Restaurando el
Cristianismo original—¡para hoy!
Iglesia de Dios
Cristiana y Bíblica
P.O. Box 1442
Hollister, California 95024-1442
(831)-637-1875
Iglesiadedioscristianaybiblica.org
churchathome.org
cbcg.org
Fred R. Coulter
Ministro
Junio 13, 2013
Queridos hermanos,
El envío de este mes incluye el
folleto, Esto
es guerra espiritual. Escribí primero este folleto en 1993 cuando la
Iglesia de Dios más grande de ese tiempo fue subvertida desde adentro por
falsos ministros introduciendo falsas doctrinas. Ellos comenzaron con “nuevas enseñanzas”
sobre la naturaleza de Dios—las cuales, en realidad, eran una versión
astutamente disfrazada de la doctrina católica de la trinidad. El ataque continuó
al cambiar la observancia anual de la Pascua por un servicio de comunión
semanal. Finalmente, abandonaron el Sábado y los días santos en favor de la
observancia del domingo y los festivos mundanos. Ahora, 20 años después, esa organización
corporativa no existe más. A través de todo esto, Dios separó aquellos
quienes fueron fieles a la verdad al permitirles reagruparse en diversas
organizaciones Iglesia de Dios. No obstante, hoy en día, debemos ser mas
vigilantes porque el “dios de este mundo,” Satanás el diablo, nunca cesa en su
intento de socavar la fe de los ministros y hermanos de Dios el Padre y
Jesucristo.
La información en este folleto
nos ayudará a pararnos por la verdad—mientras aun estamos en
guerra espiritual. Necesitamos tener cuidado de los mecanismos que emplea Satanás
en sus intentos de subvertir nuestra fe. Como dijo Jesús: “Estén alerta no sea que cualquiera los
engañe. Porque muchos vendrán en Mi nombre, diciendo, ‘Yo soy el Cristo’;
y engañarán a muchos” (Marcos
13:5-6).
Si estamos amando a Dios el
Padre y Jesucristo, podemos permanecer fieles y vencer a Satanás y sus tácticas
astutas. El apóstol Pedro escribe: “Sean humildes por tanto bajo la mano poderosa de Dios para que Él
pueda exaltarlos en el debido tiempo; echando todas sus
preocupaciones sobre Él, porque Él cuida de ustedes.
“¡Sean sobrios! ¡Sean vigilantes! Porque su
adversario el diablo está merodeando como un león rugiente, buscando a
cualquiera que pueda devorar. A quien
resisten, firmes en la fe,
sabiendo que las mismas aflicciones están siendo cumplidas entre sus
hermanos que están en el mundo. Ahora
pueda el Dios de toda gracia, Quien nos ha llamado a Su gloria eterna en Cristo
Jesús, después de que hayan sufrido un poco, Él mismo perfeccionarlos,
establecerlos, fortalecerlos, y asentarlos” (I Pedro 5:6-10).
En un tiempo que tuvo muchos
paralelos a hoy en día—engañadores subvirtiendo las iglesias y el colapso de la
sociedad por medio del pecado, la corrupción y la guerra—el apóstol Juan advirtió
a los hermanos sobre engañadores que estaban tratando de subvertir su fe. “Gracia, misericordia, y paz estará
con nosotros de Dios el Padre, y del Señor Jesucristo, el Hijo del
Padre, en verdad y amor. Me alegro sobremanera de que he encontrado
entre sus hijos aquellos que están caminando en verdad, exactamente como
recibimos mandamiento del Padre. Y ahora le
ruego, señora, no como si le estuviera escribiendo un nuevo mandamiento, sino
eso que hemos observado desde el principio, que nos amemos unos a otros.
Y este es el amor de Dios: que caminemos de acuerdo a Sus
mandamientos. Este es el mandamiento, exactamente como lo escuchó desde el
principio, para que pudiera caminar en el. Porque muchos engañadores han
entrado en el mundo—aquellos que no confiesan que Jesucristo ha venido
en la carne. Este es el espíritu del engañador y el anticristo. Cuídense a sí mismos para que no podamos perder las cosas
que hemos logrado, sino que podamos recibir una recompensa completa” (II Juan 3-8).
