La morada de Dios I

Día 2—Fiesta de Tabernáculos 2022

Fred R. Coulter—11 de octubre, 2022

www.laVerdaddeDios.org

 

¡Saludos hermanos! ¡Bienvenidos al Día 2 de la Fiesta de Tabernáculos!

 

·             ¿Por qué estamos aquí?

·             ¿Por qué se le llama Fiesta de tabernáculos?

·             ¿Cuál va a ser el propósito de ésta?

·             ¿Cómo va afectar nuestras vidas?

·             ¿Cómo va a afectar al mundo entero?

 

Comencemos en el final y después volveremos al principio, ¡porque va a tener un efecto pleno y emocionante!

 

Efesios 3:14—Pablo escribe: “Por esta causa yo doblo mis rodillas al Padre de nuestro Señor Jesucristo… [Al Padre y al Hijo, ambos]…de Quien la familia entera en el cielo y en la tierra es nombrada.” ¡Ese es el final!

 

Veamos también las promesas que nos han sido dadas por Dios.

 

·             El por qué estamos aquí

·             El por qué estudiamos

·             El por qué oramos

·             La razón por la cual vivimos nuestras vidas de acuerdo con la Palabra de Dios y Sus mandamientos y leyes.

 

Porque la Familia de Dios y la morada de Dios ¡es todo el propósito por el cual estamos aquí!

 

Veamos qué más escribió Pedro, porque él entendió el plan de Dios a detalle.

 

2 Pedro 1:1: “Simón Pedro, un siervo y un apóstol de Jesucristo, a aquellos que han obtenido la misma fe preciosa… ¡Esa fe y esa creencia vienen de Dios y Su Espíritu!

 

“…que la nuestra por la justicia de nuestro Dios y Salvador, Jesucristo” (verso 1) — ¡Cristo en nuestras vidas! Eso es increíble; ¡ya hablaremos de eso más adelante!

 

Verso 2: “Gracia y paz sean multiplicadas a ustedes…” No que solo nos sean dadas a nosotros, sino que sean multiplicadas ¡una y otra vez!

 

“…en el conocimiento de Dios y de Jesús nuestro Señor” (verso 2). ¡Y hoy vamos a aprender más acerca del camino d Dios!

 

Verso 3: “De acuerdo a como Su divino poder nos ha dado todas las cosas que pertenecen a la vida… [Esta vida y la vida eterna]…y a la piedad, a través del conocimiento de Quien nos llamó por Su propia gloria y virtud.” ¡Piensen en eso! ¡Piensen en el llamamiento que Dios nos ha dado a cada uno de nosotros!

 

Verso 4: “A través de la cual Él nos ha dado las más grandes y preciosas promesas… [No puede haber algo más grande en ninguna otra parte en la tierra o en el cielo]…que a través de ellas ustedes pueden convertirse en participes de la naturaleza divina…”

 

¡Convertirnos en un hijo o hija de Dios y vivir con Dios! ¡Imagínense! ¡Eso es lo que representa el plan de Dios!

 

“…habiendo escapado de la corrupción que está en el mundo a través de lujuria” (verso 4) — ¡luego Pedro nos da los pasos para hacerlo!

 

Vamos a ver algunos aspectos generales que nos ayudarán a entender lo que Dios está haciendo.

 

Tito 1—Es muy interesante que Dios no le reveló esto a Pablo sino hasta final. Hasta el último momento que estuvo en prisión, justo antes de morir. Esta es la piedra angular que él entendió, y que quiere que nosotros entendamos también. No estamos tratando solo con una religión:

 

·             Para que puedan ser mejores personas en el mundo

·             Para hacernos más aceptables

·             Para hacernos más deleitables

 

Esperamos ser mejores de esa forma, aunque de eso no se trate el plan. ¡Dios tiene algo más grande que eso!

 

Tito 1:1: “Pablo, un siervo de Dios y un apóstol de Jesucristo, de acuerdo a la fe del elegido de Dios…”

 

·             La fe que él nos da

·             La creencia

·             La fuerza

·             La intervención

·             El conocimiento

 

“…y al conocimiento de la Verdad…” (Verso 1).

 

Eso es lo que necesitamos, hermanos, y ¡eso es lo que falta en el mundo! Ellos tienen el conocimiento del bien y del mal, pero ¡no pueden discernir el bien del mal en la actualidad! Son tan malvados y están tan cautivos en este mundo que Satanás gobierna profundamente.

 

“…que está de acuerdo a la santidad; En la esperanza de vida eterna…” (Versos 1-2)— ¡De vivir para siempre!

 

Eso es lo que todas las religiones pretenden dar, un sustituto de lo que Dios ya ha prometido: ¡La vida eterna!

 

“…la cual Dios, Quien no puede mentir, prometió antes de las eras del tiempo” (verso 2).

 

Así que, está hablando de hace muchísimo tiempo. Veamos algo que tiene que ver con eso y que encaja con la Fiesta de Tabernáculos, porque es sumamente importante. Es tan importante, que Pablo también lo escribió en 2-Timoteo. Pablo escribió 2-Timoteo y Tito al mismo tiempo. Esa fue la última vez que Pablo le escribió a Timoteo, porque él sabía que iba a morir.

 

Hay algunas ideas aquí que ya hemos cubierto en el pasado, pero repasémoslas de nuevo porque estas añaden a nuestro entendimiento de La Fiesta de Tabernáculos y el plan de Dios.

 

2-Timoteo 1:6: “Por esta razón, te aconsejo que avives el don de Dios que está en ti por la imposición de mis manos.” ¡Ese es el recibimiento del Espíritu Santo!

 

Y en esta era, en este tiempo, necesitamos hacer eso también; “…avivar el don de Dios que está usted…” ¿Cómo lo logramos?

 

·             Por medio de la oración

·             Por medio del estudio

·             Por medio de entender la Palabra de Dios

·             Por medio de observar al mundo y ver el gran abismo que se está abriendo entre el mundo y el pueblo de Dios

 

Verso 7: “Porque Dios no nos ha dado un espíritu de temor, sino de poder, y de amor, y de mentalidad sana. Por tanto… [Basado en esto]…no deberías estar avergonzado del testimonio de nuestro Señor, ni de mí Su prisionero; sino colectivamente sufre conmigo por amor al evangelio, de acuerdo al poder de Dios” (versos 7-8).

 

Las cosas estaban yendo tan mal para la iglesia en aquel tiempo, que parecía que iba a ser exterminada y removida de la faz de la tierra. ¡Pero no fue así porque esta es la obra de Dios!

