Colosenses 2:14—¿Fueron los 10 mandamientos realmente clavados en la cruz cuando Jesús fue crucificado?
(Tomado del librillo “Entendiendo las Escrituras difíciles de Pablo
concernientes a la Ley y los Mandamientos de Dios”)
Por
Fred R. Coulter
www.laverdaddeDios.org
Otro ejemplo de mala interpretación de los escritos de Pablo es encontrado en Colosenses 2:14, 16-17, y surge de una traducción extremadamente pobre del texto griego. Infortunadamente, este mal entendimiento particular ha llevado a millones a creer que todas las leyes y mandamientos fueron clavados a la cruz cuando Jesús fue crucificado. Como en el caso de Gálatas 4, notaremos que la interpretación falsa de los protestantes es exactamente lo opuesto de lo que Pablo escribió y quiso decir en realidad.
Examinemos la traducción de la Reina Valera de estos pasajes clave, comenzando con el verso 14: “Anulando el acta de los decretos que había contra nosotros, que nos era contraria, quitándola de en medio y clavándola en la cruz.”
De esta traducción oscura, la gente presume que la frase “acta de los decretos” constituye las leyes y mandamientos de Dios. Po lo tanto, ellos concluyen incorrectamente que los 10 Mandamientos fueron clavados a la cruz.
En el griego, “acta de los decretos” es chriographon tois dogmasin—lo cual significa literalmente “escritura en decretos o dogmas.” En el Nuevo Testamento, dogma siempre se refiere a “decretos” escritos por hombres (Lucas 2:1; Hechos 16:4; 17:7; Efesios 2:15). En ningún lado en toda la Biblia dogma, “decretos,” se refiere a alguna parte de la Ley de Dios. Po lo tanto, esta frase en Colosenses 2:14 no tiene nada que ver con la Ley bíblica.
¿Pero qué significa realmente la expresión “acta de decretos”? Como veremos, la frase se refiere a un registro escrito delos pecados de uno, llamada “una nota de deuda.” En su libro épico Las dos Babilonias, Alexander Hislop escribe concerniente a esta práctica religiosa griega pagana, la cual los convertidos en Colosas indudablemente habían practicado antiguamente (la práctica también fue encontrada en la antigua religión china): “En una obra de alguna importancia sobre las costumbres, llamada Méritos y deméritos examinados, [describe como] un hombre es inducido a llevar consigo mismo una relación [escrita] de débitos y créditos de las acciones de cada día, y a liquidarlas [en resumen] al final del año. Si el balance es a su favor, éste sirve como base para un capital de méritos para el año siguiente; y si en su contra, deben ser liquidados por obras buenas futuras 9justificacion por obras]. Se dan algunas listas y tablas comparativas, tanto de las acciones buenas como de las malas en las distintas relaciones de la vida; y se inculca celosamente la benevolencia primero con respecto al hombre, y después con respecto a las bestias de la creación. Causar la muerte a alguien se cuenta como un ciento en lado del demérito; en tanto que un solo acto de caridad descarga las cuentas en uno en el otro lado....” (pág. 231).
Así, la frase en Colosenses 2:14 debería ser traducida como “nota de deuda contra nosotros con los decretos de nuestros pecados”—o un listado simbólico de nuestros pecados contra Dios. Nuestros pecados y la deuda de nuestros pecados fueron clavados a la cruz cuando Jesucristo fue crucificado y murió. Basado en un verdadero arrepentimiento de los pecados a Dios el Padre, Jesucristo borra la “nota de deuda” a través de la remisión de nuestros pecados. Jesucristo, Quien no conoció pecado, fue hecho pecado por nosotros. Él fue clavado a la cruz como una ofrenda por los pecados del mundo entero. La “nota de deuda” de nuestros pecados fue clavada simbólicamente a la cruz, NO los mandamientos de Dios los cuales permanecen para siempre.
Cuando Colosenses 2:13 es incluido con la traducción correcta del verso 14, el verdadero significado de lo que Pablo escribió llega a ser claro: “A ustedes, quienes estaban una vez muertos en sus pecados y en la circuncisión de su carne, ahora Él los ha hecho vivos con Él, habiendo perdonado todas sus ofensas. Él ha borrado la nota de deuda contra nosotros con los decretos de nuestros pecados, la cual nos era contraria; y la ha quitado, habiéndola clavado a la cruz.” Por lo tanto, el significado real de estos versos no tiene nada que ver con clavar la Ley a la cruz, como es creído falsamente por millones de cristianos profesantes.