Jesús da esta promesa a
aquellos que venzan: “Pero
retengan lo que tienen hasta que venga. Y a aquel que venza, y guarde
Mis obras hasta el fin, Yo le daré autoridad sobre las naciones; y él
las pastoreará con vara de hierro, como las vasijas de cerámica son
rotas en pedazos; como Yo también he recibido de Mi Padre” (Apocalipsis 2:25-27).
¿Dónde estamos hoy en día? Lo que ocurre en la Iglesia de Dios, a
menudo tiene lugar en el mundo. En verdad, es exactamente como dijo Jesús que sería
en el tiempo del fin: falsos profetas, guerras, convulsiones, revoluciones, opresión
por gobiernos. Examinemos una profecía clave que será cumplida desde ahora y
hasta el regreso de Jesús—el engaño global.
Las profecías concernientes a
los tiempos del fin están siendo cumplidas paso a paso. Y para las que todavía
permanecen, el fundamento de su cumplimiento ha sido echado. En verdad, las
condiciones del mundo—en religión, gobierno y economía—están empeorando y
empeorando. Muy pocos están luchando contra la ola poderosa de engaño, corrupción
y escándalos. Y, a tiempo, perderán la batalla—porque la poderosa elite de este
mundo, quienes sirven a Satanás el diablo, son capaces de frustrar y derrotar
sus esfuerzos.
Mientras
hay muchos que comprenden que Satanás es la fuente de todo mal, hay muy pocos
para realmente hacer retroceder la ola de mal que está llegando sobre el mundo.
Como es profetizado concerniente a estos últimos días (Apocalipsis 13), el
mundo está incrementadamente llegando bajo el poder de Satanás—sumergido por
pecado y opresión. Cuando la mayoría de la gente rechaza a Dios y Su Palabra, terminarán
ultimadamente adorando a Satanás (Apocalipsis 13; II Tesalonicenses. 2:1-12). Por
lo tanto, Satanás está realmente engañando al mundo entero (Apocalipsis 12:9). Él
retiene un poderoso agarre sobre toda la humanidad—con la excepción de los
elegidos, quienes pertenecen a Dios el Padre y Jesucristo (I Juan 5:19).
Durante la tentación de Satanás
a Jesús, el diablo Le ofreció poder y gobierno sobre todos los reinos del mundo:
“Entonces el diablo lo llevó a
una montaña alta y le mostró todos los reinos del mundo en un momento de
tiempo. Y el diablo le dijo, “Te daré toda esta autoridad, y la gloria de todos
ellos; porque me ha sido dada a mi, y yo la doy a quien desee. Por tanto, si Tú me adoras en mi presencia, todas las cosas
serán tuyas.” Pero Jesús respondió y le dijo, “Ponte detrás de Mi,
Satanás; porque esta escrito, ‘Adorarás al Señor tu Dios, y a Él
solamente servirás.’ ”” (Lucas
4:5-8).
En primer lugar, ¿cómo fue dada
toda esta autoridad y poder a Satanás? Esto comenzó con Adán y Eva cuando
comieron del “Árbol del conocimiento del bien y del mal.” Satanás los llevó a
creer que por comer de ese árbol serían como Dios—capaces de decidir por sí
mismos lo que es bueno y malo. En verdad, cuando rechazaron las
instrucciones de Dios se transfirieron a sí mismos de estar bajo la autoridad
de Dios a estar bajo la autoridad de Satanás el diablo.
Desde aquel tiempo hasta ahora—con
la excepción de aquellos a quienes Dios está llamando directamente—toda la
humanidad ha sido dejada para desarrollar sus propias religiones, gobiernos
y sistemas económicos. Así, mientras las naciones e imperios pueden levantarse
a un gran poder, ultimadamente todos ellos caerán porque han rechazado
al verdadero Dios e inconscientemente siguieron a Satanás.