 

Verso 9: “Quien nos ha salvado y llamado con un llamamiento santo—no de acuerdo a nuestras obras, sino de acuerdo a Su propio propósito y gracia…”

 

Eso es tremendo cuando lo entendemos y lo conectamos, y quiero que entendamos algo acerca de la gracia.

 

Paréntesis: ¡La gracia no es una ‘salida de escape’ para que pueda continuar viviendo en pecado mientras profesa su fe y su creencia en Cristo! ¡La gracia es el fundamento del conocimiento y de la relación que tenemos con Dios el Padre y Jesucristo! ¡De que tenemos conexión directa espiritual con ellos, con el Espíritu de Dios a través de la oración, del estudio, y de rendirnos a Dios! Y a eso súmele el poder de la fe, de la meditación y del ayuno para acercarnos a Dios.

 

“…la cual nos fue dada en Cristo Jesús antes de las eras del tiempo” (verso 9).

 

¡Es asombroso! Cuando usted ve todo lo que hay y se da cuenta de que todo está planeado y diseñado, ¡aprendemos que Dios tiene un plan más grande! Veamos en que consiste ese plan y ¡entendamos lo que Dios está haciendo! Vamos a ver algunas otras cosas que completan los espacios que no están completos en Génesis pero que se encuentran en otros lugares.

 

Génesis 1:1: “En el principio Dios… [Dios y Cristo eran desde antes de las eras del tiempo]...creó los cielos… [Alto total]…y la tierra”

 

Hemos visto nuevas fotos fantásticas de los cielos a una distancia de 13 billones de años luz a través del telescopio James Webb. Y entre la creación de los cielos y la tierra tuvo lugar la creación de los ángeles.

 

El libro de Job es muy interesante, y sumamente difícil de entender para algunas personas porque Job era muy recto y bueno. Pero aquí está un resumen del problema de Job:

 

Job 35:1 “Y Eliú respondió y dijo”—le está hablando a Job,  porque Job era tan justo, que quería poner un juez que juzgara entre él y Dios. Eliú vio el pecado de Job; Los otros tres amigos de Job no lo vieron. Así que, Eliú le hizo esta pregunta:

 

Verso 2: “¿Crees que esto es recto, tú que dices, ‘Mi justicia es más que la de Dios’?” ¡Eso es imposible!

 

Y ¡quiero que lean los capítulos 35-37 de Job! Porque Job decía ¡‘Oh, que Dios bajara y hablara conmigo!’ Y Dios le respondió su petición y vino y habló con él. Y aquí está donde encontramos que entre la creación de los cielos y la tierra, ocurrió la creación de los ángeles. Es el único lugar en la Biblia que realmente nos muestra esto claramente.

 

Job 38:1: “Entonces el SEÑOR le respondió a Job desde torbellino, y dijo, ‘¿Quién es este que oscurece el consejo con palabras sin conocimiento? Ahora ciñe tus lomos como un hombre; porque Yo te exigiré, y tú Me responderás.’” (Versos 1-3).

 

¡Esa fue toda una conversación! Para que Job pudiera ver—y lean todo Job 38-39, porque eso les dará una imagen más completa de lo que vemos aquí—Dios le preguntó a Job esto:

 

Verso 4: “¿Dónde estabas tú cuando Yo coloqué el fundamento de la tierra?... [Si eres tan justo Job]… ¡Decláralo, si tienes entendimiento! ¿Quién ha determinado sus medidas, si lo sabes?... [¿Cuál es la medida de la tierra? ¡Es bastante grande! Y ¿El Universo? ¡Es increíble!] …O ¿Quién ha extendido la línea sobre ella? O ¿A que están sujetos los fundamentos? O ¿Quién colocó su piedra angular? (versos 4-6).

 

El verso 7 habla sobre los ángeles. ¡Aquí está Dios poniendo el fundamento de la tierra!, y: “¿Cuando las estrellas de la mañana cantaban juntas y todos los hijos de Dios gritaban de alegría?”

 

¿Por qué? ¡Porque Dios originalmente dio la tierra a los ángeles! ¡Por eso! Y veremos que esto nos ayudará a responder la pregunta de algunos versos difíciles en Génesis 1.

 

Entonces, ¿Qué sucedió? Para poder entender lo que sucedió, tenemos que volver hasta Apocalipsis 12. Es una cosa increíble que nos muestra por qué debemos de conectar las escrituras y entender lo que nos están diciendo; el significado que tienen.

 

Apocalipsis 12 vuelve hasta un tiempo anterior a los ángeles—de los cuales algunos de ellos se rebelaron con Satanás. ¿Cuánto tiempo estuvieron en la tierra antes de rebelarse? Algunas de esas preguntas las respondimos en el Día de expiación antes de la Fiesta de Tabernáculos.

 

Apocalipsis 12:1: “Luego allí apareció una gran maravilla en el cielo: una mujer vestida con el sol, y teniendo la luna bajo sus pies, y sobre su cabeza una corona de doce estrellas.” ¡Este es el plan de Dios representado por una mujer!

 

Verso 2: “Y estando embarazada, gritaba en dolor de parto, y estaba en dolor para dar a luz.” ¡Esa es una proyección futura del nacimiento de Jesucristo!

 

Verso 3: “Y otra señal fue vista en el cielo: y he aquí, un gran dragón rojo, teniendo siete cabezas y diez cuernos, y siete coronas sobre sus cabezas; Y su cola barrió un tercio de las estrellas del cielo… [Una tercera parte de los ángeles]…y las echó a la tierra… (Versos 3-4).

 

Conectemos esto con lo que vimos en Job: Cuando Dios creó la tierra y puso el fundamento, ¡todos se regocijaron! Pero cuando Dios reveló Su plan de que todos los ángeles estarían debajo de Sus hijos e hijas venideros—por medio de la creación del hombre y la mujer— ¡Satanás se rebeló y se llevó a una tercera parte de los ángeles con él!

 

Después el pasaje continúa con el nacimiento de Cristo. Conectemos esas dos cosas y volvamos a Génesis 1, done vemos que Dios renueva la superficie de la tierra para la vida humana.

 

Génesis 1:1: “En el principio Dios creó los cielos… [Y luego, como vimos en las otras escrituras, a los ángeles]… y la tierra”— ¡y todos ellos estaban contentos y regocijándose!

