Epístola de
Primera de Corintios VII
Capítulo 3
Fred R. Coulter
www.laVerdaddeDios.org
Vamos a I Corintios 3 y como veremos, este
capítulo contiene bastantes cosas. Hay excelentes lecciones para nosotros ahora
y nos ayudarán a entender algunos de los problemas que hay en las Iglesias de
Dios—todos los nombres y tipos que hay. Esta es la primera Epístola a los
Corintios, y es la más difícil de todo el Nuevo Testamento. Contiene mucha
corrección, pero aun así, Pablo les daba algo de espacio para respirar; él
siempre hacía eso.
Cuando lleguemos a II Corintios, veremos
que en cuanto él se arrepintió, todo mejoró. Sin embargo, yo me pregunto cuál
fue la historia de la Iglesia de Corinto, después de que Pablo muriera. Me pregunto
qué le sucedió a esa iglesia, aunque hoy veremos parte de ello.
I Corintios 3:1: “Y, yo, hermanos, no fui capaz de hablarles como a
aquellos que son espirituales, sino como a aquellos que son carnales—inclusive
como a bebes en Cristo. Les di leche para beber, y no carne; porque ustedes no
eran todavía capaces de recibir carne espiritual; ni tampoco son capaces
ahora, porque ustedes son todavía carnales…” (versos 1-3).
Yo pienso que eso tiene mucho que ver con los
problemas que se encuentran en la iglesia de Dios ahora; hay demasiada
carnalidad. Esto lo hemos aprendido por experiencia, por observación y al
aprender del Espíritu de Dios. Mucha de la carnalidad que llega a la Iglesia de
Dios, es la carnalidad de la ‘bondad’ de la naturaleza humana. Que son las
cosas buenas que las personas pueden hacer y por lo tanto deducen que eso es
ser espiritual.
En la Iglesia de Corintio tenían mucho de eso, “…Porque
desde que envidia y contención y divisiones están entre ustedes…” (verso
3). Si se supone que la Verdad nos hace libres, ¿Por qué hay tantas contiendas
entre algunas de las iglesias? Pienso que parte de la respuesta es que, la
Palabra de Dios no está siendo usada con sinceridad. La Verdad lo hace libre,
si la usa con sinceridad.
La Palabra de Dios se puede usar engañosamente, pero
el apóstol Pablo escribió en I Timoteo 1, que la ley es buena mientras se use
legítimamente. En I Corintios 4, habla de aquellos que la usan engañosamente.
Si usted combina esas dos cosas, ¿Qué obtiene? Alguien que usa la Palabra de
Dios engañosamente.
Aquí hay un ejemplo de cómo se puede usar la Palabra
de Dios engañosamente. Éxodo 20 habla acerca del Sábado y de que no se debe
hacer ningún trabajo en el Sábado. Entonces, alguien viene y dice, ‘La Palabra
de Dios no es buena, porque se contradice a sí misma,’ porque,
Juan 5:17: “Pero Jesús les respondió, ‘Mi Padre está
trabajando hasta ahora, y Yo trabajo.’” Se supone que ese día era un Sábado.
Entonces, ¡Trabajan en el Sábado! Si Jesús trabajó en el Sábado, yo también
puedo trabajar el Sábado, ¿no es así? Esa es la lógica que se usa, ¿no es
cierto?
Verso 18: “Así entonces, en registro de este dicho,
los judíos buscaron aún más matarlo, no solo porque había liberado el Sábado…
[‘Entonces ¡Jesús fue un quebrantador de la ley!’]…sino también porque
había llamado a Dios Su propio Padre, haciéndose igual con Dios.”
Muy bien, entonces vamos a aceptar lo que dice esta
Escritura; trabajaremos en el Sábado. Dios el Padre trabaja en el Sábado y
Jesús trabaja en el Sábado; Jesús quebrantó el Sábado. Guardar las leyes de
Dios no significa nada. Podemos ir a Romanos 10, donde dice que Jesús es ‘el
final de la ley.’ ‘Por lo tanto hermanos, ¡son libres de cualquier ley!’ Yo he
escuchado sermones muy similares a esto. Pero ¡Eso no es usar la Palabra
de Dios sinceramente!
Porque, donde Jesús dijo ‘…Mi Padre trabaja y Yo
trabajo’ Preguntémonos:
·
¿Qué tipo de trabajo estaban
haciendo? ¡Predicando!
·
¿Cuál es el trabajo de Dios el
Padre? ¡Dirigir el Espíritu Santo!
·
¿Es ese un trabajo espiritual? ¡Sí!
·
Entonces, ¿Estaba Dios
quebrantando el Sábado al hacer un trabajo espiritual? ¡No!
Ahora la siguiente parte de la respuesta: ‘El Sábado
fue hecho para Dios, así que el hombre puede hacer lo que quiera’ ¿Cierto? ¡NO!
¡El Sábado fue hecho para el hombre! El trabajo espiritual que
nosotros hacemos, no es trabajo físico. De hecho, en el Sábado uno debe hacer más
trabajo espiritual, como leer su Biblia, pensar en la Palabra de Dios, enseñarles
a sus hijos, y hablar con otros acerca de la Palabra de Dios.
Anoche tuvimos una discusión acerca del Sábado. ¿Qué
es lo que se puede y no se puede hacer en el Sábado? Sus hijos que están
creciendo, no saben lo que ustedes saben, pero nosotros automáticamente
asumimos que ellos tienen sus oídos abiertos en cada servicio. ¡NO! Así que
tuvimos que repasar todo lo que se puede y no se puede hacer en el Sábado. En
el Sábado, hacemos mucho trabajo—pensando y hablando—haciendo trabajo
espiritual. Yo no estoy comprando o vendiendo, no estoy llenando formularios
para obtener préstamos, no estoy haciendo llamadas, ni haciendo lo que me
complace. Pero hoy vine manejando hasta acá, y volveré a casa manejando. Yo no
estoy haciendo el trabajo y mi auto no es un animal. También he escuchado a
personas decir, ‘todos tus animales también pueden descansar; tu sirviente, o
sirvienta.’ Yo solamente estoy sentado, manejando. Cualquier esfuerzo físico
que sea necesario para asociarnos en el Sábado, no es trabajo porque a usted no
le pagan por eso. Entonces, cuando Jesús les respondió, Él les dijo algo que
ellos no entendieron.
Nosotros ahora estamos haciendo un trabajo espiritual,
porque estamos estudiando la Biblia. Nuestras mentes están trabajando; estamos
leyendo, estamos pensando, estamos absorbiendo la Palabra de Dios y el Espíritu
de Dios está trabajando en nosotros. ¡Eso es trabajo! Pero, eso no es trabajo
de sus propios negocios, eso es algo completamente diferente.
“…los judíos buscaron aún más matarlo, no solo porque
había liberado… [‘quebrantado’ (VRV)]… el Sábado…” (verso 18). La
palabra ‘quebrantado’ es una palabra muy inusual.
Pero, ¿De qué fue acusado Jesús en ‘quebrantar el Sábado?
