éramos un grupo más pequeño, pero también porque habíamos creado comités. En vez de tener una dictadura de un hombre, teníamos una dictadura por comités, con hombres que se creían sentados en la silla de Dios. Ellos entonces hicieron juicios, no solamente por cosas que consideraron correctas o incorrectas, sino también si el corazón de uno estaba correcto con Dios o no. ¿Quién sabe que corazón es correcto con Dios? ¡Solamente Dios sabe!

 

¿Cómo se sentiría usted si se hubiera arrepentido profundamente en su mente y en su corazón, y se le dijera que eso fue inaceptable? Esto fue exactamente lo que estos comités hicieron, sentándose en la silla de Dios.

 

Respuestas incorrectas a los problemas

 

El error más grande en esa otra Iglesia de Dios fue esto: creímos que los problemas en nuestra anterior iglesia corporativa fueron relacionados con la estructura. Creímos que por cambiar la estructura de un hombre gobernando a un comité gobernando, los problemas serian eliminados. Pero fallamos al entender que la estructura de una organización no cambia la naturaleza humana.

 

Nuestro más grande problema es la naturaleza humana. No pudimos eliminar los problemas de nuestra afiliación anterior a una Iglesia de Dios al cambiar a un tipo diferente de estructura. La única forma de resolver el problema es regresar al primer mandamiento de amar a Dios y edificar todo alrededor de eso, de acuerdo a la función.

 

Nuestra Iglesia de Dios anterior se convirtió en un movimiento porque queríamos hacer una obra para Dios, en vez de permitir que Dios nos mostrara que obra deberíamos hacer. Usamos nuestros propios razonamientos y pensamientos. Cuando usted crea un movimiento, ha creado un monumento en vez de amar y servir a Dios. Por consiguiente, estaba condenada a la destrucción. Estoy agradecido por la misericordia de Dios que Él no nos destruyó físicamente.

 

¿Qué Desea Dios?

 

Ahora podemos ver por primera vez lo que Dios quiere que hagamos. No debemos crear nada de nuestro propio razonamiento que aleje a la gente de amar a Dios. Recuerde que esta es la clave. Cualquier estructura organizacional debería ser establecida para cumplir cualquier tarea que tenga que ser hecha, ¡pero la tarea no es un asunto de salvación! ¿Es teclear un asunto de salvación? No. ¿Es escribir un asunto de salvación? No. ¿Es donde usted vive un asunto de salvación? No. ¿Es lo que usted hace para su trabajo un asunto de salvación? No, no mientras usted sea capaz de amar a Dios y guardar Sus mandamientos. Entonces, el trabajo no es parte de la salvación.

 

Nuestra Iglesia anterior hizo el trabajo de una persona parte de la salvación. Eso fue entonces incorporado en la estructura jerárquica ministerial. ¡Eso nunca debió haber sido hecho!

 

Antes de caer en completa apostasía, Dios permitió a nuestra afiliación anterior predicar lo básico. Mucha gente ha dejado esa iglesia organizada, pero no entienden que salió mal. Como resultado, muchos hermanos están vagando como ovejas heridas, golpeadas y dispersas.

 

Que vergüenza que nuestras afiliaciones anteriores se hayan involucrado en tal desorden. Sin embargo, para nosotros entender el amor de Dios, parece que debemos venir a una Iglesia de Dios, y después salir de una Iglesia de Dios, para poder reunirnos con hermanos que verdaderamente aman a Dios y los unos a los otros.

 

El Propósito para la Iglesia

 

El apóstol Pablo fue inspirado a definir claramente el propósito de la iglesia y del ministerio:

 

"Y El organizó a algunos como apóstoles, y a algunos profetas, y a algunos evangelistas; y a algunos, pastores y maestros" (Efesios 4:11).

 

La clave está en el versículo 12, por favor mire estas palabras cuidadosamente. ¿Dice que es        para pronunciar fallos del gobierno de Dios sobre los hermanos? No dice eso, ¿o si?

 

Note lo que dice: "Para el perfeccionamiento de los santos..." ¿Para que? Para hacer el discípulo como el maestro, "para la obra del ministerio..." Y eso en realidad significa para la obra del servicio.

 

El ministerio es un servicio. "Para la edificación..." El significado de edificar es: enseñar y construir en amor. Verso 12: "…Para la edificación del cuerpo de Cristo hasta que todos..."

 

¿Quiénes son todos?— Quienes quiera que sean apóstoles, profetas, evangelistas, pastores, maestros, hermanos, todos juntos... "...vengamos en la unidad de la fe y del conocimiento del Hijo de Dios..."

 

Cuando los seres humanos toman prerrogativas de Dios para si mismos, rechazan el verdadero propósito del ministerio y destruyen el conocimiento del Hijo de Dios. Podemos comprender mucho más si estamos mirando directamente a Jesucristo y a Dios el Padre, en vez de a hombres o a una organización.

 

"y del conocimiento del Hijo de Dios, hacia un hombre perfecto,…"  [o hacia un cristiano maduro espiritualmente.] "hacia la medida de la estatura de la plenitud de Cristo"

 

Este es un trabajo inmenso, que no puede ser hecho cuando las prerrogativas de Dios han sido entregadas a seres humanos, o a una autoridad humana, o a una organización de iglesia corporativa.

 

Versículo 14— "Para que no seamos mas niños, sacudidos y llevados... " ¿No es esto lo que ha ocurrido en nuestra afiliación anterior? Los miembros son sacudidos de aquí para allá por las autoridades en la Iglesia. "…llevados con todo viento de doctrina por las ARTIMAÑAS DE HOMBRES en astucia, con vista a la sistematización del error"

 

Pero, ¿No es algo que el engaño fue tan inteligente y el TRUCO DE MANOS tan sutil que incluso aquellos quienes lo hicieron, no sabían lo que estaban haciendo? Sin embargo, aquí esta lo que Cristo quiere:

 

Versículos 15-16— “Sino manteniendo la verdad en amor, podamos crecer en todas las cosas en Quien es la Cabeza, Cristo de Quien todo el cuerpo, adecuadamente estructurado y compactado por eso que cada coyuntura suple, de acuerdo a su trabajo interno en la medida de cada parte individual, está haciendo el incremento del cuerpo hacia la edificación del mismo en amor.

 

Esta es la estructura correcta de la Iglesia de Dios. No permita que la estructura de la administración interfiera con el primer mandamiento de amar a Dios con todo su corazón, mente, alma y ser, para poder llegar al conocimiento entero y a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo.

 

Nota: Si usted ha sentido que otros han tratado de cambiar sus creencias fundamentales, por favor lea nuestro libro: “Señor, ¿Qué debería hacer?” Este libro puede ser bastante extenso para leerlo en línea por lo que le sugerimos descargarlo primero.