 

Pero cuando ellos se rebelaron y dejaron su morada y la creación de Dios que Él les había dado… Lucifer fue el que quiso ser ¡como El Altísimo! Él fue echado abajo y una tercera parte de los ángeles se fueron con él a la tierra. Y ¿Qué pasó con la tierra cuando los echaron? Aquí en seguida se nos dice:

 

Verso 2: “Y la tierra estaba… [O se volvió, significando que fue creada antes de que se volviera así]: …sin forma y vacía…” Hebreo: ‘tohu’& ‘bohu’ – ¡Caos y confusión! ¡Dios nunca creo nada en caos y confusión!

 

“…y la oscuridad estaba sobre la faz del fondo…” (Verso 2). Así que, ¡Hubo un primer diluvio! Incluso la ciencia hoy puede comprobar que hubo dos diluvios. Este y el de Noé.

 

“…y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas” (verso 2).

 

Esto fue cuando Dios comenzó a renovar la tierra para la humanidad, y todas las demás cosas que la conforman ¡para hacerla una morada completa para el hombre!

 

Verso 3: “Y Dios dijo, ‘Haya luz.’ Y hubo luz”—y oscuridad, y los llamó día y noche (verso 5). Después menciona el resto de las cosas que Dios hizo.

 

Él hizo las aguas, hizo que apareciera la tierra seca, las hierbas, el pasto y demás. Luego puso al sol y a la luna en sus posiciones ¡para las temporadas y tiempos señalados! (versos 14 – 16).

 

Luego encontramos en el verso 20: “Y Dios dijo, ‘Las aguas abunden con multitudes de criaturas vivas…”

 

Todas las criaturas que Dios hizo y que están en las aguas y los océanos. ¡Son absolutamente sorprendentes! Hay vida en las partes más profundas del océano de las cuales los hombres no sabían nada al respecto, hasta que tuvimos el equipo moderno que tenemos hoy en día y que puede alcanzar hasta siete millas de profundidad en el abismo del océano. ¡Ahí hay vida!

 

“…y aves vuelen sobre la tierra en la faz del firmamento del cielo.” (Verso 20). ¡Esa es una afirmación interesante!

 

Aunque las aves y los peces son criaturas diferentes, ambos viven sus vidas guiados por el sol. Por eso Dios puso al sol y la luna en sus lugares antes de crear a los peces, a las aves y a algunos otros animales que tenían que vivir guiados por el sol. Así que todos fueron creados por Dios en orden perfecto.

 

Verso 21: “Y Dios creó los grandes animales marinos, y toda criatura viva que se mueve con las cuales las aguas fueron colmadas según su especie, y toda ave alada según su especie. Y Dios vio que era bueno. Y Dios los bendijo, diciendo, ‘Sean fructíferos y multiplíquense, y llenen las aguas de los mares, y las aves multiplíquense en la tierra.’” (Versos 21-22).

 

¿No es asombroso? A veces hay muchas aves que se juntan en un mismo lugar, ¡y eso para mí es asombroso! Dios creo a todas estas criaturas con el propósito de cuidar la tierra:

 

·             Para deshacerse de los insectos

·             Para limpiar el agua

·             Para proveer

 

Ese fue el quinto día (verso 23).

 

Verso 24: “Y Dios dijo, ‘Que la tierra produzca criaturas vivientes según su especie—ganado, cosas rastreras, y bestias de la tierra—cada una según su especie.’ Y así fue. Y Dios hizo las bestias de la tierra según su especie, y el ganado según su especie, y toda cosa rastrera sobre la tierra según su especie. Y Dios vio que era Bueno” (versos 24-25).

 

Aquí viene la creación del hombre—es decir, de la humanidad—del hombre y de la mujer. Nada en la creación de Dios ha tenido la imagen y la semejanza de Dios como la ha tenido el hombre.

 

Verso 26: “Y Dios dijo, ‘Hagamos…”

 

Sabemos que esto se refiere a Dios el Padre y Jesucristo en el Nuevo Testamento y al Altísimo y a Jehová en el Antiguo Testamento. No se está refiriendo a ángeles porque los ángeles no tienen poder creador. 

 

“…al hombre a Nuestra imagen, según Nuestra semejanza; y tengan dominio sobre los peces del mar y sobre las aves del cielo y sobre el ganado y sobre toda la tierra y sobre toda cosa rastrera que se arrastra sobre la tierra” (Verso 26).

 

Que afirmación tan profunda. ¡Es increíble! Por eso el ser humano tiene las habilidades que tiene. ¡Todo se reproduciría según su especie! Leamos esto nuevamente:

 

Verso 26: “…‘Hagamos al hombre a Nuestra imagen, según Nuestra semejanza…’”

 

La frase inconmensurable que nos muestra el resto de la Biblia es esta: ¡Según nuestra semejanza! ¡Eso es lo que Dios planeó desde antes de la eras de la eternidad!

 

Verso 27: “Y Dios creó al hombre a Su propia imagen, a la imagen de Dios Él lo creó. Él los creó varón y mujer.”

 

Y ¡Siempre han sido varón y mujer! Todos los animales son macho y hembra, y todas las aves son macho y hembra. ¡El camino de Satanás es destruirlo! ¡El mundo de Satanás es lo que vivimos en la actualidad! ¡Hay personas tratando de decir que los hombres pueden dar a luz! Incluso están trabajando en hallar formas científicas para lograrlo. ¡Pero nunca podrán lograrlo sin usar lo que Dios creo primero en la mujer! ¡Nunca serán capaces de replicar la creación de Dios!

 

En su rebelión quieren destruir la creación que Dios hizo como varón y hembra, y mezclar los géneros para tener transgéneros y todas las mentiras y engaños que van con eso. Todos ellos van a sufrir la penalidad de Dios por desafiarlo, por tratar de reemplazarlo a Él ¡con su propio camino!

 

Eso es inspirado por Satanás; porque eso es lo que quiso hacer cuando se rebeló contra Dios. No le gustó la idea de ver a Dios crear seres humanos. ¡No, no, no! Porque él se rebeló contra Dios, y Dios hizo al hombre a su imagen y conforme a su semejanza—dándole dominio sobre toda la tierra para que Él (Dios) pudiera estar con el hombre y pudieran morar juntos.

 

Vamos a ver que Adán y Eva estaban en el lugar donde Dios moraba llamado ¡El Jardín del Edén!