¡En decirle al hombre incapacitado que Él lo había sanado, y que tomara su
lecho y caminara! Uno no puede cargar una cama en el Sábado, pero ese sólo
era un lecho. No era un colchón ni un boxspring, solamente era un lecho, como
una bolsa de dormir.
Pero eso era en contra de la regla farisaica
del Sábado, en la que no se podía cargar algo así en el Sábado. Eso no tenía
nada que ver con el Sábado ni con los reglamentos de Dios, sino con una regla
farisaica. Nosotros podríamos sentarnos y crear un reglamento para limitar el Sábado,
pero si ese reglamento rompiera el espíritu del Sábado, no sería válido
ante Dios. Nosotros podríamos guardarlo por nuestra propia cuenta, pero es un
reglamento carnal. De ahí es de donde vienen los conflictos. Esta sería una
regla carnal: uno no puede cargar su mochila en el Sábado. Bueno, ese hombre
había estado cargando su lecho durante 38 años y ahora caminaba alrededor del
templo.
¿Qué significa la palabra ‘quebrantado’? ¿De dónde
viene? Viene de la palabra griega ‘luo’—es el verbo que usan como el
prototipo modelo, en el griego básico. Su primer prototipo del verbo en el
griego del Nuevo Testamento va a ser ‘luo’—que significa liberar. ¿Qué liberó
Jesús de los fariseos? Él liberó esa ley de ‘no cargarás tu lecho en el Sábado,’
que fue creado por los fariseos.
Ahora vamos a Mateo 23, para ver algo más que nos ayudará
a aclarar eso. Cuando yo hablaba del Sábado en la radio, habían personas que
escribían y decían ‘Jesús quebrantó el Sábado; Él trabajó en el Sábado.’
Mateo 23:1: “Entonces Jesús habló a las multitudes y a
Sus discípulos, diciendo, ‘Los escribas y los fariseos se han sentado en la
silla de Moisés como jueces; por tanto, cada juicio que ellos les digan
observar, observen y hagan. Pero no hagan de acuerdo a sus obras; porque ellos
dicen y no hacen. Porque atan cargas pesadas y difíciles de soportar…’” (versos
1-4). Esto nos dice que, está bien hacer cualquier cosa que se haga en
conformidad con la ley de Dios. Eso es básicamente lo que nos está diciendo.
Aquí está hablando de que ellos tenían sus propias
reglas y ‘cargas pesadas difíciles de soportar,’ ¡y las ponían sobre los demás!
Verso 4: “Porque atan cargas pesadas y difíciles de
soportar, y las ponen sobre los hombros de los hombres; pero
ellos no las moverán con uno de sus propios dedos.” Eso es lo que
Jesús estaba liberando; Él no estaba quebrantando el Sábado.
Sin embargo, ¿Alguna vez han estado en algún grupo de
la iglesia en el que, si usted ‘rompe su regla’ entonces está rompiendo
una Ley de Dios? ¡Sí! Eso nos ayuda a ver cómo se podrían tener muchas
contiendas, y es verdad; pienso que la respuesta a esa pregunta es la razón por
la que estamos aquí. ¿Por qué hay tantas contiendas? ¡Yo no quiero contiendas y
no quiero discutir acerca de la religión! Cuando estamos en una situación en la
que no deseamos crear contiendas, no lo hacemos. Yo no quiero discutir acerca
de eso, pero eso no significa que no estoy buscando la Verdad. Sólo que ¡yo
quiero la Verdad sin contiendas! Espero que podamos tener eso.
I Corintios 3:3: “Porque ustedes son todavía carnales.
Porque desde que envidia y contención y divisiones están entre ustedes,
¿no son ustedes carnales? ¿Y no están caminando de acuerdo a caminos
humanos? Cuando alguien dice, ‘Yo soy de Pablo,’ y otro dice, ‘Yo soy de
Apolos,’ ¿no son ustedes carnales? ¿Quién es entonces Pablo? ¿Y quién es
Apolos? Ellos son solamente ministros a través de quienes ustedes
creyeron, incluso como el Señor le dio a cada uno. Yo sembré y
Apolos regó, pero Dios dio el incremento” (versos 3-6). Él da la respuesta aquí:
¡Siempre mirar hacia Dios! ¡Dios da el incremento!
Verso 7: “Por tanto, ni el que planta es algo, ni el
que riega; porque es Dios Quien da el incremento. Ahora el que
planta y el que riega son uno, pero cada uno recibirá su propia recompensa de
acuerdo a su propio trabajo. Porque nosotros somos los compañeros de trabajo de
Dios, y ustedes son la labranza de Dios, la construcción de Dios. Como
un arquitecto sabio, de acuerdo a la gracia de Dios que me fue dada, yo he colocado
el fundamento, y otro está construyendo sobre él. Pero cada uno
tenga cuidado de cómo construye sobre el” (versos 7-10). Después él ya
entra en sus vidas personales.
Verso 11: “Porque
nadie es capaz de colocar ningún otro fundamento además de ese que ha
sido colocado, el cual es Jesucristo. Entonces si cualquiera edifica sobre este
fundamento oro, plata, piedras preciosas, madera, heno o rastrojo, la
obra de cada uno será manifestada…” (versos 11-13)— ¡El revelar!
{Noten la 5ta parte de esta serie} ¡Las obras de cada uno serán reveladas! Las
obras de cada persona que Dios llama, serán reveladas. Seremos probados y vamos
a pasar por varias pruebas, aunque ya hemos soportado bastantes cosas.
“…porque el día de prueba la declarará,
porque será revelada por fuego…” (verso 13). Este es fuego simbólico; no es un
lanzador de fuego. No sé de ningún miembro de la iglesia que haya pasado un
concurso de lanzar flamas.
“…y el fuego probará que clase de obra es la de
cada uno. Si la obra que cualquiera ha edificado perdura, recibirá una
recompensa. Si la obra de cualquiera es quemada, sufrirá perdida; pero él mismo
será salvo, sin embargo a través de fuego, ¿No entienden que son templo de
Dios, y que el Espíritu de Dios está viviendo en ustedes?” (versos
13-16)—viviendo dentro de ustedes.
Verso 17: “Si alguno profana el templo de Dios, Dios
lo destruirá a él porque el templo de Dios es santo, tal templo son ustedes.
Nadie se engañe a sí mismo…” (versos 17-18). El primer gran problema que traen
los falsos profetas, es que se engañan a sí mismos.
“…Si cualquiera entre ustedes piensa ser sabio en este
mundo, llegue a ser un tonto, para que pueda ser sabio a la vista de Dios.
Porque la sabiduría de este mundo es necedad con Dios…” (versos
18-19). Solamente piensen en el mundo y todo lo que sucede; cómo reaccionan las
personas nos ayuda a darnos cuenta que es cierto. Un ejemplo: la reforma de
impuestos simplificados.