De la Palabra de Dios sabemos
que Satanás, en el tiempo del fin, llegará a ser tan poderoso que solo el
regreso de Cristo traerá un fin a su gobierno engañoso. Cuando Jesús
regrese, Él removerá primero esta ceguera espiritual: “Y destruirá en esta montaña la cara de la
cubierta la cual cubre a toda la gente y el velo que está tejido sobre todas
las naciones” (Isaías
25:7).
Hoy en día, podemos ver que
todo el mundo está siendo seducido y traído bajo el poder de Satanás mientras
teje su vasta decepción, el cual, como un velo o cobertura, ciega a la
humanidad para su sistema. El resultado es que la mayoría de la gente hoy en día
están dejando a un lado la Palabra de Dios por los placeres del pecado: “Pero hombres malvados e impostores llegarán
a ser peor y peor, engañando a otros y siendo engañados ellos mismos” (II Timoteo 3:13). Así, el pecado y la trasgresión
en contra de Dios está multiplicándose, y la ilegalidad abunda mientras todos
hacen lo que es correcto en sus propios ojos. El pecado es aceptado como
normal. La perversión es abrazada como un comportamiento ilustre. Consecuentemente,
las sociedades están hundiéndose más y mas hondo en el vértice del mal y la
maldad, mientras son descarriados por Satanás y sus demonios. Pablo escribe: “Ahora el Espíritu nos dice
explícitamente que en los últimos tiempos algunos apostatarán de la fe, y
seguirán espíritus engañadores y doctrinas de demonios; hablando mentiras en
hipocresía, sus conciencias habiendo sido cauterizadas con un hierro
caliente” (I Timoteo
4:1-2).
La
Biblia repetidamente profetiza la caída de naciones porque ellas sabiéndolo
rechazan a Dios y Su Palabra. Mientras continúan endureciendo sus corazones y se
deleitan en su rebelión voluntaria—abandonando completamente a Dios—Él los
abandona a revolcarse en sus pecados. Dado que Dios no será burlado, esta es
una medida necesaria que Él toma con la esperanza de que se arrepientan. Si no
se arrepienten, el juicio justo de Dios es ejecutado totalmente sobre ellos.
Aunque se ha repetido muchas
veces en la historia, lo que Pablo fue inspirado a escribir en Romanos capitulo
1 está en plena fuerza hoy en día—mundialmente. “Ciertamente, la ira de Dios es
revelada desde el cielo sobre toda impiedad e injusticia de los hombres que
suprimen la verdad en injusticia; porque eso que puede ser conocido de Dios es
manifiesto entre ellos, porque Dios se los ha manifestado; porque las cosas
invisibles de Él son percibidas desde la creación del mundo, siendo
entendidas por las cosas que fueron hechas—Su eterno poder y Divinidad—de modo
que no tienen excusa;
“Porque cuando conocieron a Dios, no Lo
glorificaron como Dios, ni fueron agradecidos; sino que se hicieron vanos en
sus propios razonamientos, y sus tontos corazones fueron oscurecidos. Mientras profesaban a sí mismos ser los sabios, se
hicieron tontos. Y cambiaron la gloria del Dios
incorruptible en la semejanza de una imagen de hombre corruptible, y de
aves, y criaturas de cuatro patas, y cosas rastreras.
“Por esta causa, Dios también los abandonó a
la inmundicia a través de la lujuria de sus corazones, para deshonrar sus
propios cuerpos entre ellos mismos, quienes intercambiaron la verdad de Dios
por la mentira; y adoraron y sirvieron a las cosas creadas más que Aquel que es
el Creador, Quien es bendito por los siglos. Amen.