 

Así que, después de que Dios los hiciera varón y mujer, dice el verso 28: “Y Dios los bendijo. Y Dios les dijo, ‘Sean fructíferos y multiplíquense, y llenen la tierra, y domínenla; y tengan dominio sobre los peces del mar y sobre las aves del cielo y sobre cada cosa viva que se mueve sobre la tierra.’”— ¡Y así es! ¡Es exactamente como ha sido!

 

Verso 31: “Y Dios vio todo lo que Él había hecho, y ciertamente, era extremadamente bueno. Y la noche y la mañana fueron el sexto día.”

 

Dice que Él los hizo varón y mujer, y eso tuvo que haber sucedido en el sexto día, porque después Dios hizo el día más importante de la tierra para toda la humanidad: ¡El Sábado!

 

Génesis 2:1: “Así los cielos y la tierra fueron terminados, y todo el ejercito de ellos. Y para el comienzo del séptimo día…” (Versos 1-2).

 

Eso es lo que significa; no significa en el séptimo día, porque Dios habría trabajado en el sábado.

 

Verso 2: Y para el comienzo del séptimo día Dios terminó Su trabajo el cual había hecho.” ¡Eso significa que Él también hizo a Eva en el sexto día!

 

Verso 3: “Y descansó en el séptimo día de todo Su trabajo el cual había hecho. Y Dios bendijo el séptimo día y lo santificó… [Lo hizo Santo]… porque en el Él descansó de todo Su trabajo el cual Dios había creado y hecho.”

 

Verso 7—aquí vuelve al sexto día, y el resto de Génesis 2 cubre el sexto día: “Entonces el SEÑOR Dios formó al hombre del polvo de la tierra, y respiró en sus fosas nasales el aliento de vida; y el hombre se convirtió en un ser viviente.”

 

Al respirar el aliento de vida Él inhaló el espíritu del hombre como lo conocemos en 1-Cor. 2, porque hay un espíritu del hombre que le da:

 

·             Conciencia

·             Vida

·             El poder del pensamiento

Y con su mente

·             El poder de decisión—la decisión del libre albedrío

 

Pero recuerden que con eso—y todos lo tenemos; no hay una sola persona que no lo tenga—para poder discernir el bien del mal, ¡tenemos que conocer la Palabra de Dios! ¡Ese conocimiento tiene que venir de Dios! ¡De ningún otro lugar!

 

·       Génesis 1:27 nos dice que Dios los hizo

·       Génesis 2:7 que también incluye a Eva un poco más adelante—nos dice cómo Él hizo al hombre

 

Verso 8: “Y el SEÑOR Dios plantó un jardín hacia el oriente en Edén; y allí puso al hombre a quien Él había formado. Y de la tierra el SEÑOR Dios hizo crecer todo árbol que es agradable a la vista y bueno para comida. El árbol de vida también estaba en la mitad del jardín, y el árbol del conocimiento de bien y mal” (versos 8-9). ¡Luego viene el resto de la creación de Dios!

 

Verso 15: “Y el SEÑOR Dios tomó al hombre y lo puso en el jardín del Edén para cultivarlo y mantenerlo. Y el SEÑOR Dios le ordenó al hombre, diciendo, ‘Puedes comer libremente de todo árbol en el jardín, Pero no comerás del árbol del conocimiento del bien y el mal, porque en el día que comas de el, al morir ciertamente morirás.’” (Versos 15-17).

 

Así que, ¡A Adán se le advirtió desde el principio! Y claro que Adán no tenía conciencia de lo que era la muerte.

 

Verso 18: “Y el SEÑOR Dios dijo, ‘No es bueno que el hombre esté solo. Haré un ayudante compatible para él.’ Y de la tierra el SEÑOR Dios había formado todo animal del campo y toda ave del aire—y los trajo a Adán para ver como los llamaría. Y lo que Adán llamó a cada criatura viva, ese llegó a ser su nombre” (versos 18-19).

 

Al parecer Dios hizo a Adán temprano en la mañana, lo puso en el jardín, y le trajo a todos los animales para que los nombrara. Y ahí venían, todos los animales—macho y hembra—las aves y las cosas que se arrastran, también macho y hembra.

 

Ahora, ¿Qué faltaba? Porque aquí tenemos a Adán, un varón, ¡pero no había mujer! Así que, esto es lo que Dios hizo después de que Adán nombró a todas las criaturas vivientes:

 

Verso 20: “Y Adán le dio nombres a todo el ganado, y a todas las aves del aire, y a todo animal del campo, pero no fue encontrado allí un ayudante compatible para Adán. Y el SEÑOR Dios hizo caer un profundo sueño sobre Adán… [En algún momento durante el sexto día]…y él durmió. Y Él tomó una de sus costillas, y después cerró la carne por debajo” (verso 20-21).

 

Verso 22: “Luego el SEÑOR Dios hizo de la costilla (la cual había sacado del hombre) una mujer, y la trajo al hombre. Y Adán dijo… [Él sabía lo que estaba pasando; él sabía lo que Dios iba a hacer]…‘Esta es ahora hueso de mis huesos y carne de mi carne. Será llamada Varona porque fue sacada del Varón.’ Por esta razón un hombre dejará a su padre y a su madre, y se unirá a su esposa—y llegarán a ser una carne. Y ambos estaban desnudos, el hombre y su esposa, y no estaban avergonzados” (versos 22 – 25).

 

Ya continuaremos el resto de la historia, y ¡con el lugar de morada para Dios!

 

(pase a la siguiente pista)

 

Antes de adentrarnos en Génesis 3, hay algunas cosas que sabemos que no sabemos. Sabemos que Dios vivía en el Jardín del Edén. Adán y Eva vivían en el Jardín del edén. Obviamente, Dios tenía Su lugar y Adán y Eva el de ellos. ¿Cuánto tiempo vivieron ellos así antes de Génesis 3? No lo sabemos.

 

Pero sí sabemos que Dios nunca somete a nadie a una prueba como la que ellos tuvieron, sin antes darles el conocimiento de la Verdad. Esto no significa que ellos recibieron el conocimiento completo del Plan de Dios; porque no es así. Pero lo que sí podemos decir, es que conocían la Ley de Dios. Lo que fuera que Dios les ordenara que hicieran era la Ley. Así que, eso fue antes de que a la serpiente—Satanás el diablo—se le dejara entrar en el Jardín del Edén para probar a Adán y Eva.

 

Ahora, ya que Dios da libre albedrío, necesitamos tener circunstancias en las cuales se pueda sustentar y probar que decidiremos hacer lo que es correcto. ¡Hay bien y hay mal! Está lo que es correcto y lo que es incorrecto.