“…porque está escrito, ‘Él prende a los sabios en su
propia astucia.’ Y de nuevo, ‘El Señor conoce los pensamientos del
sabio, que son vanos’” (versos 19-20). Ese es un poder asombroso que Dios
tiene; Él conoce nuestros pensamientos. Piensen en eso un momento: ¡Dios
conoce nuestros pensamientos! Más adelante veremos que Él prueba
nuestros corazones.
Verso 21: “Por lo tanto, que nadie se gloríe en los
hombres; porque todas las cosas son suyas, ya sea Pablo, o Apolos, o
Cefas, o el mundo, o vida, o muerte, o cosas presentes, o cosas por
venir—todas son suyas; y ustedes son de Cristo y Cristo es de
Dios” (versos 21-23).
Nosotros pudimos habernos ahorrado muchos problemas y
contiendas; veamos un ejemplo de lo que sucedió en la Iglesia de Dios
Universal. Hubo un tiempo en el que no se gloriaban en los hombres, pero
después llegó la carnalidad. La bondad de la naturaleza humana empezó a
infiltrarse, y entonces empezaron a glorificar a los hombres.
Hay un mandamiento claro, de no permitir que nadie
‘…se gloríe en los hombres…’ porque hay un castigo automático de auto-destrucción,
cuando uno empieza a gloriarse en los hombres. Se empieza a formar un grupo que
le da más gloria y favor a una persona. También se forma el grupo de los
excluidos, porque no están en la lista para ir a cenar con ciertas personas.
Así eran las cosas antes. Eso también sucedió con las asignaciones de los
ministros en diferentes áreas. Por causa de una sola cosa—y la vanidad
de esa cosa— ¡llegaron todo tipo de pecados a la jerarquía de la Iglesia de
Dios Universal! Por causa de un pecado, vinieron los demás pecados.
Después vino un apóstol, que después fue el
apóstol de Dios, y más adelante fue el único apóstol de Dios.
Entonces, con esa vanidad vino el adulterio, la mentira, las trampas y el robo.
Por causa de eso, vinieron conflictos y discusiones, porque había personas que
no querían tolerar esas cosas y vieron claramente, que no debía ser así con
Dios. Si eso no hubiera quebrantado el mandamiento, podríamos preguntarnos cómo
hubiera sido la Iglesia.
Volvamos y veamos varias de estas secciones. La
primera que veremos será en el verso 3—que habla acerca de conflictos, envidias
y carnalidad. Muchas de estas cosas solamente las veremos brevemente, porque ya
las hemos estudiado.
Romanos 8:7: “Porque la mente carnal es
enemistad contra Dios, porque no está sujeta a la ley de Dios; ni en verdad
puede estarlo.” ¡La carnalidad lo hace enemigo de Dios!
Gálatas 5:19—esta es otra Escritura básica, que nos
dice todas las obras de la carne: “Y manifiestas son las obras de la carne, las
cuales son estas: adulterio, fornicación…” Piensen en
todos los problemas que tenemos en el mundo, sólo por esas dos obras de la
carne.
“…impureza…” Ahora piensen en cuantos problemas y
enfermedades tenemos por causa de la impureza. Yo vi todo un reporte acerca de
la cólera. El primer estudio científico que se hizo fue en los 1600s-1700s, en
Londres, donde alguien se sentó, analizó y averiguó de dónde recibían la cólera
y se enfermaban. Todos los enfermos estaban a orillas del rio y los que estaban
alejados no tenían cólera.
Empezaron a analizar distintas cosas, hasta que se dieron
cuenta que era el agua. ¿Por qué era el agua? Porque el drenaje se estaba
yendo hacia la corriente del agua. Por lo tanto, en todas las ciudades grandes
tenían que drenar todo hacia el mar. Londres fue una de las primeras ciudades
en hacer eso, y finalmente terminaron en los 1800s.
Hay un dicho que es cierto, ‘la pureza es cercana a la
santidad.’ Yo he ido a algunos lugares donde es igual que en las películas, que
se encuentra todo sucio y desordenado. Apesta demasiado y se camina en una nube
de moscas. Eso me pasó en el este de Oregón, y era difícil de creer. Había una
persona que había escrito para bautizarse y dijo ‘Yo he escuchado a Herbert por
35 años.’ Él estaba sentado en una mecedora, vestido con overoles y dijo, ‘Sí,
yo pienso que debo ser bautizado.’ Y yo estaba ahí sentado, hasta esperando que
escupiera su tabaco de nuevo. ¡Fue algo impresionante!
¡Pero es real la cantidad de enfermedades que vienen
por la impureza! Eso también tiene connotaciones de hábitos y relaciones
sexuales.
“…libertinaje” (verso 19). Eso es darse
licencia para hacer el mal, pero nadie tiene licencia para hacer el mal. Así
que en realidad, eso ya es crear una licencia para hacer el mal. Es como
alguien que dice, ‘ven conmigo al confesionario.’ Uno le pregunta qué se hace
ahí y el otro le responde ‘confieso todos mis pecados y entonces puedo hacer lo
que quiera la próxima semana.’ Ese es un buen ejemplo de libertinaje.
Verso 20: “Idolatría… [Las personas aman sus
ídolos]…brujería, odio, pleitos, celos…” Ahora tenemos una sociedad llena de
emuladores, que se refleja en la vestimenta, los estilos, la música, el
lenguaje y los peinados.
“…indignaciones, contiendas…” Tan sólo esta semana,
una persona se enojó, tomó una pistola y mató a otra persona. Después, el que cometió
el delito se sentó ahí para esperar que la policía viniera por él. ¡Eso es
terrible!
“…divisiones, sectas, envidias, asesinatos,
borracheras, juergas, y cosas tales como estas; respecto a las cuales les
estoy diciendo de antemano, así como también he dicho en el pasado, que
aquellos que hacen tales cosas no heredarán el reino de Dios” (versos
20-21).
Parece que las iglesias en Galacia no eran muy puras,
¿cierto? Él tuvo que advertirles. ¿Alguna vez yo les he tenido que advertir así?
¡NO! Yo nunca he escrito una carta como esta. ¡Piensen en eso!
Mientras voy manejando, me da mucho tiempo para
pensar. No puedo soportar escuchar la radio todo el tiempo, con todos esos
comerciales tontos, lo mismo que en la televisión. Cuando quiero ser inspirado,
pongo mis casetes de Mesías. Esos me ayudan mucho a pensar; a pensar
en la Palabra de Dios, mientras voy manejando. Entre más cosas veo, más
pienso y entre más cosas experimento, más me doy cuenta que estas cosas son
ciertas.
Cuando estamos estudiando, trato de pensar cómo era la
experiencia para Pablo en Corinto. ¿Cómo hubiera sido haberse parado en frente
de una congregación como la de Corinto? O en algunas congregaciones de Galacia.
Recuerden la primera parte del libro, donde Pablo dijo ‘Estoy asombrado que
estén tan rápidamente siendo alejados de Él, a un evangelio diferente.’ Eso
es algo muy fuerte, ¿no es así? Piensen en eso.