“Por esta causa, Dios los abandonó a
pasiones vergonzosas; porque incluso sus mujeres cambiaron el uso natural del
sexo a eso que es contrario a la naturaleza; y en la misma manera también los hombres, habiendo dejado el uso
natural del sexo con la mujer, fueron encendidos en sus pasiones
lujuriosas el uno al otro—hombres con hombres cometiendo actos obscenos
sin vergüenza, y recibiendo de regreso dentro de si mismos un castigo apropiado
por su error.
“Y en la proporción exacta como ellos no
consintieron tener a Dios en su conocimiento, Dios los abandonó a una
mente reprobada, para
practicar aquellas cosas que son inmorales; siendo llenos con toda injusticia,
inmoralidad sexual, maldad, codicia, malicia; llenos de envidia, asesinatos,
guerras, engaños, malas disposiciones; chismosos, calumniadores, odiadores de Dios, insolentes, orgullosos, altivos,
inventores de cosas malas; desobedientes a los padres, nulos de entendimiento, rompedores del pacto, sin afecto
natural, implacables e inmisericordes; quienes, sabiendo el juicio justo de Dios, que aquellos que
cometen tales cosas son dignos de muerte, no solamente practican estas cosas
ellos mismos, sino que también aprueban a aquellos que las cometen” (Romanos 1:18-32).
Cuando el anticristo de
Apocalipsis 13 entre en escena, el engaño será completo. Así, el escenario será
colocado para el inicio de la Gran Tribulación—cuando a la bestia le es dado
poder total y autoridad sobre todo el mundo. Este será el final imperio
global satánico. Después que la herida mortal de la bestia es sanada, él será
adorado como Dios: “Y vi una
de sus cabezas como si estuviera herida de muerte, pero su herida mortal
fue sanada; y la tierra entera estuvo asombrada y siguió a la bestia. Y adoraron al dragón, quien dio su autoridad a la bestia. Y adoraron a la bestia, diciendo, “¿Quién es
como la bestia? ¿Quién tiene el poder de hacer guerra contra él?”
“Y una boca hablando grandes cosas y
blasfemias le fue dada; y autoridad le fue dada para continuar por
cuarenta y dos meses. Y abrió su boca en blasfemias contra Dios,
para blasfemar Su nombre, y Su tabernáculo, y a aquellos que viven en el
cielo. Y le fue dado poder para hacer guerra contra los santos, y
vencerlos; y le fue dada autoridad sobre toda tribu e idioma y nación. Y
todos los que viven sobre la tierra lo adorarán, cuyos nombres no han sido
escritos en el libro de vida del Cordero muerto desde la fundación del
mundo. Si alguno tiene oído, oiga” (Apocalipsis 13:3-9).
Hoy en día, el mundo está lleno
de caos y confusión, guerras y desastres, plagas y peligros financieros—todo lo
cual está poniendo el camino para este final sistema de la bestia. Cuando
llegue, el mundo será abrumado por gran engaño. En ese tiempo, el poder
de Satanás habrá alcanzado su pico. Pablo advierte a los cristianos de no ser engañados
por la bestia que viene y su sistema satánico mundial: “Ahora les suplicamos, hermanos,
concerniente a la venida de nuestro Señor Jesucristo y nuestra reunión con Él,
que no sean prontamente sacudidas sus mentes, ni estén angustiados—ni por
espíritu, ni por palabra, ni por epístola, como si fuera nuestra, diciendo
que el día de Cristo esta presente.
“No permitan que ninguno los engañe por
ningún medio porque ese
día no vendrá a menos que la apostasía [el completo rechazo del mundo a Dios el Padre y Jesucristo] venga primero, y el hombre de pecado sea
revelado—el hijo de perdición, aquel que se opone y exalta a sí mismo sobre
todo lo que es llamado Dios, o que es objeto de adoración; que entra al
templo de Dios y se sienta como Dios, proclamando que él mismo es Dios.