 

Podemos ver—por la generación en la cual vivimos hoy—las consecuencias que genera el no enseñar a toda una generación la diferencia entre lo correcto y lo incorrecto, y entre el bien y el mal. Se les enseña a amarse a sí mismos y cada individuo se vuelve un ente para sí mismo. En otras palabras, se convierte en su propio ‘Dios’ en su mente, porque él/ella decide lo que está bien y lo que está mal; lo que es bueno y lo que es malo.

 

Y vamos a ver que eso es exactamente lo que pasó con Adán y Eva. ¡Dios no permitió que la serpiente entrara hasta que ellos tuvieran pleno conocimiento!

 

El punto es que no importa cuánto tiempo lo supieron, sino ¡lo que decidieron! Es como nosotros con nuestros hijos cuando crecen. Les decimos ‘no hagas eso’, y si nos escuchan y obedecen, entonces todo está bien. Pero si lo hacen, entonces se meten en problemas, y ¿Qué pasa? ¡Todo se vuelve una pelea! Y tiene que venir la disciplina por la infracción cometida.

 

Eso es algo muy común, porque como Dios es Quien estableció lo correcto y lo incorrecto, y el bien y el mal - Dios es Quien decide lo que está bien y lo que está mal; lo que es bueno y malo.

 

Por lo tanto, ¡Dios hizo Su Ley de lo que es bueno! Lo que es malo es ¡no obedecer Su Ley! Las tres palabras que necesitamos recordar a lo largo de este episodio son: ¡Obedezcan Mi Voz! Mientras vemos esto en el sondeo que vamos a hacer sobre: ¡La morada de Dios!

 

Dios se apareció a Adán y Eva en una forma muy parecida a un ser humano. Luego encontramos que cuando Dios habló con Moisés y Moisés le suplicó poder ver Su gloria, Dios dijo, ‘Ningún hombre puede ver Mi rostro y vivir’ Que quiere decir que ¡nadie puede ver a Dios en Su gloria y vivir!

 

SI Dios se rebaja Él mismo para aparecer como un ser humano, ENTONCES usted puede hablar con Dios y Él puede hablar con usted; eso es lo que vemos con Adán y Eva.

 

Génesis 3:1: “Ahora, la serpiente era más astuta que cualquier criatura del campo la cual el SEÑOR Dios había hecho. Y él dijo a la mujer, ‘¿Es verdad…?”

 

¿Por qué Satanás fue con la mujer? ¡No lo sabemos! Ella estaba ahí, y vamos a ver que Adán pudo haber parado en seco todo eso, ¡pero no lo hizo!

 

“…‘¿Es verdad que Dios ha dicho… [Ahora retando a Dios]…‘No comerán de ningún árbol del jardín?’” (Verso 1)— ¡Haciendo una afirmación falsa!

 

Si usted puede discernir el bien del mal, y oye algo que es falso, ¿Qué hace? ¡Lo corrige! ¡Como Eva lo hizo!

 

Verso 2: “Y la mujer dijo a la serpiente, ‘Podemos comer libremente del fruto de los árboles del jardín, pero del fruto del árbol el cual está en medio del jardín, Dios ciertamente ha dicho, “No comerán de él, ni lo tocarán, no sea que mueran.”’” (Versos 2-3).

 

La frase aquí, “…ni lo tocarán…” ¡probablemente fue una instrucción adicional de Dios! Algunos han dicho que Eva le agregó eso. No tenemos ninguna base para decir que eso es cierto. ¡Dios se los dijo!

 

El mal siempre tiene una repuesta para todo. Así que si no estamos bien fundamentados, podría atraparnos fácilmente – como sucedió con Eva.

 

Verso 4: “Y la serpiente dijo a la mujer, ‘¡Al morir, ciertamente no morirán! Porque Dios sabe…’”

 

Satanás estaba acusando a Dios, diciéndoles que Él les estaba escondiendo algo que ellos debían saber. Esto nos dice que cuando alguien trae una acusación contra la Palabra de Dios, debe tener cuidado porque puede meterse en problemas.

 

“…Porque Dios sabe que en el día que coman de él, entonces sus ojos serán abiertos… [Todos quieren conocimiento nuevo; todos quieren descubrir lo secreto]…y serán como Dios…” (Versos 4-5).

 

Dios se les apareció más como un ser humano. Así que no se refería a que serían como Dios en gloria, en poder y aspectos como ese. Dijo, ustedes serán como Dios:

 

“…decidiendo el bien y el mal”  (verso 5). En otras palabras, en lugar de seguir los mandamientos de Dios y las reglas de Dios, ¡usted hace sus propias reglas! ¡Usted decide lo que está bien y lo que está mal!

 

Miren lo que ha pasado con el mundo desde ese tiempo, por esto que vemos aquí, ¡Y nada ha cambiado!

 

Eva tenía curiosidad; verso 6: “Y cuando la mujer vio que el árbol era bueno para comida, y que era placentero a los ojos, y un árbol para ser deseado para hacerlo a uno sabio, tomó de su fruto y comió…. [Nada le sucedió a ella]…También le dio a su esposo con ella, y él comió.” ¡Ahí estaba él con ella!

 

Esto nos muestra que cuando la cabeza de la familia ve algo mal, no debería conformarse o acoplarse a eso – lo cual se ha visto a lo largo de la historia, hasta nuestros días.

 

Verso 7: “Y los ojos de ambos fueron abiertos… [Para ver el mal, y cerrados para ver el bien]…y supieron que estaban desnudos…”

 

Y ¡no conocemos todos los detalles de lo que ocasionó que esto fuera así! La única forma en que podamos tener algo de entendimiento al respecto, es viendo a esta generación que cree que lo que esté relacionado con el sexo ¡se vale! Pero, ¡eso no es cierto! No es cierto hoy, y no lo era ayer. Así que no sabemos exactamente qué pasó, ¡pero sí sabemos que Satanás siempre, siempre pervierte el sexo! Lo que hace hoy es probablemente lo que hizo entonces.

 

“…y cocieron hojas de higos e hicieron cubiertas para sí mismos” (verso 7).

 

Cuando una persona hace algo mal, siempre trata de cubrirse a sí misma; en este caso hicieron esto para cubrir su desnudez, pero:

 

·             ¿Quitó eso lo que ellos hicieron? ¡No!

·             ¿Cambió eso las circunstancias en las que se encontraban? ¡No!

 

Sino que comer del fruto cambió las circunstancias, y ¡Dios lo sabía!