Es como si alguien no pudiera viajar como lo hacemos
ahora, edificara una Iglesia de Dios y les dijera a los hermanos ‘Muy bien
hermanos, sean fieles a Dios, ámense unos a otros y sigan las instrucciones de
la Biblia. Los veré en un par de años.’ Después alguien le envía una carta y le
dice, ‘No vas a creer lo que está sucediendo en esta iglesia.’ Así que después,
Pablo enfatizó en el ‘fruto del Espíritu.’
Verso 22: “Pero el fruto del Espíritu es amor, gozo,
paz, paciencia, amabilidad, bondad, fe, mansedumbre, autocontrol; contra tales
cosas no hay ley. Pero aquellos que son de Cristo han crucificado la
carne con sus pasiones y lujurias. Si vivimos por el Espíritu, también
deberíamos estar caminando por el Espíritu. No deberíamos llegar a ser
vanagloriosos, provocándonos unos a otros y envidiándonos unos a otros”
(versos 22-26).
¿Por qué son carnales las personas? ¡Porque su
conversión no es muy profunda! Todos tenemos cierta cantidad de carnalidad
que cargamos, ¿no es cierto? Incluso Pablo dijo que él era carnal y ‘vendido al
pecado.’ Pero, ¿Por qué estaba hablando de sí mismo?
Aquí está la clave, verso 24: “Pero aquellos que son
de Cristo han crucificado la carne con sus pasiones y lujurias.” ¿Cómo se hace
eso? ¡Permitiendo que la Palabra de Dios haga la corrección! La manera más
fácil de recibir corrección, es recibiéndola de la Palabra de Dios. Todo lo que
tiene que hacer es leerla, porque:
·
Es entre usted y Dios, y las
palabras que usted lee. Usted tiene que decir en su mente: ‘voy a cambiar.’ Esa
es la corrección más sencilla.
·
La siguiente forma más fácil, es
que un ministro le diga
·
Después sería recibir una carta,
como una de estas epístolas
·
La siguiente forma, sería que
su esposo o esposa le dijera. A veces, a ninguno le gusta, pero sigue
siendo una forma sencilla.
·
La siguiente manera, que ya se está
volviendo más difícil, sería que Dios lo enfrente a circunstancias
en las que usted tenga que elegir
·
Una de las peores sería que Dios tenga
que interferir directamente en su vida, para corregirlo.
·
Y la manera más difícil y severa
de todas, es por lo que tuvo que pasar Job; donde Dios tuvo que hablar
personalmente con él
¡Esa sí fue una gran corrección! Esos son los tipos de
corrección que hay, y entre esas cosas, hay pruebas y otras cosas que veremos
en un momento.
Lucas 14:26 nos habla un poco acerca de cargar nuestra
propia cruz, que significa crucificar la carne: “Si alguno viene a Mí y
no odia a su padre, y madre, y esposa, e hijos, y hermanos y hermanas, y,
además, también su propia vida, no puede ser Mi discípulo… [Esa es una
condición]…Y quien quiera que no cargue su cruz y venga tras de Mi no
puede ser Mi discípulo” (versos 26-27). Usted tiene que cargar su cruz, pero
eso no significa que tiene que andar por ahí con un complejo de persecución.
Cargar su cruz es crucificar diariamente la carne.
Por lo tanto, esa es la corrección más sencilla, si
usted está haciendo eso. ¿Recuerdan que en I Corintios 11, el apóstol Pablo
dijo que si usted ‘se juzga a si mimo, no será juzgado de Dios’? Ya sé
exactamente lo que va a suceder, porque lo he experimentado. Cuando usted
permite que suceda ese tipo de corrección, entonces usted empieza a verlo de
la manera que lo ve Dios, porque lo ve con los ojos de Dios. Y después se
dice a sí mismo, ‘¡Oh, qué tonto fui!’
En el Salmo 73, el salmista dijo ‘Yo tenía envidia de
los malvados, y de su riqueza. Hasta que entré al templo de Dios y entonces
entendí. Era un insensato ante Ti, y me comporté estúpidamente. Dios,
perdóname.’ ¡Ese es el Espíritu de Dios trabajando en usted!
¿Alguna vez ha tenido una tentación, que en algún
momento sintió que era abrumadora? Entonces le entra el interés y empieza a
investigar más y más. Después se da cuenta de lo que está sucediendo y usted se
arrepiente de ello, y dice ‘Qué cosa más miserable fue esa.’ Eso se llama ¡Crucificar
la carne!
Santiago 4:4: “Ustedes adúlteros y adúlteras…”
Esto no está hablando solamente del acto físico del adulterio, sino que está
hablando del adulterio espiritual. Recuerden Apocalipsis 17:1-6, donde
habla acerca de ‘la gran ramera que se sienta sobre muchas aguas; que todos los
habitantes de la tierra se emborrachan con el vino de su fornicación.’
“… ¿no saben que la amistad del mundo es enemistad
con Dios?...” La palabra enemistad aquí, es la misma que se usa en
Romanos 8:7, donde dice que ‘la mente carnal es enemistad con Dios.’
¿Por qué es enemistad? ¡Porque usted tiene que hacer lo que hace el mundo! Yo
pienso que algunos equipos atléticos son un buen ejemplo—todo siempre es
positivo; todo es grandioso.
¿Qué notan cuando hay algún discurso político? Ellos
llegan y empiezan a ‘presionar la carne.’ Y eso es lo que hacen en
realidad, observen a los políticos cuando dan discursos. Ellos se saludan de
mano y se toman el brazo; se supone que es un método de comunicación, que hace
que las personas se sientan seguras. Se llama presionar la carne.
Ellos siempre hablan de las cosas buenas de las
personas, excepto de sus enemigos. ¿Cuál es el onceavo mandamiento de los
republicanos? ¡No hablarás en contra de tu compañero republicano! Ese es
un ejemplo de la ‘bondad’ de este mundo. Si usted está involucrado en el mundo,
tarde o temprano tendrá que ser amigo de ellos. No digo que se haga enemigo de
ellos, pero la Biblia dice que ‘el mundo está en enemistad con Dios.’ Así que,
cuando usted empieza a recolectar de las ideas del mundo, de las filosofías del
mundo y de sus caminos, para hacerlos parte de su vida diaria, entonces ¡usted está
cometiendo adulterio espiritual!
Por ejemplo, es como si usted quisiera incrementar su
negocio y supiera que cierta persona va a la iglesia el domingo. Entonces usted
empieza una conversación con esa persona, para tratar de obtener un préstamo.
Primero tiene que empezar haciéndose amigo de la persona, así que lo invita a
cenar y en la conversación, la persona comenta ‘Yo voy a la iglesia el
domingo.’ Y usted responde ‘Ah, eso es bueno. Sería bueno si pudiera ir
contigo alguna vez.’ Ahí, usted se estaría involucrando y se volvería un
hipócrita. ¡Eso es hacerse amigo del mundo!
Tenemos que vivir en el mundo, pero por otro lado, no
vamos a andar por ahí diciendo ‘¡Tú eres del mundo, aléjate de mí! No quiero
nada que ver contigo.’ Tampoco debe ser así.