“¿No recuerdan que cuando aun estaba con ustedes, les dije
estas cosas? Y ahora entienden qué lo esta reteniendo para ser revelado
en su propio tiempo establecido. Porque el misterio de ilegalidad está ya
trabajando; solamente que hay uno Quien lo esta
restringiendo al tiempo presente hasta que surja de en medio. Y entonces el ilegal será revelado (a quien el Señor consumirá
con el aliento de Su boca, y destruirá con el brillo de Su venida); aquel cuya
venida esta de acuerdo al trabajo interno de Satanás, con todo poder y señales
y maravillas mentirosas,
Y con todo engaño de
injusticia en aquellos que están pereciendo porque no recibieron el amor de la
verdad, para que pudieran ser salvos” (II Tesalonicenses 2:1-10).
Note que cuando la gente
rechaza la verdad de Dios y llega a ser atrapada en pecado—adorando en
realidad este anticristo poseído por Satanás—Dios responde en especie. “Y por esta razón, Dios enviará sobre ellos
un engaño poderoso que les hará creer la mentira, para que puedan ser
juzgados todos los que no creyeron la verdad, sino se complacieron en la
injusticia” (versos
11-12).
La
alentadora carta de Pablo a los Tesalonicenses es también para nosotros hoy en día,
de modo que podamos así mismo permanecer fieles—a pesar de lo que está teniendo
lugar en el mundo: “Entonces estamos obligados
a dar gracias a Dios siempre concerniente a ustedes, hermanos, quienes son
amados por el Señor, porque Dios desde el comienzo los ha llamado
hacia salvación a través de la santificación del Espíritu y
creencia de la verdad hacia la cual Él los llamó por nuestro evangelio
para la obtención de la gloria de nuestro Señor Jesucristo. Así entonces, hermanos,
manténganse firmes, y aférrense a
las ordenanzas [las verdaderas enseñanzas de
Jesucristo] que les fueron enseñadas, sea por
palabra o por nuestra epístola. Entonces pueda nuestro Señor Jesucristo mismo, y
Dios—incluso nuestro Padre, Quien nos amó y nos dio ánimo eterno y buena
esperanza a través de la gracia—animar sus corazones y establecerlos en
cada buena palabra y obra” (versos 13-17).
Siempre
recordemos, dado que el Señor está por nosotros, nada puede pararse
contra nosotros. El Rey David escribió: “El
SEÑOR es mi luz y mi salvación; ¿A quien temeré? El SEÑOR es la fortaleza de mi
vida; ¿De quien estaré asustado? Cuando el malo, mis enemigos y mis
perseguidores, vinieron sobre mí para comer mi carne, ellos tropezaron y
cayeron. Aunque un ejercito acampe contra mi, mi corazón no estará asustado;
aunque guerra se levante contra mi, aun entonces estaré confiado. Una cosa he
deseado del SEÑOR, que buscaré: que pueda vivir en la casa del SEÑOR todos los
días de mi vida, para observar la belleza del SEÑOR y para preguntar en Su templo,
porque en el tiempo del problema Él me esconderá en Su pabellón, en el lugar
secreto de Su tabernáculo Él me esconderá; Él me pondrá sobre una roca” (Salmo 27:1-5).
Hermanos, cada día necesitamos
acercarnos a Dios en oración sentida y estudio para que podamos continuar
creciendo en gracia y conocimiento y siempre estar venciendo. Continuamente le
damos gracias a Dios el Padre y Jesucristo por Su bondad y misericordia. Les
agradecemos su firme amor y fidelidad a Dios y uno al otro. Agradecemos sus oraciones
por nosotros y por todos los hermanos—y por su fidelidad en diezmos y ofrendas.
Oramos que Dios continúe bendiciéndolos y guardándolos en todo. Continuamos
orando por ustedes, por su salud, su sanidad y que el amor y gracia de Dios estén
sobre ustedes en toda circunstancia.
Con amor en Cristo Jesús,
Fred R. Coulter
FRC
P.S.: Mi esposa, Dolores, se está
recuperando de su ataque de neumonía. Ella agradece enormemente sus oraciones y
les da gracias por sus tarjetas, bondad y atenciones.