 

Verso 8: “Y oyeron el sonido del SEÑOR Dios caminando en el jardín en el fresco del día...”

 

Eso significa que Dios venía de donde estaba Su morada en el Jardín hacia donde estaban ellos. Él sabía lo que habían hecho. Obviamente ¡Él lo sabía!

 

“…Entonces Adán y su esposa se escondieron de la presencia del SEÑOR Dios entre los árboles del jardín.” (Verso 8).

 

Sabemos que no hay nada que se le pueda esconder a Dios; ¡Nada! Todo secreto va a saberse, va a ser gritado desde la azotea, expuesto para mostrar la ignominia de su pecado. Así que, ¡Dios lo sabía!

 

Verso 9: “Y el SEÑOR Dios llamó a Adán y le dijo, ‘¿Dónde estás?’” ¡Porque se estaban escondiendo!

 

¡Nadie puede esconderse de Dios! ¡Uno nunca, nunca puede esconderse de Dios! Todo lo que hacemos está registrado en el espíritu del hombre que tenemos, así que ¡Dios de todas formas lo sabe!

 

Verso 10: “Y él [Adán] dijo, ‘Te oí caminando en el jardín, y tuve miedo porque estoy desnudo, y entonces me escondí.’”

 

Verso 11: “Y Él [Dios] dijo, ‘¿Quién te dijo que estabas desnudo?... [Y usted podría agregarle ahí, y temeroso]... ¿Has comido del árbol el cual te ordené que no deberías comer?’” ¡Dios quería saber si Adán le diría la verdad!

 

·       ¿Qué sucede cuando lo atrapan haciendo algo, y no admite que usted lo hizo?

·       O ¿Qué usted fue el responsable?

·       ¿Qué hace la naturaleza humana? ¿Cómo influye Satanás en las personas? ¡Hace que culpen a alguien más!

 

Pero la verdad es, que cada uno de nosotros desde Adán y Eva a través del tiempo, ¡somos responsables de nuestras propias elecciones y decisiones!

 

Adán no dijo que él comió porque fue débil. ¡No dijo eso! Él no respondió la pregunta que Dios le hizo: “... ¿Has comido del árbol el cual te ordené que no deberías comer?”

 

Verso 12: “Y el hombre dijo, ‘La mujer que diste para estar conmigo, ella me dio del árbol, y comí’”

 

La pregunta para Adán es: ¿Por qué no te rehusaste? ¡Él pudo haberlo hecho! ¡Pero no lo hizo!

 

Verso 13: “Y el SEÑOR Dios dijo a la mujer, ‘¿Qué es esto que has hecho?’... [Ella tampoco no estuvo dispuesta a admitir lo que hizo]... Y la mujer dijo, ‘La serpiente me engañó, y comí.’”

 

Y eso era verdad, ella fue engañada. Así que, ¡aquí viene el juicio de Dios! Porque todo pecado requiere un juicio, y una penalidad. Este caso en particular era tan profundamente importante, que afectó a toda la humanidad a través de la historia hasta este día - e incluso hacia el futuro.

 

¡Piénsenlo! Por eso es importante que entendamos cómo la Iglesia fue derribada desde adentro. ¡Los hombres hicieron cosas que no estaban bien! ¡Dios tuvo que traer una penalidad y castigo sobre ellos! Así como a Adán y a Eva se les echó del Jardín del Edén, ¡Dios ha echado a la iglesia—muchas veces a lo largo de la historia—por causa del pecado que vino de Satanás el diablo! ¡Por eso es que esto es tan importante!

 

¡Dios trae su Juicio comenzando por la serpiente! Su juicio—como veremos hacia el final de la Fiesta de Tabernáculos y del Último Gran Día—y el castigo final de Satanás ¡se darán a conocer! ¡Lo que vemos aquí es el comienzo de eso!

 

Verso 14: “Y el SEÑOR Dios dijo a la serpiente, ‘Porque has hecho esto eres maldita sobre todo el ganado, y sobre todo animal del campo. Irás sobre tu barriga, y comerás polvo todos los días de tu vida. Y pondré enemistad entre la mujer y tú, y entre su Semilla y tú semilla...’” (Versos 14-15).

 

Y de ahí la aversión de las serpientes de parte de los seres humanos. Aquellos quienes aman a Satanás, también aman y abrazan a las serpientes. ¡Es interesante!

 

Cuando dice: “...entre su Semilla y tú semilla...” se refiere a una profecía acerca de Jesucristo. Es algo que se proyectó 4,000 años hacia el futuro. Por eso es que estos primeros capítulos de la Biblia son importantes. Porque, ¿Quién fue quién mató a Cristo en realidad? ¿Acaso no fue Satanás? ¡Así es! Y cuando lo hizo, ¡Creyó que había ganado! Pero Cristo fue resucitado de los muertos, porque el plan de Dios continua, ¡y va a funcionar de la mejor manera para todos!

 

“...Él magullará tú cabeza, y tú magullarás Su talón” (verso 15). ¡Esa es una señal de la crucifixión!

 

Verso 16: “A la mujer Él dijo, ‘Incrementaré grandemente tus dolores y tu concepción...’”

 

Por eso es que las madres deben estar siempre alertas, ser fuertes, amorosas, y enseñar a sus hijos desde la infancia ¡Lo que es correcto! Si no lo hacen, van a tener suficiente angustia y dolor al momento de dar a luz, y también suficiente angustia y dificultades mientras sus hijos crecen. Porque si a los hijos no se les corrige y se les enseña, el resultado es angustia y miseria como la tiene esta generación actual.

 

“...en dolor darás a luz hijos. Tu deseo será hacia tu esposo, y él gobernará sobre ti” (verso 16). ¡El esposo es la cabeza de la esposa! Esa es la forma en que Dios lo diseño.

 

Verso 17: “Y a Adán Él dijo, ‘Porque has oído a la voz de tu esposa... [En lugar de obedecer Mi voz para obedecerla]... y has comido del árbol—del cual te ordené, diciendo, “¡No comerás de él!”—la tierra es maldita por tu causa. En dolor… [Y así como la mujer tendría dolor, el hombre tendría dolor también]...comerás de ella todos los días de tu vida.’”

 

Verso 18: “También te dará a luz espinas y cardos, y así comerás las hierbas del campo; En el sudor de tu rostro comerás pan hasta que vuelvas a la tierra, porque de ella fuiste tomado; porque polvo eres, y a polvo volverás” (versos 18-19).