“…Por tanto, quien quiera que desee ser un
amigo del mundo se hace así mismo un enemigo de Dios ¿O piensan que la
escritura dice en vano, ‘El espíritu que mora en nosotros anhela con envidia’?”
(versos 4-5). Esa es nuestra propia naturaleza humana. Pero, ¿Qué quiso decir
Pablo cuando dijo, ‘para una persona soy una cosa, y para otra persona soy otra
cosa’?
Obviamente, usted debe ser ejemplo para su prójimo;
obviamente debe amar a su prójimo como a sí mismo. Pero usted no debe amigarse
con ellos como parte del mundo; usted puede amigarse con ellos como cristiano.
En otras palabras, hacer amistad con el mundo es renunciar a su propio carácter
cristiano, para que ellos sean sus amigos. De eso está hablando, y ¿Cuántos
grupos pequeños son así? Que dicen, ‘Tienes que hacer lo que te decimos, si
quieres unirte a nuestro grupo, aquí están las reglas. ¿Qué tiene que ver eso
con lo que dijo Pablo?
I Corintios 9:19: “Porque aunque no estoy bajo
esclavitud de nadie, me he hecho a mismo un siervo para todos, para que pudiera
ganar los más.” Entonces, el propósito era ganarlos a todos a Cristo. Él tenía
una meta en mente, y era ganarlos a Cristo; no que él se hiciera como ellos.
Verso 20: “Entonces a los judíos llegué a ser como un
judío, para que pudiera ganar a los judíos…” En otras palabras, él
podía hablar con ellos desde la perspectiva de un judío y decirles, ‘Sí, yo
entiendo eso, yo también soy un judío. Sin embargo, para entender a Cristo,
deben aprender esto.’ A eso se refiere él aquí.
“…a aquellos que están bajo ley, como bajo ley, para
que pudiera ganar a aquellos que están bajo ley; a aquellos que
están sin ley, como sin ley (no estando sin ley para Dios, sino dentro de ley
para Cristo), para que pudiera ganar a aquellos que están sin ley”
(versos 20-21).
Lo que él estaba diciendo aquí, es que él podía
sentarse y hablar con ellos en su nivel; como lo hizo en Atenas. Él les dijo,
‘Ustedes hombres de Atenas, veo que son supersticiosos y adoran a sus demonios.
He venido a predicarles a Cristo.’ Así que, él empezaba al nivel de ellos para
poder predicarles de Cristo.
También iba con personas que no tenían ley; tenían sus
propias reglas pero sin leyes, y él les decía, ‘Yo sé cómo es la naturaleza
humana.’ Entonces, por ahí empezaba.
(Ir a la siguiente pista)
Ahora vamos a I Timoteo 6:3—este es otro lugar donde
habían conflictos y envidias. “Si cualquiera enseña cualquier doctrina
diferente, y no se adhiere a palabras sanas, aquellas de nuestro
Señor Jesucristo, y a la doctrina que es de acuerdo a la piedad,
él es un orgulloso… [Arrogante, vanidoso]…y no sabe nada. Más bien,
tiene una morbosa atracción a cuestiones y discusiones sobre palabras… [Contiendas]…de
las cuales vienen envidias, argumentos, blasfemias, sospechas malignas, vanos
razonamientos de hombres que han sido corrompidos en sus mentes y están
destituidos de la verdad—hombres que creen que ganancia es piedad. De
tales retírate tú mismo” (versos 3-5).
Esto muestra cómo crece la carnalidad; un poco de
levadura leuda toda la masa.
Tito 3:3: “Porque nosotros también fuimos una vez
tontos, desobedientes, engañados, sirviendo toda clase de lujurias y placeres,
viviendo en malicia y envidia, odiosos y odiando uno al otro.”
Proverbios es un muy buen libro, porque está lleno de
comparaciones simples y de entendimiento. Proverbios 23:17: “No permitas que tu corazón envidie a los pecadores...
[Ese es un mandato para nosotros]…sino mantente
en el temor del SEÑOR todo el día.” Si usted está amando y temiendo a
Dios todo el día, entonces
·
¿Por qué envidiaría a los
pecadores?
·
Si usted envidia a los pecadores y
sus posesiones, ¿significa que usted no cree que Dios dará lo que le
corresponde?
Podríamos verlo en varias categorías, porque usted
podría verse en necesidad económica y sin embargo, está tratando de obedecer a
Dios y no puede entender por qué no tiene las cosas básicas, cuando los
pecadores lo tienen todo. Podría ser de esa manera, y eso es por su propia
naturaleza humana, porque usted no está creyendo realmente que Dios le dará
lo necesario.
Por ejemplo, usted es un cristiano y está desempleado;
no tiene más dinero ni un ingreso para sustentarse. Entonces viene un amigo
suyo en un BMW o en un Mercedes Benz y lo invita a su casa, sus hijos están
vestidos con la mejor ropa, tienen calefacción y una casa hermosa. Todos comen
bien, no hay problemas ni contiendas, pero comen cerdo, fuman y maldicen. Si
van a la iglesia, van el domingo. O ni siquiera van; digamos que son judíos
ateos.
Usted está tratando de seguir a Jesús, pero sería muy
probable que se dejara llevar por la envidia. Como le sucedió al señor de la
película El Violinista en el Tejado, que tenía su granja sucia en un
pueblo pequeño, pobre y sucio. El hombre se la pasaba bailando y diciendo, ‘Oh
Dios, ¿Arruinaría Tu plan si yo fuera un hombre rico?’
Pero, si usted dijera en fe, ‘Dios, yo sé que Tú me darás
el universo entero, por lo tanto sé que lo que estoy pasando es para ayudarme a
hacer las cosas que son agradables a Tus ojos. Sé que Tú proveerás.’ Entonces
les garantizo que ustedes no se irían con envidia de esa gran casa. Pero ¡sería
difícil! Especialmente si usted no ha estado cerca de Dios, y por lo tanto, su
naturaleza humana lo estuviera presionando un poco más.
I.
Contienda:
Proverbios 28:25— ¿De dónde viene la contienda en la
Iglesia? Aquí está parte de la respuesta: “El que es de corazón orgulloso provoca
contienda… [Porque cuando usted tiene
emulaciones de hombres, está siguiéndolos y tiene orgullo]… pero aquel quien pone su confianza en el
SEÑOR, será enriquecido. El que confía en su propio corazón es un
tonto; pero quienquiera que camine sabiamente será librado.” (versos 25-26). Leo muchos de esos proverbios y lo
único que se me viene a la mente es: ‘Dios, ¡Ayúdanos!’
Proverbios 17:1—esto es cierto: “Mejor es un
pedazo de pan, y tranquilidad con él, que una casa llena de sacrificios con
pelea.”
Proverbios 16:19: “Es mejor ser de
espíritu humilde con el humilde que dividir el despojo con el orgulloso.”
Muchas películas se basan en esto. ¿Alguna vez han visto una película de un
tesoro robado, donde hay 5-8 personas tratando de averiguar cómo obtenerlo?
Una película así, es: It’s a Mad, Mad, Mad World,
en la que todos están tratando de conseguir dinero; tratando de ver cómo
ganarse mucho dinero y repartirlo con alguien más. El detective fue quien se quedó
con el dinero y fue interesante cómo terminó. El detective se paró sobre un
edificio y tenía todo el dinero en un maletín, entonces el maletín se abrió y
el viento voló todo el dinero. Todas las personas que estaban viendo empezaron
a tomar el dinero.
Verso 8: “Mejor es un poquito con justicia que
grandes ganancias con injusticia.” ¿Recuerdan al tipo que fue arrestado y era
el capo de unos narcotraficantes en Oakland? Comenté acerca de su funeral; él
fue a juicio y fue condenado, así que lo enviaron a prisión, esperando apelación.
La otra noche me enteré, que una vez que eres condenado en una corte federal,
no se puede aplicar la condena, a menos que tenga el derecho a apelación.
Ahora entiendo como muchos de estos capos revierten
todo. Se juntan con jueces de apelación, quienes son todos masones, en
conspiración. A veces me preguntaba cómo es que muchos tenían condena, y de
alguna manera encontraban algún tecnicismo y no se cumplía la condena. ¡Ahora
lo sé! ¡Estaba asombrado!
Ya que lo mataron en prisión, no podía estar
físicamente con su abogado para la apelación, por lo tanto tuvieron que
desechar el caso y declararlo inocente, porque no se puede condenar a un hombre
muerto.
Por lo tanto, los millones que confiscó el gobierno,
no lo pueden usar ni confiscar y venderlo, porque solamente pueden tomarlo
cuando el hombre es condenado. Eso me molesta, porque yo pago mis impuestos, y
me hubiera gustado que ese dinero fuera a la tesorería. El hombre no pudo ser
condenado porque estaba muerto y fue declarado inocente. Vaya manera de
retorcer las leyes—las grandes ganancias sin derecho.
Proverbios 15:18: “Un hombre iracundo incita
discordia, pero uno lento para la ira calma la contienda.” Entre más
envejece uno, más tiene que aprender y aplicar esto. Especialmente cuando sus
hijos están creciendo, y usted tiene que meterse en medio de sus contiendas
para detenerlas. Usted no puede estar enojado cuando lo haga, pero debe ser
firme. A mí me gusta tener este proverbio como un modelo para mí mismo.
II. Concerniente a los Ministros:
Yo pienso que esta es la manera como debe ser. El
ministro no debe estar en una jerarquía sobre las personas, pero tampoco está
debajo de ellas. Así como los miembros son capaces de estar en buena
posición—mientras estén bien con Dios—también debería estarlo un ministro, siempre
y cuando esté predicando fielmente la Palabra de Dios.
En lugar de repasar todo tipo de Escrituras acerca de
esto, solamente lean II Timoteo, que tiene que ver con instrucciones
ministeriales. Habla acerca de:
·
Cómo debe comportarse en la casa
de Dios
·
Que él debe ser un ejemplo
·
Lo que debe enseñar
·
Cómo debe enseñarlo
·
Debe ser fiel con la Palabra de
Dios
·
No debe inflarse en su propia
vanidad
II Timoteo es especialmente bueno, respecto a lo que
debe ser un ministro, y cómo debe conducir su vida. I Timoteo también es de
ayuda.
III. Construyendo sobre el Fundamento de Jesucristo y las Pruebas:
I Corintios 3:12: “Entonces si cualquiera edifica
sobre este fundamento oro, plata, piedras preciosas, madera, heno o
rastrojo, la obra de cada uno será manifestada; porque el día de prueba la
declarará, porque será revelada por fuego; y el fuego probará que clase de obra
es la de cada uno” (versos 12-13).
Agreguemos esto a lo más importante que debe suceder.
I Pedro 4:12: “Amados, no estén sorprendidos en la prueba feroz… [Ahí está,
prueba feroz]…entre ustedes la cual está teniendo lugar para probarlos,
como si alguna cosa extraña estuviera pasándoles.” Cuando vienen las
pruebas, eso es lo que uno piensa: que le ha sucedido algo extraño. Se nos
garantizan las pruebas, y veremos varios tipos de pruebas que vendrán:
1.
Hay pruebas que usted crea
para sí mismo
¿Alguna vez se ha creado pruebas para sí mismo? Usted
se crea pruebas para sí mismo, porque no pone atención o no sigue la Palabra de
Dios, ya sea que la provoque su propia vanidad, o no hace algo que debe hacer.
Esas se pueden evitar pidiéndole sabiduría a Dios.
2.
Hay pruebas que le llegan,
porque Dios va a probar Su fe
No tiene nada que ver si usted es justo o pecador;
Dios va a probar su fe. Cuando Dios prueba su fe, Él quiere saber que usted
será fiel. Es para eso y yo he escuchado a personas decir ‘Si usted tiene una
prueba, es porque está pecando. Dios lo está limpiando.’ Ese es un tipo de
prueba, es cierto, pero no todas las pruebas son de esa manera. A veces, es solamente
para probar su fe.
3.
Pruebas para la gloria de
Dios
Nada más que para eso; ¡para un testimonio!
4.
Pruebas que añadirán a su
recompensa
Miremos la prueba en Apocalipsis 2, que es para la
gloria de Dios. No fue por algo que habían hecho estas personas y no fue porque
eran pecadores. Dios no los condena por un pecado, pero aparte de eso, eran
pobres.
Apocalipsis 2:8: “Y al ángel de la iglesia de los
Esmirnianos escribe: Estas cosas dice el Primero y el Último, Quien estaba
muerto pero está vivo. Conozco sus obras y tribulación…” (versos 8-9).
Cuando uno pasa por algunas de estas tribulaciones, se siente como si no
tuviera que esperar a que venga la Gran Tribulación.
He escuchado a algunas personas decir, ‘¿Por qué tendría
que esperar la Gran Tribulación? Yo la tengo ahora.’ A veces eso es cierto, no
es la Gran Tribulación donde tiene que poner su cabeza en la madera para
cortar, pero sí es una tribulación.
“…y pobreza…” Piénsenlo por un momento. Si
algunos de los cristianos que estuvieron en la Iglesia de Smirna resucitaran
ahora y vieran lo que nosotros tenemos…los invitaríamos a nuestros hogares, los
llevaríamos a los supermercados y a los centros comerciales. Les mostraríamos
que tenemos autos, y las demás cosas que tenemos ahora. Nosotros podríamos
pedirles que predicaran en el Sábado; me pregunto cómo sería eso. Me pregunto qué
tipo de mensaje traerían. En este pasaje dice que tenían su pobreza.
Veremos que parte de su pobreza era llevada de cueva
en cueva. ¿Usted seguiría siendo fiel, si fuera llevado de cueva en cueva? Las
cuevas no son muy cálidas, no tienen calefacción ni alfombras.
Después dice esto, “… (Pero son ricos)…” (verso 9).
Dios no mira las cosas de la misma manera que nosotros. ¡Él mira la riqueza
de la fe!