 

Y no se nos dice exactamente cuánto vivó Eva, pero sí sabemos cuánto vivió Adán.

 

Génesis 5:1: “Este es el libro de las generaciones de Adán. En el día que Dios creó al hombre, Él lo hizo en la semejanza de Dios. Él los creó hombre y mujer y los bendijo, y Él llamó sus nombres Adán... [Sr. y Sra. Adán]... en el día cuando fueron creados” (versos 1-2).

 

Aquí no se habla acerca de sus pecados, porque están registrados en Génesis 3.

 

Verso 3: “Y Adán vivió ciento treinta años y engendró un hijo a su propia semejanza, tras su propia imagen, y llamó su nombre Set.”

 

La muerte de Abel ocurrió cuando ellos tenían 135 años. Eso es mucho tiempo. Piensen en todas las cosas que pudieron haber sucedido en esos 135 años. No se nos dan los detalles—aunque lo más importante de todo lo encontramos en Génesis 4—pero primero ¡terminemos Génesis 3!

 

Génesis 3:20: “Y Adán llamó el nombre de su esposa Eva porque ella fue la madre de todos los vivientes.” ¡De todos los hijos!

 

Y ¿cuántos hijos tuvieron? Lo más que sabemos al respecto, es que Josefo registró en la historia del pueblo de Israel que tuvieron 56 hijos.

 

En aquel tiempo, ya que todos los genes variaban, lo que seguramente Dios permitió fue que nacieran niños y niñas de todas las razas—y una vez que crecían, se casaban. Así es como probablemente Él estableció todas las razas de personas y el por qué Adán y Eva probablemente sí tuvieron esos 56 hijos. Y aunque esto es solo una suposición o conjetura que no podemos comprobar, creo que tuvo que haber sido algo como eso.

 

Verso 21: “Y para Adán y su esposa el SEÑOR Dios hizo abrigos de pieles y los vistió.”

 

Esos probablemente fueron hechos de cabras, quizá de alguna ofrenda por el pecado que habían cometido.

 

Ellos fueron cortados de Dios hasta cierto punto de ese momento en adelante. Porque antes de eso, ellos vivían en el Jardín del Edén y tenían acceso a Dios todos los días. Después de eso, vemos lo que Dios hizo en el siguiente verso:

 

Verso 22: “Y el SEÑOR Dios dijo, ‘He aquí, el hombre ha llegado a ser como uno de Nosotros, para decidir bien y mal; y ahora, no sea que él extienda su mano y tome también del árbol de la vida, y coma, y viva para siempre—’”

 

Incluso hasta este día, no entendemos completamente este versículo. Pero sí sabemos que cuando lleguemos a la Nueva Jerusalén, ahí va a estar el Árbol de la Vida. ¿Cómo va a funcionar eso con seres espirituales? ¡Dios no nos lo ha revelado!

 

Por ahora, tenemos suficientes cosas de las cuales tenemos que encargarnos en nuestras vidas—como para preguntarnos cómo va a funcionar. Así que, lo sabremos en su momento.

 

Verso 23: “Por lo tanto, el SEÑOR Dios lo envió fuera del jardín del Edén a labrar la tierra de la cual había sido tomado. Y expulsó al hombre, y colocó querubines al oriente del jardín del Edén, y una espada llameante la cual giraba en toda dirección para guardar el camino al árbol de vida” (Versos 23 – 24).

 

Y aquí quiero darles una pequeña pista acerca esto: Todo el diseño del Tabernáculo y el Templo de Dios está basado en el Jardín del Edén y en la Puerta Oriental. Y ese es todo un tema por sí mismo.

 

Génesis 4 nos dice que ellos conocían las Leyes de Dios. Dios probablemente se introdujo a Adán y a Eva fuera del Jardín del Edén para enseñarles varias cosas que necesitaban saber. Ellos también tuvieron un sistema de sacrificios, que probablemente comenzó con las dos cabras con las que fueron hechas sus cubiertas después de que pecaron.

 

Génesis 4:1: “Entonces Adán conoció a Eva su esposa, y ella concibió y dio a luz a Caín, y dijo, ‘He adquirido un hombre del SEÑOR.’” ¡Probablemente por la profecía que fue dada cuando pecaron!

 

Eva pensaba que ese era aquel quien Dios había prometido. ¡Pero no era!

 

Verso 2: “Y dio a luz de nuevo, su hermano Abel. Y Abel fue un cuidador de ovejas, pero Caín fue un labrador de la tierra.”

 

No hay nada malo con ser un labrador de la tierra. Hay ciertas leyes sobre animales y sacrificios animales, sobre diezmos y primeros frutos que fueron dados a los hijos de Israel. Dios probablemente les dio las mismas leyes aquí—y aunque no se nos dice, podemos deducirlo de lo que Dios les dio a los hijos de Israel.

 

¿Cuáles eran las leyes concernientes a lo que crecía de la tierra? Las leyes que se le dieron a Israel eran que se debía traer lo primero de los primeros frutos, y ofrecerlo a Dios ¡dándoselo a los sacerdotes! Luego, de lo que el campo produjera, el diez por ciento también iría a Dios. Eso es lo que vemos con los hijos de Israel.

 

Así que, al no hacer Caín lo que era correcto, tuvo que romper una Ley de Dios concerniente a lo que debía haber traído, ¡y decidió traer lo que él quería!

 

Recuerden un principio que podemos aprender de esto: cada vez que decidimos hacer lo que pensamos que es correcto en lugar de lo que Dios dice que es correcto, nos vamos a meter en problemas.

 

Verso 3: “Sucedió que Caín trajo al SEÑOR una ofrenda del fruto de la tierra. Abel también trajo de los primogénitos de su rebaño y lo gordo de el... [Mostrando la vigencia de la ley de las primicias y ofrendas]... Y el SEÑOR tuvo respeto hacia Abel y su ofrenda, Pero no tuvo respeto hacia Caín y su ofrenda.” (Versos 3-4). ¿Por qué? ¡Porque él no hizo conforme al mandamiento de Dios!

 

Verso 5: “Pero no tuvo respeto hacia Caín y su ofrenda. Y Caín estuvo extremadamente enojado y su semblante cayó.”

 

Noten que Dios estaba en el lugar a donde se traía la ofrenda, y Caín tuvo celos de Abel porque Dios aceptó su ofrenda, pero no la de él.