“…y la blasfemia de aquellos que se declaran a
sí mismos ser judíos y no lo son, sino son una sinagoga de
Satanás. No teman ninguna de las cosas que están a punto de sufrir. He aquí, el
diablo está a punto de echar a algunos de ustedes a prisión, para que
puedan ser probados; y tendrán tribulación diez días…” (versos 9-10). Hay un
periodo histórico de diez años, en los que ocurrió eso. ¿Dios los corrige por algún
pecado? ¡No, ningún pecado!
Entonces, la suposición es que si Dios lo está
probando, entonces usted debe ser un pecador. ¡NO! ¡Él dice que ellos
son ricos! Pero aun así, permite que incluso aquellos de la sinagoga de Satanás
y Satanás mismo hagan el trabajo y los pongan en la prisión. Esta es una prueba
para la gloria de Dios; no era algo que ellos merecieran.
Así que, la siguiente vez que algo suceda a manera de
prueba, no voy a decir ‘Dios, yo no merecía esto.’ A mí no me corresponde
decidir lo que merezco o no merezco, ¡es lo que Dios decida! Y a veces son
situaciones bien difíciles. Es por eso que no estoy ansioso de que venga el Día
del Señor. Jesús dijo, ‘Ay de ustedes que quieren el Día del Señor.’ ¡Será un
tiempo terrible!
“…Sean fieles hasta la muerte, y les daré una
corona de vida” (verso 10). Ellos tuvieron una vida difícil, hermanos. Creo que
nosotros somos cristianos muy cómodos, comparados con ellos.
Veamos la razón de las pruebas por las que pasamos. Se
nos garantiza absolutamente que las tendremos. Así que, cuando vengan estas
cosas, mantengámoslas en perspectiva. Lo que sucede muchas veces, es que
igualamos los pensamientos y los sentimientos de Dios a un nivel humano. Por
ejemplo, a veces nos preguntamos:
·
¿Por qué él me hizo eso?
·
¿Por qué ella me hizo eso?
De la manera que quiera ponerlo, nosotros igualamos a
Dios con nuestras emociones y nos desviamos por completo, porque no entendemos.
Yo sé que es lo más difícil de hacer.
Cuando yo estaba pasando por ciertas cosas, y las
recuerdo ahora, ¡eran cosas terribles! Mi corazón y mi mente estaban en
desorden. Pero Dios siempre provee a alguien, para que diga algo justo en el
momento indicado. Algunos de nosotros vemos desde afuera, y siempre viene
alguien que dice ‘No te preocupes, todo va a estar bien.’ Cuando escuchamos
eso—aunque nos gusta escucharlo—no lo apreciamos, porque nadie sabe por lo que
estamos pasando.
Aquí hay una Escritura a la que puede ir para recibir
consuelo, porque ayuda a ponerlo en perspectiva, para que usted entienda desde
el punto de vista de Dios—y esa es la forma en que debemos entenderlo.
I Pedro 1:1: “Pedro, un apóstol de Jesucristo, a los
extranjeros elegidos dispersos en Ponto, Galacia, Capadocia, Asia, y Bitinia…
[Al parecer, Pedro les escribió esto a las personas que Pablo cuidaba, después
de que Pablo murió. Recuerden que al final de II Pedro, él dijo ‘Pablo escribió
ciertas cosas…’]…Quienes han sido escogidos de acuerdo al conocimiento
predeterminado de Dios el Padre, por la santificación a través del
Espíritu, a la obediencia y aspersión de la sangre de
Jesucristo…” (versos 1-2). Eso dice mucho.
Pedro está dirigiendo sus mentes hacia Dios el Padre;
aquellos de nosotros que tenemos el Espíritu Santo somos santificados por Dios,
y nuestros pecados han sido borrados por medio de la sangre de Jesucristo.
“…Gracia y paz sean multiplicadas a ustedes” (verso
2). Cuando usted esté pasando por una prueba, primero ponga su mente en Dios el
Padre. No va a suceder instantáneamente, porque estaremos atravesando una
prueba, pero con el tiempo veremos que Dios nos está probando. ¿Necesitamos ser
probados para saber lo que está en nuestro corazón? ¡Claro que sí! Es
por eso que la oración dice: ‘Líbranos del mal, y no nos guíes en tentación,’
sino que nos saque de la tentación, porque vendrá.
Verso 3: “Bendito sea el Dios y Padre de
nuestro Señor Jesucristo, Quien, de acuerdo a Su abundante misericordia, nos ha
engendrado otra vez hacia una esperanza viva a través de la resurrección
de Jesucristo de los muertos.” Piensen por lo que tuvo que pasar Jesús,
y piensen en lo que dice esta Escritura.
¡Tenemos una esperanza viva! Por lo tanto, no
importa cuales sean las circunstancias a nuestro alrededor, porque tenemos una esperanza
viva. Piense en eso cuando esté en medio de una prueba. Si realmente
creyéramos, no seríamos envidiosos, ni tendríamos duda.
“…nos ha engendrado otra vez…” Teniendo el Espíritu de
Dios el Padre. También piensen en la resurrección de Jesucristo.
Verso 4: “Hacia una herencia incorruptible…” Mantengan
a la vista la sección del periódico donde ponen los reportes astronómicos. Por
medio de la fotografía han descubierto una luz azul que atraviesa el universo y
nunca antes habían podido ver eso.
No sé qué será, pero pienso que podría ser una
visualización de algunos campos de fuerza magnética, que tal vez mantienen al
universo. ¡Es asombroso! ¡Pensar que Dios va a compartir el universo con nosotros!
Ayudará mucho si usted pone su mente en eso, en lugar del problema del momento.
Pedro pone la mente de las personas:
·
Primero en Dios el Padre
·
Después en Jesucristo
·
En Su crucifixión
·
En Su resurrección
·
En el hecho de que tenemos una
esperanza viva
·
En el hecho de que tenemos una
herencia incorruptible, que nadie puede tocar
“…y sin mancha e inmarcesible, reservada en el
cielo para nosotros, quienes estamos siendo guardados por el
poder de Dios a través de la fe, para la salvación que está
lista para ser revelada en los últimos tiempos. En esto ustedes mismos
se alegran grandemente; aunque por el momento, si es necesario, están en
aflicción por un rato por varias pruebas; para que la prueba de su fe…”
(versos 4-7). Esa es por la que más pasamos—la prueba de su fe.
“…la cual es mucho más preciosa que el oro que
perece, aunque está siendo probada por fuego… [Todos la tienen garantizada, no
es nada raro]…pueda ser encontrada hacia alabanza y honor y gloria en la
revelación de Jesucristo; A Quien, no habiendo visto, ustedes aman…” (versos
7-8). Eso requiere mucho, y solamente se puede lograr con fe.
Claro que, hay una bendición especial que viene con
eso. ¿Se acuerdan de lo que Jesús le dijo a Tomás? Nunca olvidaré lo que Juan
escribió acerca de eso. Todos estaban reunidos ahí, y Tomás finalmente está con
ellos—no había estado ahí la semana anterior—y él dijo ‘lo creeré cuando lo
vea.’ Jesús se apareció en el medio y dijo, ‘Tomás, ven aquí.’ Tomás dijo, ‘Oh Señor,
yo creo.’ Y Jesús dijo, ‘¡Benditos aquellos que creen y no han visto!’
Ahí hay una bendición, por creer y por amar a Dios.
“…en Quien, aunque en el tiempo presente no lo
ven, creen, y se alegran con gozo indecible, y llenos con gloria; y
están recibiendo el fin de su fe—la salvación de sus almas; concerniente
a tal salvación los profetas que profetizaron de la gracia que vendría a
ustedes han diligentemente buscado y atentamente preguntado, buscando en que forma
y que manera de tiempo estaba indicando el Espíritu de Cristo el cual estaba
en ellos, testificando de antemano de los sufrimientos de Cristo, y esas
glorias que seguirían; a quienes fue esto revelado, no para sí mismos,
sino que ellos estuvieron ministrando estas cosas para nosotros, las
cuales ahora les han sido anunciadas por aquellos que les han predicado el
evangelio por el Espíritu Santo, enviado desde el cielo—dentro de tales
cosas los ángeles desean mirar” (versos 8-12).
Él ha repasado todo eso y ahora les va a dar el
consejo practico, verso 13: “Por esta razón, estén preparados en sus mentes…”
En otras palabras, enderecen sus pensamientos. Pero usted no puede hacer eso
hasta que tenga sus perspectivas alineadas, y eso es lo que él hizo.
“…sean auto-controlados, y estén esperando
totalmente en la gracia que les será traída en la revelación de
Jesucristo” (verso 13).
¿Recibimos pruebas que merecemos? Desde este punto
de vista, lo que nos corresponde –lo que tenemos en deuda—es la muerte. La
‘paga del pecado es muerte,’ eso es lo que merecemos realmente. A lo que me refería
cuando dije que tendremos pruebas que no merezcamos, fue desde el punto de
vista de que es una prueba que no fue causada necesariamente porque una persona
pecó.
Hay una prueba de fe, y todos la tendremos. Pero como
les pasó a los de la Iglesia en Smirna, ellos no habían hecho algo como para
merecerlo—que Dios se vio forzado a darles una prueba.
Miren a los Laodiceanos, ellos son ricos y tienen
muchos bienes. Dios está obligado a darles eso, pero en cambio no está obligado
a lo mismo con los de Smirna. ¡Él lo va a hacer para Su propia gloria!
Otro ejemplo es la espina en el costado de Pablo, (I
Corintios 12). Yo no sé si él lo merecía, pero él dijo virtualmente que era
usado por Dios como un instrumento, para ‘mantenerme humilde y para que apreciara
la gracia de Dios. Tres veces le pedí a Dios que me la quitara, pero ya que no
me la quitó, ¿Quién soy yo para discutir con Dios?’
¿Pudo Job haber aprendido la lección de auto-justicia
en la situación que estaba, sin tener que pasar por la prueba? ¡Realmente no
lo sé! Pero como pasó por ella, tendríamos que deducir que no había otra
manera de hacerlo. Ahora,
·
¿Nosotros tenemos que pasar por
pruebas?
·
¿No podemos aprender sin pasar por
pruebas?
·
¿Qué tal alguien que puede verse a
sí mismo convirtiéndose en alcohólico y deja de tomar, vs alguien que está en
la misma etapa del alcoholismo, y puede que lo vea o que no lo vea, pero sigue
hasta la etapa final que les sucede a los alcohólicos?
·
¿La segunda persona no podía haber
aprendido de la manera fácil, al dejar de tomar antes? ¡Sí, podía haberlo
hecho!
·
Pero ¿Lo hizo? ¡No, no lo hizo!
Es por eso que hay pruebas, porque hay muchas cosas
que usted no sabe. Aunque Dios sabe todo, hay ciertas cosas que Él no sabe—porque
tenemos elecciones—y no lo sabrá hasta que haya una prueba, donde Él comprobará
cual será nuestra decisión.
Aclaremos un poco: ¿Un alcohólico está pasando por eso
como una prueba, o es una tribulación que Dios tuvo que darle, por causa de su
pecado? ¡Sería por la segunda razón! Dios se vio obligado a hacerlo, por
causa de su pecado, y hay consecuencias naturales de eso.
La prueba solamente viene por estar en una situación,
viendo hacia afuera. En cambio, no es una prueba estando afuera de la situación
y viendo hacia adentro. Eso es su propia estupidez, pero en su propia estupidez
viendo hacia afuera, es una prueba, porque es algo desordenado e incorrecto.
Es cuestión de perspectiva. Pero es cierto, cuando una
persona ve que él o ella se está volviendo un alcohólico y decide dejar de
tomar; esa es una decisión. Por lo tanto, todas estas cosas son casos
individuales, ¿cierto? Cada una de ellas es un caso individual, entonces ¿Qué
deberíamos hacer como cristianos? Como ministro, yo muchas veces he dicho y he
escuchado a otros predicar, que si usted tiene una prueba, usted está pecando
ante Dios. Tal vez sea así, tal vez no, pero ahora me doy cuenta que las
pruebas que tiene cada persona, se tienen que ver como un caso individual.
Una persona podría pasar por una prueba que puede sobrevivir,
pero que a otro lo aplastaría y no sobreviviría. Así que, Dios no le da esa
prueba a esa persona.
Dios siempre nos da esperanza y nos da una salida, I
Corintios 10:13: “Ninguna tentación ha venido sobre ustedes excepto lo
que es común para la humanidad Porque Dios, Quien es fiel, no
les permitirá ser tentados más allá de lo que son capaces de soportar;
sino que con la tentación, Él hará un camino de escape, para que puedan
ser capaces de soportarla.”
Si usted no toma ese camino de escape, podría ser
aplastado. Es cuestión de decisión, y cada una de estas cosas es un caso
individual. No podemos condenarlos a todos y ponerlos en la misma categoría, porque
todas las personas son distintas. Cada prueba debe ser una situación
individual.
Escrituras citadas:
1)
I Corintios 3:1-3
2)
Juan 5:17-18
3)
Mateo 23:1-4
4)
I Corintios 3:3-23
5)
Romanos 8:7
6)
Gálatas 5:19-26, 24
7)
Lucas 14:26-27
8)
Santiago 4:4-5
9)
I Corintios 9:19-21
10)
I Timoteo 6:3-5
11)
Tito 3:3
12)
Proverbios 23:17
13)
Proverbios 28:25
14)
Proverbios 17:1
15)
Proverbios 16:19, 8
16)
Proverbios 15:18
17)
I Corintios 3:12-13
18)
I Pedro 4:12
19)
Apocalipsis 2:8-10
20)
I Pedro 1:1-13
21)
I Corintios 10:13
Escrituras mencionadas, no citadas:
·
I Timoteo 1
·
II Corintios 4
·
Éxodo 20
·
Romanos 10
·
I Corintios 11
·
Salmo 73
·
Apocalipsis 17:1-6
·
II Timoteo
·
I Corintios 12