 

Entonces, el hecho de que uno se enoje porque Dios dice que algo no está bien... ¿arregla el asunto? ¿Qué es lo que uno debe de hacer cuando peca? ¡Arrepentirse! Y en este caso, las cosas habrían sido totalmente diferentes si Caín se hubiera arrepentido, corregido el rumbo, y traído la ofrenda correcta de la tierra.

 

Verso 6: “Y el SEÑOR dijo a Caín, “¿Porque estas tan enojado? Y ¿Por qué ha caído tu semblante? Si haces bien... [Correctamente]... ¿no serás aceptado?... [Por supuesto]... Pero si no haces bien, el pecado está a la puerta....” (Versos 6-7). ¡Esa es una afirmación interesante! Examinemos eso por un minuto. ¿Qué es el pecado?

 

1 Juan 3:4: “Todo aquel que practica pecado está también practicando ilegalidad, pues pecado es ilegalidad.” O ¡La transgresión de la Ley!

 

Había una Ley aquí, porque no podía haber pecado sin una Ley. ¡Donde no hay Ley, no hay pecado! Así que, ¡la Ley estaba vigente! Esto también demuestra para aquellos quienes dicen que no había Ley desde Adán y Eva hasta los hijos de Israel en el Monte Sinaí, ¡Que están completamente equivocados! ¡Dios no puede traer un castigo si no hay Ley!

 

Génesis 4:7 “...Pero si no haces bien, el pecado está a la puerta. Su deseo es para ti, ¡pero tú debes gobernar sobre el!”—mostrando que cada ser humano, cuando peca, ¡debe vencer ese pecado! ¡Y eso comienza con el arrepentimiento! Tenemos que gobernar sobre:

 

·             Nuestra propia mente

·             Nuestras propias emociones

·             Nuestros propios sentimientos

 

¡Caín no lo hizo!

 

Verso 8: “Y Caín habló con su hermano Abel. Y sucedió que cuando estaban en el campo, Caín se levantó contra su hermano Abel y lo mató.”

 

¿No es ese el camino que siguen aquellos quienes se dedican al mal? Siempre van tras aquellos quienes son justos, ¡Para deshacerse de ellos! ¡Eso es lo que vemos en la actualidad!

 

Este nuevo movimiento social que tenemos ahora ¡es una religión! Y quieren imponerlo sobre todos los demás. Pero, ¿quién es el que está detrás de todo esto? ¡Satanás el diablo!

 

Verso 9: “Y el SEÑOR dijo a Caín, ‘¿Dónde está tu hermano Abel?’ Y él dijo, ‘No sé. ¿Soy yo guardián de mi hermano?’” ¡Por supuesto que sí!

 

Verso 10: “Y Él dijo, ‘¿Qué has hecho? La voz de la sangre de tu hermano clama a Mí desde la tierra.’”

 

¿Por qué? Porque Dios sabía dónde se había derramado la sangre, y la vida salía de ella ¡clamando a Dios!—en cierto sentido. Pero Caín no se arrepintió.

 

Aquí hay algo más que sucede, y podemos verlo en nuestra actualidad. Hay algunos países que están absolutamente malditos por causa de:

 

·             Su civilización

·             Su religión

·             Sus leyes

·             La forma en la que viven

 

¡El suelo está maldito!

 

Verso 11: “Y ahora tú eres maldito de la tierra, la cual abrió su boca para recibir de tu mano la sangre de tu hermano. Cuando labres la tierra, ella no te dará más su fortaleza, y serás un errante y un fugitivo sobre la tierra” (versos 11-12). Un nómada, ¡yendo de un lado a otro! Quedándose en un lugar solo el tiempo que los recursos se lo permitan.

 

 

Verso 13: “Y Caín dijo al SEÑOR, ‘Mi castigo es más grande de lo que  puedo soportar.’”

 

Ah sí, a aquellos quienes cometen crímenes terribles no les gusta el castigo cuando viene sobre ellos. Bueno, veamos:

 

Verso 14: “He aquí, Tú me has expulsado de la faz de la tierra hoy...” Caín ya no podía venir al oriente del Jardín del Edén para ir ante Dios; ¡fue expulsado!

 

“...y estaré oculto de Tu cara. Y seré un fugitivo y un errante en la tierra, y será que cualquiera que me encuentre me matará” (verso 14),  ¡Pobrecito!

 

Verso 15: “Y el SEÑOR le dijo, ‘Por tanto quienquiera que mate a Caín, venganza será tomada sobre él siete veces.’ Y el SEÑOR colocó una marca sobre Caín de modo que cualquiera que lo encontrase no lo matase.”

 

¿Cuál era esa marca? ¡No lo sabemos! ¡Podemos adivinar! (o especular): ¿Quizá era una cruz? ¡Todos la verían! Sabrían que esta era Caín, quien había matado a su hermano Abel.

 

Verso 16: “Y Caín salió de la presencia del SEÑOR y vivió en la tierra de Nod (2), al oriente del Edén.” ¡Lejos de ahí!

 

Verso 17: “Y Caín conoció a su esposa, y ella concibió y dio a luz a Enoc; y construyó una ciudad, y llamó el nombre de la ciudad según el nombre de su hijo, Enoc.” Así que, ¡construyó una ciudad en lugar de seguir errante!

 

Y todo esto tiene que ver con ¡La morada de Dios! Porque Dios quiere estar con Su pueblo. Pero las personas no quieren estar con Dios, Quien les da Sus Leyes.

 

Y quiero que piensen en eso, y veamos la maldición y desgracia que eso es sobre el pueblo de Estados Unidos en un sentido ‘religioso’ –  del mismo patrón que vemos aquí. Y todo para que puedan hacer sus propias reglas y regulaciones  y afirmar que ¡son de Dios!... ¡Aunque no lo sean!

 

Escrituras referenciadas:

 

1)           Efesios 3:14

2)           2 Pedro 1:1-4

3)           Tito 1:1-2

4)           2 Timoteo 1:6-9

5)           Génesis 1:1

6)           Job 35:1

7)           Job 38:1-7

8)           Apocalipsis 12:1-4

9)           Génesis 1:1-3, 20-22, 24-28, 31

10)        Génesis 2:1-3, 7-9, 15-25

11)        Génesis 3:1-19

12)        Génesis 5:1-3

13)        Génesis 3:20-24

14)        Génesis 4:1-7

15)        1 Juan 3:4

16)        Génesis 4:7-17

 

Escrituras referenciadas, no citadas:

 

·             Job 35-37; 39

·             Génesis 1:5; 14-16; 23

 

 

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